Capítulo 4

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Pov: Alba

- ¡MARÍA VILLAR!- grité mientras entraba en el apartamento.
- !YO NO HE SIDO HA SIDO QUEEN LO JURO!
- ¿Qué? -pregunté extrañada
- ¿No me gritas porque alguien ha roto el jarrón que te regaló tu madre?
- ¿Has roto el jarrón de mi madre?
- No...- dijo sonriente- ha sido Queen.
- María ¿cuántas veces te he dicho que no le eches la culpa a la gata?- bufé- además no es por eso, ¿por qué no me dijiste que Natalia vino a nuestro apartamento?
- Pero será chivata la bicho palo- masculló entredientes- es que estabas muy mal Alba y no quería que te hundieses más- dijo mientras ponía un puchero.
- Si la hubieses dejado entrar posiblemente estaríamos en Madrid hace mucho Mari- suspiré dejándome caer derrotada al sofá- me lo ha explicado todo hoy y había sido todo culpa de una fan loca.
- No me jodas chaval- dijo mientras se sentaba a mi lado- lo siento mucho Alba.
- Bueno da igual, pero me jode no haber podido arreglar las cosas a tiempo, quién sabe si aún estaríamos juntas o algo así, no sé.
- Aún estáis a tiempo- sonrió pícara.
- Ya es tarde Mari, ni yo siento lo mismo por ella ni ella siente lo mismo por mí, éramos la persona correcta pero en el momento equivocado, somo un puto cliché.
- No me seas dramática hobbit- rodó los ojos- sois tal para cual.
- Lo somos pero como una bonita amistad.
- Y para algo más.
- Amigas Mari amigas.
- Como vuelvas a decir amigas te borro el rubio de un tortazo ¿me oyes?
- ¿Qué has comprado de alcohol?- pregunté para cambiar de tema.
- Yo es que vivo a base de birras, pero para el resto he pillado variado se ginebra y ron, ¿por?
- Pues a voy buscar Jagger y tequila para los chupitos, que hoy voy a por todas, tengo una apuesta que ganar.

Cerré la puerta antes de tener que responder al interrogatorio de la Mari y fui a por las ansiadas botellas, no sin antes preguntarle a mi amiga si quedaban limones en casa a lo cuál me respondió afirmativamente. Divisé a Nat a lo lejos, estaba sentada en un banco tocando la guitarra. Parecía concentrada, así que decidí hacerle una pequeña broma. Me acerqué sigilosamente al banco donde se encontraba, cogí mi móvil que por suerte estaba en silencio y no hizo ruido al desbloquearse, puse Spotify y le di al play para que nuestro Toxic comenzará a sonar en su oído a todo volumen. Con el salto que dio posiblemente podría haberse impulsado al espacio.

