Después del efecto de un quirk y un pesado día, Bakugou Katsuki tiene que lidiar con una doble carga ya que el profesor Aizawa le obligó a hacerse responsable.
O en donde Bakugou tiene que cuidar a Kaminari después de ser afectado por un quirk por s...
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Bakugou se limpia el sudor de su frente con un trapo limpio que halló en un cajón de la habitación de Kaminari. Sonríe ante la obra que creó: todo el ambiente limpio y ordenado, acomodado bajo una cuidadosa pauta para no perder el control en la armonía del lugar. Se sienta en la cama para reposar un rato y medita en los acontecimientos que habían sucedido recién.
Juraría que había pasado mucho tiempo en el cual Kaminari se había convertido en aquel energético niño, cuando en realidad habían sido sólo unas cuantas horas. Es increíble pensar que el tiempo puede transcurrir tan lento y uno llega a creer que pasaron varios días. Frunce el ceño un poco porque el profesor Aizawa aún no le dice algo acerca del efecto del quirk que afectó al chico rubio; no se sabe con certeza cuánto durará en este estado ni tampoco se sabe si los acontecimientos que experimente de esa forma los recuerde al volver a la normalidad.
Se siente un poco culpable de causar que el niño crea que es su padre. Es un poco conmovedor como esos ojitos dorados brillan al estar cerca de él y piensan verdaderamente que es quien tanto esperó y que le había regalado ese horrible peluche de pelos parados. Chasquea la lengua molesto.
Recuerda lo que leyó sobre la madre de Kaminari. No es que sea un entrometido y se meta en lo que no le importa pero sí quisiera saber porqué ella ha hecho a sufrir a su hijo de esa manera. Kaminari no tiene la culpa de lo que haya hecho su padre o lo que le haya pasado. Según palabras de Kirishima, el adolescente de cabellos rubios no conoció a su padre, pero para Bakugou tampoco es claro qué fue de él.
Probablemente le pregunte al pelirrojo si sabe algo más al respecto. Esta duda podría aclarar más cosas que están escondidas a simple vista. Tal vez las preguntas correctas le den la respuesta que busca.
Mira su celular para ver la hora y al momento se da cuenta que acababa de llegar un mensaje de Kirishima preguntándole si ya había terminado. Al parecer el pequeño Kaminari estaba muy ansioso de contarle lo que hizo en la tarde con la fiesta de té. El cenizo sonríe inconscientemente al imaginar al pequeño aferrándose a su pierna mientras emocionado le decía todo lo que había hecho en el día.
Bakugou no es alguien paciente, de verdad que no. Tampoco se creía alguien con la capacidad de cuidar a un niño. Es más, ni siquiera se veía a futuro teniendo uno (pero cualquier adolescente de su edad puede pensar eso). Sin embargo, ahí estaba cuidando a su amigo como si fuera su hijo. La cursilería implícita en esa palabra lo asquea un poco debido a la naturaleza de su carácter, mas no se siente incómodo con ello.
No le molesta realmente que Kaminari piense que es su padre si eso lo hace sentir seguro y evita que se asuste o pase algo que pueda afectar la seguridad del mismo en el estado en el que se encuentra. De todas maneras es su amigo, y probablemente si Kirishima hubiera sido el afectado por el quirk habría hecho exactamente lo mismo aunque parecía que se siente obligado a dar tanto atención y detalles (afectuosos) de paso. El orgullo aplastante de Katsuki no le permite aceptar que se está empezando a encariñar al menos un poco con la situación.
