ABRAZARTE DORMIDA

CAPITULO 3

"El monstruo del pasado"

Llegué a casa y me tumbé en mi cama mirando al techo “me debes una” ¿con qué le podía pagar a un chico que lo tenía todo?, bajé a ayudar a mi mamá y terminar algunas tareas pendientes, también me puse a pintar un rato, no era muy buena, pero pintar me relajaba bastante era uno de mis pasatiempos favoritos.
Se llegó la noche me acosté y me dormí en cuanto mi cabeza tocó mi almohada.
“por favor ya!!! ¡Me duele!!!! ¡Mamá ayúdame!!!!!!
-nadie te va a hacer caso a nadie le importas –me dijo con una mirada que me daba asco, sus ojos denotaban tanto odio hacia mí que me daban tanto miedo 
- ¿por qué? ¿por qué a mí? ¿yo que te hice? –sollozando
-porque me hartas, hablas mucho, no quiero ver tu cara.
Se reían mientras veían cada lagrima caer, seguían pateándome yo perdí la esperanza de pedir auxilio, hasta que la campana sonó y todos corrieron, fue ahí cuando no pude más tenía el estómago revuelto, saqué todo mi desayuno… y no paraba de llorar estaba tan enojada y con tanto miedo que temblaba.”
Esos chicos no dejaron de pegarme, y nunca nadie lo noto. Imploraba ayuda, pero nadie me ayudaba, me moría de miedo, me gritaban, y culpaban, era el infierno para mi…
Desperté y no me podía mover, me faltaba la respiración me sentía asfixiada el respirar era complicado, podía ver todo, pero ninguna parte de mi cuerpo racionaba comencé a entrar en desesperación cuando sentí una mano pasar por mi pierna, grité, pero una vez más nadie me escuchaba mi mamá estaba trabajando…
Después de unos minutos logre calmarme tenia lágrimas en mis ojos mis mejillas estaban empapadas y mi cuerpo bañado en sudor, los recuerdos estaban comenzando a llegar… estaba temblando, esos recuerdos que creí que habían desaparecido comenzaban a fluir nuevamente… el infierno estaba volviendo, la mayor parte de la primaria sufrí acoso escolar, todos los días era tan frecuente, siempre me pregunté si nunca les dolió verme asustada y pidiendo ayuda suplicando que mi mamá viniera… de verdad eran muy crueles.  Tomé mi celular y eran las 3:30 de la mañana, no pude volver a dormir después de esa hora, las pesadillas volvían a pasar una y otra vez cada que cerraba los ojos, la parálisis de sueño también se volvía a hacer presente… fue una noche horrible.
Después de unas horas me levanté más temprano de lo usual por obvias razones y tenía unas ojeras enormes y mis ojos estaban tan hinchados de tanto llorar que me costaba abrirlos, me lavé mi rostro, me puse unas gotas para la hinchazón de mis ojos, después un tónico de agua de rosas y luego una mascarilla de contorno de ojos, mi crema que regularmente uso y bloqueador, posteriormente me maquillé, para cubrir las ojeras y la irritación, me cambié y me fui a la escuela era la primera vez desde que llegué ahí que quería faltar… pero no lo hice.
Cuando llegué lo vi pasar por debajo Kihyun me sonrió y saludé con mi mano, las clases pasaron lentas y aburridas como siempre, era como si fuera un robot programado para hacer todo a la perfección, era agotador. En el receso iba a comer con Dan porque según yo Kihyun tenía clases, pero una vez más estaba equivocada, venía directo a mí.
-Vamos!!! –me tomo de la mano, pero algo nos detuvo…
-Dijiste que ibas a comer conmigo –Dan sostenía mi otra mano. Se veía algo molesto y era verdad iba a comer con él se lo había prometido… pero Kihyun me hacía dudar.
-Te compre un frappuccino de Starbucks y un pastel de chocolate –me dijo Kihyun ¿estaba intentando comprarme con comida?
Dan se limitó a mirarme, la decisión estaba en mí odiaba tener que elegir, no estaba bien y esto empeoraba todo, sabía que nadie iba a ceder eran igual de tercos…
-Voy a la biblioteca, necesito estudiar algo –lo dije zafándome del agarre de ambos –nos vemos después… -sin más me fui directo a la biblioteca.