- ¡JODER HERMANA OTRA VEZ CON LA CANCIONCITA DE LOS HUEVOS Y AHORA QUIÉN COÑO ER-!- se giró mientras yo ya no podía evitar llorar de la risa- Pero serás cabrona minion del demonio ven aquí- se levantó dejando la libreta y guitarra en el banco y se aproximó a mí- ahora no te puedes escapar rubia- comenzó a hacerme cosquillas y yo sentía que me moría.
- !NAT NO, PARA!
- Pídeme perdón maldita
- ¡JAMÁS!
- Pues no paro- dijo mientras aumentaba el ritmo de sus cosquillas
- Ay no Nat vale, perdón perdón- paró y yo suspiré aliviada- que maravilla de salto Nat, ¿has pensado en inscribirte a los juegos olímpicos para el salto de pértiga?
- Ja-ja qué graciosa eres rubia, mira como me río- soltó con aire de indiferencia falso, ya que veía como se le escapaba la sonrisa.
- ¿Cómo tú por aquí Natilla? Te pueden reconocer en cualquier momento.
- No me llames así Albuchi- dijo mientras sacaba la lengua- disfrutaba un poco del silencio y aprovechaba para componer algo, pero no va mucho con el mood del EP que estoy acabando, creo que voy a cerrar ya el tracklist, ¿y cómo tú por aquí? Hace nada que te he dejado en tu casa.
- Iba a comprar tequila y jagger para la fiesta, tengo una apuesta que ganar- dije mientras le guiñaba un ojo- ¿has terminado otro EP Nat? ¿Y no me has enseñado nada?- puse un puchero
- Alguien estaba profundamente cabreada conmigo cuando lo escribí-dijo mirándome con la ceja levantada- terminé casi todas las canciones durante los dos primeros meses en los que te fuiste y luego la que me faltaba la escribí más tarde. Es muy cortavenas pero te puedo enseñar algunas canciones.
- Quiero escuchar el EP entero Natalia, ¿cómo se va a llamar el bebé?
- EP2
- ¿Por qué?
- No sé, porque es mi segundo EP y porque no quiero ponerle título a una etapa que no sé muy bien como nombrar- sonrió apenada.
- ¿No me puedes dar un adelanto ahora mismo?- pregunté con ojos de perrito mientras señalaba su guitarra- porfi Nat.
- Está bien, pero como se filtre por tu culpa le diré a la discográfica que no he tenido nada que ver con el sabotaje.
- Asumo las consecuencias- sonreí.
- Esta canción creo que es la que más me dolió componer- cogió su guitarra, se sentó en el banco y yo me senté a su lado- Habla de cuando no puedes estar con una persona por circunstancias de la vida, pero en el fondo sabes que os queréis muchísimo. Recuerdas las cosas que os habéis dicho y las vivencias que habéis compartido. Habla desde la soledad de ya no estar con esa persona. De decirle "acuérdate de eso que tenemos, aunque te vayas, quiero que sepas que te quiero"- agachó la cabeza para posicionar los dedos sobre los trastes y luego volvió a mirarme- te presento en primicia "Llueve".

- Pero Albi cariño no llores- me dijo al acabar de tocar los últimos acordes de la canción- ven aquí bebu- dejó su guitarra a un lado y me abrió lo brazos, a los que yo me lancé como si me fuera la vida en ello.

No sabía el momento exacto en el que había empezado a llorar. Esa canción era tan maravillosa como desgarradora, pensar que Natalia se había sentido así por mi culpa hizo que un nudo se instaurara en mi estómago y que, por consecuencia, comenzara a llorar más en los brazos de mi, ahora, amiga.

- Si es que no debería de habértela enseñado que soy una intensa, debería de haberte enseñado boys que es más chill- me abrazó más fuerte y repartió besitos sobre mi cabeza, con lo que no pude evitar sonreír- lo siento bebu.
- No sientas nada Nat, la canción es una genialidad- dije mientras salía de mi refugio- es solo que me duele pensar que estuviste así de mal por mi culpa- agaché la cabeza a la vez que comenzaba a jugar con mis manos.
- Hey mírame Albi- dijo con la dulzura con la que solía hablarme y que tanto había echado de menos. Levanté la cabeza lentamente hasta toparme con los ojos café más bonitos que existían- nada de esto fue culpa de ninguna de las dos, solo fueron malentendidos, al menos nos volvemos a tener la una a la otra.
- Sí, pero hubiese estado guay que las cosas fuesen diferentes.
- Pero los recuerdos están ahí Albi, y todavía nos quedan mucho que crear aunque no sean de la misma manera.
- Ya- dije algo apenada
- ¿Te acompaño a por esas botellas rubia? Tengo una apuesta que ganar- dijo mientras se levantaba y me guiñaba un ojo.
- En tus sueños morena- me levanté del banco y le abracé- te quiero mucho lo sabes ¿no?
- Y yo a ti Albi, mucho más de lo que crees- suspiró- venga vamos a por esas botellas, que se nos echa el tiempo encima y luego la minion no tiene tiempo para arreglarse.
- Hay tiempo de sobra Nat- saqué mi móvil del bolsillo y miré la hora- ups a lo mejor no tenemos tiempo de sobra, son ya las 19:00.
- Pues al lío.

Entramos al Mercadona y por suerte no había mucha gente.

- Así que tequila y Jagger, vamos fuerte rubia- dijo mientras cogía las botellas de la balda alta de la estantería.
- Así es morena, ¿te da miedo perder o algo así?- le pregunté levantando la ceja.
- ¿Yo? ¿Miedo a perder? Si sueñas loterías, Reche- guiñó un ojo y yo solté una carcajada- pero ¿yo que gano?

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