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DING DONG

-Hola -dijo con alegría

-Tu otra vez...

-Baji es una persona cuidadosa -dijo Kazutora.

-No voy a salir, puedes irte -el rubio comenzó a cerrar la puerta pero la mano de Kazutora se interpuso parandola.

-Estas comiendo pizza quiero un poco - y entró.

Al final los dos se sentaron en la mesa a comer mientras veían una película random que estaban echando en la tele.

-Esa mujer seria del tipo de Baji -menciono Kazutora - Pero, yo prefiero esa de hay -señalo a otra.

-Ajamm... - Chifuyu apenas lo escuchaba, él solamente quería estar solo.

-Eso, me recuerda a cuando Baji estaba con aquel chaval -ahora si que lo escuchaba, ese tema si que le interesaba - Se acostaba con otras personas y Baji se puso celoso .Menos mal que lo paramos a tiempo, por eso te digo que será mejor que no engañes.

-Vale...

-No lo has hecho ¨todo¨con Baji, ¿verdad?

Chifuyu casi se ahoga.

-Me lo cuenta todo jajaja -le dio una servilleta - ¨Eres el primero al que amo¨ me dijo, parece que le gustas de verdad pillín.

-¿Te usa de corre, ve y dile?

-No, es la verdad. Baji a pesar de todo ha tenido una vida dura, solamente tienes que verle las cicatrices en la espalda. Es joven y tiene ya muchos enemigos... las guerras de pandillas es algo que no se puede evitar -le miró a los ojos -Tengo esperanzas en ti, si Baji te tiene a ti podría desahogarse con alguien más.

Chifuyu se sentía como una mierda. Lo que sucedió hace unos días con ese tal Kisaki era algo que no podía dejar de pensar. Estaba entre la espada y la pared. Si decidía de matar a Baji irían a por él. Si no mataba a Baji también irían a por él. ¿Qué podía hacer?

***

-Este hombre llega tarde... -dijo Chifuyu enfadado.

Eran las 23:00. Le había llegado un mensaje de Baji para que se reunieran en un nuevo hotel, pero habían pasado una hora esperando y aún no llegaba. Se estaba empezando a impacientar... ¿Y si le había sucedido algo grave?

Clack sonó la puerta.

-¿Habíamos quedado? -Baji entraba con los colores rojos en la mejilla. Estaba borracho.

-Si, llevo esperándote una hora -el rubio se acercó hasta donde el moreno estaba -Si llegas tarde dímelo en el mensaje, no me gusta esperar.

Baji le besó.

-Eres lindo cuando te enfadas

Volvió a besarle más profundamente. 

-Me encantas -le dijo y volvió a tomar su boca - Pero... estoy cansando...

Se durmió. Si. En los brazos de Chifuyu. Si. Chifuyu tuvo que cogerlo como pudo y tumbarlo en la cama.

-Eres increíble - suspiró el rubio.

Comenzó a quitarle la corbata para posteriormente la camisa. En el pecho tenía un vendaje que el rubio le rozó con las llenas de sus dedos. El moreno frunció el ceño, aún le dolía por el tacto. Chifuyu buscó en el cuarto de baño un cubito para llenarlo con agua, parecía que el moreno tenía un poco de fiebre, con un paño lo humedeció y se lo puso en la frente. 

A la mañana siguiente Baji amaneció como nuevo.

-Buenos días -le miró el rubio

-Chifuyu, ¿dormiste aquí?

-Si, te quiero decir algo

-¿Qué?

-¿¡CÓMO SE TE OCURRE BEBER CUANDO TIENES UNA HERIDA?! ¡¡TEN UN POCO DE CABEZA Y CUIDA TU CUERPO!! -y se dirigió hacia la puerta.

Pero Baji salió corriendo en su busca y lo abrazó por la espalda.

-¿Estabas preocupado? -sonrió en su espalda

-Mmm... Eres el que me paga, tienes que estar vivo para solucionar mis deudas.

-Es cierto -afianzó el abrazo -Te quiero.

Chifuyu se sonrojó.

-Vamos a pedir la comida, ¿vale?

Cuando llegó la comida Baji no tardó nada en empezarla. Chifuyu se quedó mirando como comía tan relajadamente. A simple vista Baji parecía un hombre normal. En cierto sentido, agradecía que Baji fuese así de ¨cariñoso¨. Terminaron de comer y Chifuyu fue al baño para coger un set de cuidados y le vendó el brazo.

-Eres bueno vendando -comentó Baji

-Estaba en el club de Kendo pero no era bueno, me uní porque mi amigo me lo dijo.

-¿El que te dejó la deuda?

-Si...

-¿Lo desprecias?

-Si, pero no cambia mi situación por haber sido un gilipollas... Supongo que tendría sus razones. Pero no caeré dos veces con la misma piedra.

-Entonces, ¿confías en mi?

-Mmm... -se sonrojó

-Mi amor por ti ha ido subiendo estos días - se acercó a él para besarlo.

El rubio se dejó llevar y se tumbó en el sofá dejando al moreno encima suya.

-Será mejor que descanses...

-Solo un poquito... - subió la camisa del rubio dejando a la vista uno de sus pezones que chupó con fuerza -Mmm... que duros...

-No lo chupes... -respiro profundo.

Baji le tocó el paquete por encima de la ropa.

-Estas duro, Chifuyu -le miró desafiante - chuparé tu pene también.

Le quitó los pantalones y los calzoncillos. 

El pene de Chifuyu estaba duro y sensible. Baji lamió la punta y el rubio se arqueó.

-¿Qué haces? -se incorporó en la cama.

-Siempre me lo haces tú.

-Si, pero los clientes no lo hacen.

-Ósea que... realmente soy un cliente -le miró y sonrió - Me olvide de eso después de que me regañarás...

-Lo siento...

-Chifuyu, deberías complacer los deseos y ordenes de tu cliente y ahora quiero chupártelo, déjame.

Chifuyu se dejó hacer y se tumbó en la cama. Baji siguió chupandolo de arriba a abajo, se lo metió entero en la boca y Chifuyu movía sus caderas. Hasta que Baji metió un dedo en su interior, en ese momento Chifuyu arqueó la espalda mientras que el moreno aumentaba el ritmo cada vez más. 

-Mmmm... aahhh...

-¿Te gusta?

Chifuyu gimió en su respuesta a lo que Baji aumentó el ritmo de su boca mientras que metía otro dedo más. El rubio gemía cada vez hasta que llegó al clímax. Intentó apartar la cabeza del moreno puesto que no le parecía bien correrse en su boca, pero Baji se negó. El rubio no podía más y se corrió en ella. Baji se lo tragó.

-No era tan agradable como pensaba -dijo mientras se limpiaba la boca.

Chifuyu estaba exhausto en el sofá.

-No pensaba que lo ibas a hacer

-Lo hice por amor

-Tonto...

-Soy tu cliente, respétame -le sonrió.

En ese momento, Chifuyu miró su abrigo. Dentro del bolsillo estaba el veneno.

Mío. { bajifuyu}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora