Enamorada del Enemigo 𓆗 // Draco Malfoy ♡

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟑𝟗

𝐍𝐨 𝐝𝐞𝐛𝐨 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐫 𝐦𝐞𝐧𝐭𝐢𝐫𝐚𝐬

Llegó la hora de la detención con Umbridge, Harry y yo nos dirigimos a su oficina

Marine: ¿Qué te dijo la profesora Mcgonagall?

Harry: Me dio galletas y me dijo que portarme mal en las clases de esa señora me traerá problemas más grandes, ya sabes como viene del ministerio ¿y Snape que te dijo?

Marine: Me golpeó en la cabeza con un pergamino y me dijo "Niña tonta" (riendo)

Harry: (riendo) Bueno me fue mejor que a ti

Marine: Sí ya lo creo, bueno hemos llegado, no quiero entrar ahí

Harry: Ni yo pero tenemos que, anda ven por cierto pude notar que ciertas personas ajenas a nosotros ya saben lo de que el profesor Lupin no es...

Marine: ¡El profesor Lupin es y siempre será mi papá Harry, que no haya duda de eso!

Harry: Lo se, lo siento no quería hacerte sentir mal

Marine: No, yo lo siento Harry no debí gritarte es solo que ese tema me pone de malas y muy tensa.

Harry: Lo se, entiendo

Tocamos la puerta y la horrible voz de Umbridge nos permitió la entrada, Todas las superficies estaban recubiertas con paños y encajes de color rosa. Varios recipientes contenían flores desecadas, cada uno en su propio mantel y en uno de los muros había una colección de platos ornamentales, todos pintados con un gato de colores chillones que tenia distintos tipos de moños alrededor del cuello. Eran tan desagradables que Harry y yo quedamos mirándolos, asqueados Umbridge habló nuevamente.

Umbridge: Buenas tardes, Señor. Potter, para usted también Señorita Lupin

No había visto a la profesora la primera vez porque tenia puesta una siniestra túnica floreada que se mimetizaba muy bien con el mantel del escritorio que estaba detrás de ella.

MyH: Buenas tardes profesora (tensos)

Umbridge: Bien, tomen asiento queridos van acopiar algunas líneas para mí, como ya notaron hay una pluma sobre el escritorio es la que ocuparán para sus líneas Sr. Potter. Quiero que escriba, "No debo decir mentiras" y Señorita Lupin usted escribirá "Debo respetar a mis mayores"

Harry: ¿Cuántas veces?

Preguntó Harry, fingiendo creíblemente amabilidad.

Umbridge: Oh, las suficientes veces hasta que la idea requiera quede asimilada.

Se dirigió hacia su propio escritorio, se sentó y enrolló unos pergaminos que parecían ensayos para corregir

Marine: No nos ha proporcionado tinta.

Umbridge: Oh, no necesitan tinta

Rode los ojos y comencé a escribir inmediatamente deje escapar una exclamación de dolor, mire a Harry el cual tenía la misma expresion que yo, Las palabras habían aparecido sobre el pergamino en algo que parecía tinta roja brillante. Al mismo tiempo, las mismas letras se dibujaron en el dorso de nuestra mano. La herida comenzó a cerrarse al mismo tiempo que la contemplabamos, atónitos, dejando una superficie suave y enrojecida.

Harry miró a Umbridge con rencor y se contuvo de decir algo, volvió su mirada hacia mí preocupado, Ella nos había estado observando, con su boca amplia como la de una rana ensanchada en una sonrisa.

Umbridge: ¿Sí? ¿Algún problema jóvenes?

Harry: Nada...

Y así continuamos escribiendo una y otra vez, las palabras en el pergamino, en lo que pronto note qué no era tinta, sino mi propia sangre; con cada línea quería llorar pero no le iba a dar el gusto de verme mal.