"Con una parte de mi corazon" (Zhongli x Tartaglia - fanfic) GENSHIN IMPACT

I

Sabes bien que te he pedido que pagues por muchas cenas, antigüedades, ropa y joyas de incalculable valor, es por esto mismo que aunque te cueste creerlo he pagado por todo esto yo mismo, desde las blancar cortinas que se vuelven doradas cuando la luz del sol las atraviesan hasta esta cama en la que espero puedas tener descanso, porque Liyue es mi hogar y deseo quedarme mientras que tu de tanto vagar por todos lados pareces no tener uno, así que en retribución a todo lo invaluable que me has ofrecido deseo darte algo igual de precioso, este lugar que es completamente de mi para ti, un lugar al que deseo que vuelvas cuando no sientas el andar de tus pies y la fatiga te pueda, Ajax, déjame darte un hogar.

◇

Siempre he encontrado curioso el como rebosas de tanta energía, listo para hundirte en cualquier infierno para salir de el victorioso y si embargo tus ojos jamás abandonan ese acabado opaco, que ni al dormir tu ojeras desaparecen de tu rostro y te hacen ver frágil, como si estuvieras a punto de romperte pero no haces más que despertar y tu reír y parlotear me desarman el nudo que se me formaba en la garganta de verte tan débil, vuelves a tener esa energía que me arrastra a tus interminables paseos y desafíos, me hace cuestionarme si realmente tenía una razón para preocuparme hasta que vuelves a caer dormido y de nuevo pareciera que la oscuridad de la noche calara en tu corazón, mientras duermes y esa energía que desbordas se disipa, te aferras a mi entres sueños, tan débil que por darte descanso solo me queda abrazarte hasta la mañana.

-Tengo la sensación de haber tenido un sueño muy largo pero no logro recordarlo- la luz dorada de la mañana acariciaba sus despeinados mechones haciéndolos ver relucientes como el cobre, descansaba en una de la sillas en la cocina mientras esperaba a que le preparara el desayuno -¿Y tu, Zhongli? ¿Cómo dormiste? Apuesto que dormiste como una roca- su risa revoltosa brotó holgadamente de sus labios.

-Plácidamente como es de esperar, es bastante relajante dormir gracias a tu temperatura corporal- dispuse de las cosas en la mesa para desayunar, Ajax de inmediato agarró tanto como pudo en su plato mientras reía por mi comentario.

-Siempre tan estricto al hablar ¿Porque no admites que simplemente te gusta abrazarme al dormir?- Sin poder evitarlo su coqueteo me hizo sonreír.

-Supongo que tienes razón- 

Disfrutamos del transcurso de la mañana, el con sus comentarios cursis que logran hacerme reír como no la hacia en siglos. Pasar el tiempo con Ajax es extraño, he vivido muchos años, tantos que una vida humana es como un suspiro en mi existencia pero cuando se trata de él es como si un par de horas fueran eones, me hace querer estar con él asi, desayunando en nuestra casa, viéndolo disfrutar estas pequeñas cosas, pero todo lo bueno dura poco.

-¡Señor Tartaglia! ¡Perdone interrumpirlo tan temprano en la mañana pero han enviado ordenes desde Snezhnaya!- Ajax tiene que trabajar.

-Agh... De nuevo otra misión de los heraldos- siempre se queja de la misiones pero lo conozco tan bien, sé que no le gusta dejarme solo pero no hay nada que te emocione más que la oportunidad de vivir alguna aventura, yo ya viví muchas guerras y hazañas, mi alma ya esta cansada y deseo descansar pero él, él es humano y ha vivido tan poco, hay tantas cosas que le quedan por hacer y parece no querer perder un segundo para hacerlas todas. Aun así sigue volviendo aquí, perdiendo el tiempo de su corta vida mortal para estar conmigo, es por eso que no alego cuando empaca sus cosas y se va a una nueva aventura, con la esperanza de que vuelva a contarme en que lío se metió esta vez.

-Adios, Zhongli, Cuando vuelva ya escucharas como he vencido a un nuevo enemigo-

-Hasta luego, Ajax, porfavor cuidate-

-¿De qué hablas? No tienes nada de que preocuparte, despues de todo es de mi de quien estamos hablando-