Estar sola y pensar en todo era una de mis cosas favoritas, la biblioteca estaba completamente sola, me senté en una mesa de hasta el fondo con vista a la puerta, estaba estudiando un libro acerca del cuerpo humano, cuando la puerta se abrió y me sobresalté nadie iba a la biblioteca en receso, y lo vi, Kihyun venía con una bolsa.
-Oh! Si estas estudiando –lo dijo y se sentó al lado mío, de repente su rostro parecía triste y preocupado - ¿por qué lloras? –acercó su pulgar a mi mejilla y limpió mis lágrimas, las cuales no sabía en qué momento habían caído, su acto fue muy tierno y me dejo muda unos segundos.
-P-por nada oppa estoy bien. –traté de fingir una sonrisa la cual no lo convenció nada
-Si no me quieres contar está bien, no tienes que decírmelo todo, solo no lo afrontes tu sola, no sé lo que te pasa, pero no estás sola, no fue tu culpa y todo va a mejorar.
-G-gracias oppa –esas palabras llegaron a mi corazón de verdad las necesitaba, comencé a llorar más fuerte y Kihyun me rodeo suavemente con sus brazos, de verdad lo necesitaba. Poco tiempo después nos separamos, me sentía liberada.
- ¿Mejor? –pregunto acariciando mi cabeza
Asentí y me acercó el frappuccino y la rebanada de pastel.
-Es para ti
-G-gracias – comencé a comer y después de un rato seguí leyendo, nuestros silencios ya no eran incomodos.
- ¿qué lees? –dijo por fin rompiendo el silencio y mi concentración
-Anatomía y fisiología del cuerpo humano -dije sin verlo
-Te gusta mucho la medicina ¿verdad? –intrigado
- Me encanta, es lo que más anhelo hacer. –le lance una mirada fugaz antes de volver a concentrarme o al menos intentar concentrarme
-Sin duda eres única –lo mire por el rabillo del ojo y estaba sonriendo, de verdad le agradaba.
Sonreí y volvía mi lectura de pronto sentí como se acercó estaba leyendo también, lo regresé a ver y nuestros rostros estaban muy juntos, tanto que nuestras narices rozaban, Kihyun bajó su mirada de mis ojos a mis labios y me puse muy nerviosa cuando él mojo sus propios labios, se comenzó a acercar, yo no me moví, nuestros labios rozaban y cerré mis ojos, cuando de la nada la puerta de la biblioteca se abrió y nos separamos muy rápido.
-Señorita ya debe entrar a su salón y no se permite comida ni bebidas en la biblioteca haga el favor de salir e ir a sus clases –el coordinador un hombre medianamente joven con barba algo bajito y pelón nos interrumpió
¡Mierda! No pudo llegar un poco más tarde aaah
-S-si ya voy.
Tome mis cosas al igual que kihyun y salimos de la biblioteca, él no dijo nada en el camino y yo tampoco.
-Nos vemos Melody, suerte con tus clases –dijo por fin cuando bajamos las escaleras.
-Ah, sí nos vemos, suerte a ti también oppa. –le dije moviendo mi mano y él me dio la espalda y comenzó a avanzar.
Cuando llegué a mi salón todavía no había llegado la profesora, así que fui hasta donde mis amigos a hablar, pero Dan se veía muy molesto.
- ¿Qué sucede? –dije sentándome enfrente.
-Ese idiota de Yoo Kihyun es lo que sucede.
- ¿Qué te hizo Kihyun? –dije arrugando mi entrecejo de confusión.
-Primero lo que te hizo a ti –enumero con los dedos –el hecho de que no lo soporto y lo que me dijo hace rato.
- ¿Qué te dijo? –estaba muy curiosa.
-Pues que yo te había incomodado al tomarte de la mano y que tu odiabas el contacto físico y que te respetara ¿puedes creerlo?!!! –estaba muy enojado porque casi había gritado, Kihyun sabía que odiaba el contacto físico y Dan no, nunca pensé en decírselo porque para mí ya era normal el contacto físico con él-Me dijo eso cuando fue él quien llego de la nada y te ordenó ir con él –prosiguió mi mejor amigo indignado –él fue el que te jalo primero como si fueras de su propiedad y estuvieras a su disposición, de verdad no me agradan ese tipo de actos.
