𝐂𝐎𝐍𝐒𝐄𝐉𝐎𝐒 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐔𝐍 𝐄𝐍𝐀𝐌𝐎𝐑𝐀𝐃𝐎. STH ©

ACTO V: La grasa.

Tails suspiraba pesadamente. Como el resultado del plan de Amy no rindió frutos ahora se encontraba pagando el injusto precio trabajando forzosamente en Meh Burgers junto a Sonic: el imbécil que lo enamoró y que ahorita el zorro lo andaba insultando silenciosamente en todos los idiomas que sean posibles.

Uy si, estar ahí afuera, el sol pegándote en la cara, con el clima a cuarenta grados más tener en frente papitas fritándose que además también tiran una bomba de calor; con el delantalsillo todo roto y sucio, el sudor que te corre por la cara así como si fueras un gordo silla aguantándose las ganas de comer unos cheetos que tiene en frente de él mientras juega Genshin Impact y sus dedos son los únicos que hacen ejercicio y hasta eso les alcanza.
Media rara la explicación pero se entiende que era horrible para el de dos colas.

───Cuando llegue a casa voy a bañarme cinco veces más para sacarme el olor a nuggets de pollo extra refritos ───finalizó las papas para ponerlas en la cajita del MaC Donald pirata───, y cuando termine eso voy a ir a la choza de Sonic a ahogarlo con su propia almohada de mona china. ───Terminó llamando al recién amenazado sordo para decirle que el pedido estaba listo.

───¡Genial, Tails!, mira eso, eres genial en la cocina, ¡Ja, ja!, todas las mujeres te querrán si practicas más esa técnica. ───Bromeó llevándose las papas fritas.

Tails sólo se lo quedó mirando haciendo un mohín con una sonrisa forzosa que duró sólo un segundo y volvió a preparar el siguiente pedido.

David había renunciado al trabajo y se había ido a vivir una vida como esclavo de Tommy Trueno. Ni idea, re loco el man pero qué se le va a hacer. Seguro lo usarían para probar artículos de belleza como cremas nuevas a ver si son peligrosas o no.
Así que bueno, el lugar de comida rápida estaría lleno de gente sabiendo que los atendería el erizo azúl más rápido del pueblo. No, no Shadow porque él vive en el bosque re lejos y además entró en depresión por no poderle ganar ni una partida de ajedréz a Miles la otra vez que se quedó con él. Aún así lo extraña, estaba re solito, pobre.

El ojiazúl oyó como lo llamaban por su nombre y fue corriendo a por el llamado.

───Amigo, ve a atender el siguiente pedido, yo ya vuelvo en un ratito. ───Le dijo Sonic.

Cómo quería pegarlo ahora mismo. Además de sordo, estúpido, hijo de puta, marrano, antipático, hijo de su mamá, de su tía, de su abuela, de su prima; era también un irrespontable en el trabajo saltándose sus pedidos e ir a, no sé, buscar minitas para presumirse.

Pero, a pesar de todo el enojo que Tails sentía por dentro; no podía lidiar contra lo perdidamente enamorado que estaba de él, y eso es injusto, pero le contestó con un:───¡Claro, Sonic!, yo me encargo, amigo.

───¡Gracias, Ñoño!, eres mi mejor amigo para ratearme a por nenas hermosotas. ───Galaneó y se fue corriendo a toda velocidad.

No le quedaba más que darse por vencido y atender a la mujer que esperaba pacientemente.
Se dio la vuelta y la miró a la cara cansado.