IV.- La Llegada de Deucalion

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Un hombre rubio castaño de ojos azules caminaba por las calles de Beacon Hills junto con una mujer morena de cabello azabache de ojos café oscuro y un hombre de ojos castaño, piel blanca y bastante robusto. Deucalion Stilinski había vuelto y se reuniría con la manada Hale que habían estado cuidando de dos miembros de su manada mientras arreglaba unos asuntos pendientes. Kali y Enis, sus betas más leales no se alejaba de su alfa, se mantenía a su lado todo el tiempo.

Deucalion se detuvo en seco al mirar a Jackson y Stiles saliendo de una heladería, ya había conocido al Whittmore y siempre sintió una sensación extraña pero ahora al verlos juntos sintió que si corazón se aceleraba. El aroma del menor era demasiado conocido, familiar. Jackson había cambiado un poco su esencia cuando se convirtió en hombre lobo. Verlos era como verse a él y Noah.

- ¡Jackson! – gritó Deucalion acercándose a los hermanos dejando a sus betas parados, sabían que no debían de acercarse. El chico era humano y no debían de ser sospechosos.

El rubio miró al alfa confundido, no se llevaba mal con él de hecho se llevaba mucho mejor que muchos de sus compañeros betas. Normalmente uno se pondría a la defensiva al ver a otro alfa incluso agresivo si no imponía su rango pero con Deucalion nunca le había pasado, se sentía a gusto y familiar con él.

- Deucalion, no sabía que regresarías tan pronto. Puedo ver porque Noah esta feliz.

- ¿Has visto a Noah? Normalmente no sale de la comisaria hasta que Jordan lo saca de ahí.

- Se encariñó con mi hermano como todo. – dijo entre dientes mientras señalaba al castaño que seguía comiendo su helado mientras los veía con curiosidad.

- Curioso. – miró al castaño – Deucalion Stilinski, esposo de Noah. Un gusto muchacho, no te había visto antes. – le dijo el alfa mientras estrechaba la mano del menor que seguía con su helado como un niño pequeño.

- Un gusto, soy Mieczyslaw pero puedes decirme Stiles. No he vivido en el pueblo por mucho tiempo y solo vine de visita.

Deucalion sonrió al escuchar el nombre del chico. Era como una brisa cálida y nueva.

- Supongo que ahora nos estaremos viendo Mieczyslaw, digamos que conozco bastante bien a tu hermano y los Hale.

- ¿Conoces a Derek? Debes tener mucha paciencia para soportar a Pet Pet porque estoy seguro de que te molesta bastante. – dijo Stiles con diversión mientras su hermano solo negaba con la cabeza divertido.

- Es verdad, Peter es un dolor en el culo pero es buen amigo. Derek es más serio demasiado para su edad y la pequeña Cora es una fiera de la que prefiero mantenerme alejado.

- Eres un hombre listo. Yo los tengo dominados así que no hay problema pero tú si sabes usar esto. – señaló su cabeza mientras Deucalion reía con diversión.

- Tienes razón. Me tengo que ir pero presiento que nos veremos seguidos hermanos Whittmore. – les dijo Deucalion mientras se alejaba de los adolescentes.

- Tienes conocidos bastante extraños, el pueblo cada vez es más raro como las personas. – comentó Stiles alzando una ceja hacía su hermano.

- No puedo negar eso, yo mismo pensaba que jamás sería parte de este grupo de raros peor creo que soy uno del club.

- Siempre lo has sido como yo, nunca hemos sido normales además eso sería aburrido. – le dijo Stiles mientras tiraba su servilleta y tomaba la mano de su hermano para llevarlo a otro lado. Al fin tenía un poco de tiempo con él y no iba a desaprovecharlo, no sabía cuándo se iría junto a los demás.

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Deucalion y Noah se encontraban dando vueltas por su casa, hace unos días se habían encontrado por "casualidad" a Stiles en el supermercado y lo habían invitado a él junto con Jackson, quien había aceptado pero al final tuvo que cancelar por unos problemas de manada y el menor terminó furioso. Los problemas de manada estaba haciendo que el rubio discutiera bastante con su hermano.

El timbre sonó y Noah entró en pánico mientras que Deucalion reía levemente, no entendía porque estaban nerviosos aunque muy en el fondo esperaba que sus ideas no fueran equivocadas pero solo necesitaba hablar con ellos y tomar una muestra para hace un examen.