No lo había visto desde ese punto… Era verdad, me ordenó ir, pero quizá no se dio cuenta, Dan puede llegar a exagerar algunas cosas y ver lo peor de algunas situaciones, Kihyun no podía ser malo.
-Quizá no lo hizo por que quiso, él suele ser así a veces sus palabras tienen un tono como si dieran una orden, pero no es así.
- ¿Te estas escuchando Lisa?, si no fuera una orden, hubiera actuado de otra manera o haber dicho algo como “¿quieres venir conmigo?” pero no solo te jalo y te llamo como a un perro. –su tono sonaba cansado e irritado.
-Él no es así, no lo conoces
-Sí, pero-
La maestra llegó y Dan guardo silencio y yo me moví de lugar, sé que solo me protegía, pero no quería escucharlo decir cosas malas de la persona que me gusta, no lo iba a dejar.
Las clases transcurrieron normales, cuando finalizaron Estefi me llamo para llenar el formulario para entrar a natación juntas, y después me fui a casa no volví a ver a Kihyun después porque él salía más tarde o más temprano dependiendo, ese día salía más tarde.
Llegué a casa, me duché y me dormí porque la noche anterior dormí muy poco debido a mis pesadillas. Pero esa noche no fue la excepción las pesadillas volvieron y desperté a las 12:00am con parálisis de sueño nuevamente no iba a poder dormir, me desperté y me puse a leer “cartas de amor a los muertos” de Ava Dellaira me encantaba ese libro. Era tan agotador tener que ir a la escuela sin haber dormido bien, no recuperaba nada de la energía perdida, sabía que tenía que decirle a mi mamá, pero ella ya tenía suficientes problemas, además que tendría que contar de dónde venían esos sueños y tanto ella, como todas las personas que me conocían no sabían nada de mi pasado y de todo lo que sufrí y si lo sabían solo era una parte, no sabían toda la historia.
Se llegó la hora de ir a la escuela y me puse en marcha lo único que me reconfortaba era ver a mis amigos y a Kihyun, su sonrisa cálida me llenaba de paz en cuanto la veía. Subí las escaleras y me asomé por el balcón y no estaba siempre iba por abajo cuando yo iba por arriba, pero ese día no fue así, de pronto sentí unas manos; frías y suaves, que cubrían mis ojos.
- ¿A quién buscas? –era su voz, me voltee rápido y ahí estaba
- ¿Qué haces aquí? –no pude evitar que una sonrisa se me escapara
-Me va a tocar aquí por un tiempo, ¿vas a tus clases? Te acompaño
-Okey
- ¿Qué clase tienes?
-Química
-Okey… creo que me quedaré contigo esta clase –dijo mirando su celular –acaban de cancelarme la clase de simulación de negocios.
- ¿Te van a dejar?
- Claro que sí, soy Yoo Kihyun –me miró con cierta superioridad
- Okey –estaba nerviosa porque con Kihyun cerca era más difícil concentrarme.
- ¿No quieres que este?
-Eh? Nono no es eso es solo que pensé que podían regañarte o algo.
-No te preocupes todo está bajo control.
Llegamos y se sentó atrás de mí, todos nos miraban, Dan me veía con ojos reprobatorios, y Estefi con una sonrisa.
-Yoo Kihyun, ¿qué haces aquí? –dijo la maestra en cuanto entró
-Ah se canceló mi clase, ¿puedo estar aquí?
-Uhm sí, no eres ruidoso como Minhyuk, bueno vamos a iniciar, hoy veremos las ecuaciones químicas por el método de tanteo.
Explicó su tema y puso actividad, cuando lo termine me disponía a entregarlo, pero algo me detuvo.
-Está mal la segunda. –puntualizó Kihyun en un susurro
- ¿Cómo sabes? –cuestioné y me volví hacia él.
-En vez de dos es cuatro, todos tus compañeros la tienen mal. –dijo y me miró fijamente. –confía en mí –susurró una vez más
Le hice caso, y cambié la ecuación, confiaba plenamente en él, lo entregué y como dijo estaba mal como lo había hecho antes y fui la primera y única en entregarlo bien por lo que la maestra me puso dos puntos extras. Mis compañeros me lo pidieron, pero Kihyun me dijo que no se los pasara para que ellos mismos se esforzaran.
Las dos horas terminaron y salí al receso junto con KIhyun.
