Donde Harry visita mucho la Lechuzería, Malfoy también y todo es culpa de Dunbar

16. 18 de Febrero, sábado: Breve Intermedio

"Te vas a congelar ahí dentro", dijo Draco, mirando con insistencia al lago.

Estaban dando un paseo a su lado, Harry se las había arreglado para invitarlo con la excusa de prepararse para la Prueba.

El sí de Draco había sido un poco dubitativo. Últimamente estaba más callado, más consciente de su proximidad cuando estudiaban juntos. No había vuelto a mencionar lo sucedido en el baño, y Harry tampoco había preguntado, no queriendo apartarlo.

Pero Merlín, cuánto deseaba poder hacerlo. Preguntarle sobre ello, y escuchar lo que Draco había querido decir. Sentir esas manos acunando su cara de nuevo, mirar los impresionantes ojos grises y escuchar su nombre de los labios del otro.

"Ya me lo dirá cuando esté preparado" pensó Harry, mientras caminaban por el Lago.

"¿Se te ha ocurrido alguna forma de permanecer bajo el agua durante tanto tiempo?" preguntó Draco. "Ya queda menos de una semana".

Había una gravedad en su voz que hablaba de su preocupación, y Harry dejó escapar un suspiro.

"Aún no", dijo. "Hermione me está ayudando a buscar plantas ahora, pero hasta ahora no ha habido suerte".

Draco se relamió los labios, con el ceño fruncido.

"No te preocupes, encontraré la manera", prometió Harry. Cuando el rubio lo miró, le dedicó una sonrisa. "No puedo  avergonzar a todo el colegio, ¿verdad?"

"No, no puedes", dijo Draco. Volvió a mirar alrededor del lago. "Si lo que buscas son plantas, ¿no deberías preguntarle a Longbottom? ¿No está un poco obsesionado con ellas?"

Harry parpadeó. "¿Cómo sabes eso?"

"Los Slytherin lo sabemos todo", dijo Draco. Sonrió cuando Harry puso los ojos en blanco y añadió: "Y Pansy es una fuerza a tener en cuenta cuando se trata de cotillear. Sobre todo si es algo que le hace gracia".

Harry frunció el ceño. "Querrás decir algo de lo que se pueda reír".

"¿Acaso no nombró a su cactus?"

"Puede ser, pero todo el mundo tiene aficiones raras".

"Yo no".

"¿Y lo de hacer chapas?"

"Eso fue una vez, Potter" murmuró Draco, empujando a Harry cuando se rió. "Lo que sea. La extraña obsesión de Longbottom puede resultar útil ahora. Así que asegúrate de preguntarle".

"Sí, señor".

Draco se detuvo en sus pasos y se giró para mirarlo de frente. Lo miró a los ojos. "Harry", dijo con severidad.

Harry le sujetó los brazos, apretándolos ligeramente. "Me estoy tomando esto en serio, lo prometo. Le preguntaré a Neville esta noche, estoy seguro de que estará encantado de ayudar y sacará todos los libros que tiene y no me dejará dormir hasta que me cuente todo sobre las Mandrágoras".

Draco esbozó una sonrisa ante eso, y Harry se relamió los labios. "Creo que Moody le dio otro, de hecho".

"¿Moody?" Draco frunció el ceño. "¿Por qué?"

"Supongo que quería disculparse por lo ocurrido durante la clase". Harry hizo una mueca, lamentando ya haber mencionado al hombre.

"Ese hombre es un absoluto lunático", murmuró Draco. "¿En qué estaba pensando Dumbledore cuando lo contrató?"

"En que necesitábamos un profesor y no había aspirantes, probablemente". Volvió a apretar el brazo de Draco. "Quizá podría pedirle que me convirtiera en un pez".

"Eso no es gracioso, Harry", dijo Draco, apartándolo de un empujón, pero otra sonrisa apareció en su rostro.

Volvieron a caminar hacia el castillo, separándose cerca de la entrada. Harry lo vio desaparecer por un pasillo, y luego se dirigió a la Torre Gryffindor.

Neville tenía demasiados libros de Herbología.