Ahí frente a la casa se encontraba Stiles vestido con unos tejanos negros, una camisa azul marino con magas remangas hasta los codos y unos zapatos negros; con una botella de vino entre sus manos y una sonrisa algo apenada en su rostro.

- Hola Mica, pasa. – le dijo Deucalion mientras dejaba que el menor entrara al casa. Sabía que Jackson no asistiría por un pequeño problema de manada así que le había avisado desde antes y le había pedido cuidar del menor. Había un wendigo suelto y no se podía permitir que Stiles saliera herido.

- Hola Stiles. – lo saludó Noah saliendo de la cocina y recibiendo la botella de vino con alegría.

- Hola Deucalion, Noah. Gracias por la invitación y me vuelvo a disculpar por Jackson, les juro que cuando me fui él tenía modales. – se disculpo Stiles molesto al recordar a su hermano.

- No te preocupes, los improvisto salen pero lo bueno es que tú pudiste venir. – le dijo Deucalion mientras revolvía el cabello del menor.

Stiles sonrió. Le gustaba esa pareja, se sentía en su hogar con ellos y esa casa le daba un sentimiento de nostalgia.

Durante la comida los adultos realmente disfrutaron de la compañía del menor y escuchar sus anécdotas del FBI.

- Al final Sam y Dean terminaron aprendiendo que no deben de molestar a las familias de los fallecidos o víctimas. Jamás voy a superar como Dean terminó golpeado por la hermana. – comentó Stiles mientras reía y comía su postre, un pastel de chocolate delicioso.

- ¿No es extraño tener aprendices como compañeros cuándo son mayores que tú? – preguntó Deucalion con diversión.

- Para mí no es extraño, estoy acostumbrado pero para ellos no fue tan divertido y se negaron mucho tiempo. Más Dean que Sam pero les costó trabajo adaptarse a que yo soy su superior y me he ganado ese título por mi esfuerzo.

- Por eso eres más maduro que los demás chicos de tu edad. Se puede notar desde la forma en la que te mueves o te sientas, eres un adulto en el cuerpo de un joven. – comentó Noah con cierto orgullo.

- Alguien tenía que madurar antes. Jackson siempre quiso protegerme pero quién lo protegía a él así que tomé el papel que me correspondía y aprendí a usar mi inteligencia a mi favor.

- Es increíble la relación que tienes con tu hermano, no mucho tienen una así de unida. Han pasado años desde que se han visto pero su relación no se ha fracturado ni un poco. – le dijo Deucalion mientras que Noah asentía.

- Siempre hemos sido nosotros contra el mundo, siento que somos más mellizos que hermanos. Estamos conectados y no importa el tiempo que pase nunca vamos a alejarnos, somos nuestro todo y sé que incluso si él tiene novio y yo llegué a tener pareja siempre iremos primero.

- Stiles, queríamos preguntarles algo a ti y a Jackson pero tendremos que preguntarte a ti. – le dijo Noah de manera seria.

- Los escucho.

- Sabes que tenemos dos hijos que nos fueron arrebatados. – el chico asintió – Tenemos un pequeño sospecha de que tú y Jackson pueden serlo así que nos gustaría tener algo de su ADN para hacer un examen. – le pidió Deucalion nervioso aunque aparenta tranquilidad.

Stiles estaba tranquilo, sospechaba que algo así podía pasar. Siempre había tenido la esperanza de que sus padres estuvieran vivos y que hubiera ocurrido algo de lo que aun no tenía respuesta para que ocultaran o trastornaran la información. Sabía que Jackson no lo aceptaría porque no quería ilusionarse y terminar decepcionado así que no le diría por el momento.

- Lo entiendo. Puedo conseguir una prueba de ADN. – se arranco un cabello y se los extendió. Noah lo tomó, guardándolo en una bolsa de plástico con una sonrisa. – Tendré la de Jackson pronto y se las daré, no quiero decirle nada porque lo conozco y no quiere tener falsa esperanzas así que mantengamos esto en secreto. – les dijo mientras guiñaba un ojo.

- Será nuestro secreto. 

El Hermano de JacksonOù les histoires vivent. Découvrez maintenant