- Tengo miedo - me cae una lágrima -
- ¿A quién le tienes miedo? - preguntó -
- A tí - susurro casi audible -
- Lo que más no quiero es que me tengas miedo - me abraza -
• Todo cambió cuando lo conocí. Mejor dicho, cuando él me conoció a mí. Aq...
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Me desperté por mi alarma, eran las 7:10, en 20 minutos tengo que ir al trabajo.
Taehyung estaba durmiendo al lado mio, lo cual estaba abrazándome de mi cintura, alejo su mano lentamente para no despertarlo, pero el se despertó a los pocos segundos.
- Buenos días pequeña - me mira y su rostro tenia una hermosa sonrisa -
- Buenos días demonio lindo - besó su frente y me voy al baño, pero sin antes sin cubrirme mi cuerpo con las sabanas -
Me ducho, después me voy al armario y busco ropa. Mientras que Taehyung me observaba cada movimiento que hacía, me ponía un poco nerviosa.
¡Demonios Taehyung deja de mirarme!
Me puse una ropa cómoda, como siempre. Bajé las escaleras y fuí a la cocina para cocinarme alguna comida rápida, ya que no me gusta llegar tarde al trabajo o cualquier cosa por el estilo.
Lo sé... Soy muy puntual.
- Me enteré que Jennie te dió dinero - dijo Taehyung mirándome con su ojos profundos que tiene -
- Si - suspiré -
- Lo pagarás, yo sé que si - se acerca a mí -
- Pues... - miraba cada paso que daba, me ponía nerviosa -
- Lo harás bien - su rostro estaba muy cerca, por más que sea más baja que soy, él estaba muy cerca de mis labios -
¿Porqué no me besas?...
Taehyung rozó mis labios contra las de él, pero no me besó, lo cual me molestó un poco, ya que amo besar eso hermosos y carnosos labios. Mi corazón se aceleraba, por poco estaba en mis manos.
¡Qué imbécil eres Taehyung!
Él solo me miró con su rostro aún un tanto serio, era tan jodidamente perfecto y sexy... ¡Que no podía mirarlo a los ojos!.
- Ve a trabajar T/N, se te hará tarde - su voz era ronca y grave -
- Ah... S... Si - tartamudeando -
Él solo me sonrió un poco ¿Pícaro?...
Me fuí de la casa, aún con mi corazón acelerado. Llamé un taxista para que me lleve, como de costumbre, ya que todavía no tengo el auto de mi padre hasta que le pague al estúpido de Kevin. Así mi padrastro me lo recompensa, dándome el auto.
(...)
- Amiga, limpia las mesas, el jefe nos retará - dijo Ariana -
