𝒀𝒐𝒖 𝒂𝒏𝒅 𝒎𝒆 // Chifuyu x oc

𝗖𝗮𝗽í𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟰

2003

—Perdón, llegamos tarde —anunció Kazutora entrando a la cafetería conmigo y Baji detrás suyo—. Baji estaba peleando con un delincuente.

—¡No me eches toda la culpa!

—Que conste que yo no he tenido nada que ver —aclaré, acercándome a donde estaban los demás.

—¡Ohhh! ¡Jodidamente increible! —gritó Pah-chin.

—¿El qué? —pregunté acercándome a donde estaba él. Ahí pude ver el uniforme que había hecho Mitsuya para la Toman, era precioso—.¡Qué bonito!

—¡Ohhh! Qué genial —dijo Kazutora—. ¡Aquí está el toppuku de Toman! Son jodidamente geniales, ¿o no?

—No son «jodidamente geniales» —dijo ahora Mitsuya—, no me presionen tanto con su opinión.

—Apresúrense y cambiense —habló Draken—. ¡Vamos a tomar una foto conmemorativa! ¿Verdad?¡Mikey!

—¿Hm? —Mikey estaba comiendo un poste que de seguro no era suyo.

—¿Qué mierda? ¡¿Te comiste mi parfait de chocolate?! —le gritó Draken.

—Si, y sin ser atrapado.

—¡Te dije que podías darle una mordida!

•°•°•°•°•

Salimos de la cafetería ya con los uniformes de la Toman puestos. Me sentía rara, pero también tengo que admitir que me quedaba bien.

—¡Mirad! —me acerqué a Baji, quién estaba al lado de Kazutora—. ¿Qué tal me queda?

—Te queda bien —me alagó Kazutora mientras sonreía.

—Te queda fatal —dijo Baji, poniendo una mueca en su cara.

—Muchas gracias Tora, y a ti que te jodan Baji —finalicé enojada.

—Es broma, te queda bien —dijo, revolviéndome el pelo—. Vamos a amenazar a alguien para que nos haga la foto —dijo llevándose a Kazutora con él.

Baji y Kazutora acabaron golpeando a un tipo que pasaba por ahí para que hiciera la foto. Acabé disculpándome con el señor por el comportamiento de mis amigos.

—E... ¿Están listos? —dijo aquel pobre tipo con su cara toda golpeada.

—Oi, date prisa.

—Bi... bien ¡Digan queso!

Hizo la foto con Mikey delante de la bandera y Draken y Pa-chin a sus lados. Yo estaba en medio de Baji y Mitsuya. La mayoría estaban serios, menos Baji y Kazutora que sonreían.

•°•°•°•°•°•

—Que día tan agotador —me quejé mientras caminaba a mi casa con Baji y Kazutora acompañándome.

—Pero si no has hecho nada —me dijo Baji.

—Estás cansada de no hacer nada —dijo ahora Kazutora.