-Ya pedí el desayuno, no deben tardar en llegar.
-Okey te espero –dije sacando mi sándwich de la lonchera.
-Te compré algo a ti también.
-Oppa no era necesa-
-Necesitas un café y chocolate para poder despertar…no dormiste bien otra vez ¿verdad?
-Ah…. Ee yo… ¿cómo lo sabes?
- Te ves cansada y te vi cabecear en la clase… ayer tampoco dormiste, ¿por qué? Tienes que dormir bien, es malo para tu salud desvelarte –paso su pulgar suavemente por mis ojeras, se veía preocupado.
-No he tenido buenas noches últimamente.
- ¿Cuánto duermes? –quitó su mano de mi rostro
-Pues… unas tres horas.
Kihyun abrío mucho los ojos –¡No puede ser! Es una broma ¿verdad?
Agaché mi cabeza avergonzada. –No, no es broma.
- ¿Por qué no duermes?
-Últimamente, tengo muchas pesadillas y parálisis de sueño.
-pero- su celular vibró y Kihyun contestó –Okey voy por ella, sí –colgó y me miró –voy por la comida no te vallas, quiero hablar contigo.
Kihyun podía llegar a ser muy sobreprotector y eso me gustaba, sentir que le importaba a alguien era reconfortante, era el chico perfecto de verdad.
-Listo –dijo poniendo una bolsa en la mesa, había llegado, sentí un nudo en el estómago porque quería hablar conmigo del tema otra vez. -aquí tienes esto te ayudará a despertar.
Puso enfrente de mí un pastel de chocolate y un Ice americano, de verdad no quería aceptarlo, pero cuando abrí la boca para protestar, él puso un cupcake en ella para que me callara.
-No protestes te sentirás mejor, más despierta.
Asentí y él sonrió. -Buena chica –acarició mi cabeza
Después de un largo silencio habló - ¿Cómo son tus pesadillas?
-Emm bueno… son como una película de terror.
-Deberías dejar de ver ese tipo de películas, sé que son tus favoritas, pero si te hacen daño deberías dejarlas.
-Es que no tiene nada que ver con las películas, no sueño con escenas y cosas así, son más como recuerdos que pensé que ya había olvidado…es como si recordara el pasado que tanto me costó superar.
Kihyun guardó silencio un rato como si tratara de encontrar las palabras y el tono en cómo hablarme.
-Quizá no lo has superado todavía por eso es que están volviendo…tienes que darles importancia a tus pesadillas, si deseas hablar de eso cuentas conmigo aquí estoy para ti-me tomó de las manos y me miró a los ojos –todo va a estar bien, mientras este contigo nadie puede hacerte daño.
No pude aguantar y una lagrima se desbordó de mis ojos, de verdad necesitaba esas palabras, él solo acaricio el dorso de mi mano con su pulgar y con la otra acariciaba mi cabeza, sus manos eran frías pero reconfortantes.
-Cuando tenía 6 años comencé a sufrir acoso escolar… mis compañeros me pegaban todos los días, a veces hasta me hacían vomitar de los golpes –sorbí mi nariz antes de continuar y tomé aire porque mi voz se estaba quebrando –A eso se deben mis pesadillas es lo que más recuerdo…
- ¿Le has contado a alguien más?
-No, bueno… sí pero solo no les dije que me pegaban tan feo o que tenía pesadillas por eso.
-También tienes la parálisis de sueño ¿verdad? –asentí y prosiguió – ¿has consultado algún especialista?
-No… siempre lo he lidiado sola… no quiero que nadie se sienta culpable de lo que me pasó.
-Entiendo –él me abrazó y no me hizo más preguntas ni me dijo nada más, eso era lo que necesitaba que alguien se quedara a mi lado más allá de palabras bonitas necesitaba que me escucharan, a las pocas personas que les había contado me decían cosas como “ya pasó”, “supéralo", "la vida sigue”, “te entiendo, a mí me insultaban en la secundaria” etc. Pero yo no necesitaba palabras, el “te entiendo” era una de las frases que más odiaba, porque no entendían lo horrible que se sentía que todos los días te pegaran, te humillara e incluso tocaran partes de tu cuerpo o te besaran a la fuerza no era lo mismo a que te dijeran “fea”, “gorda” o que te insultaran, iba más allá, todos teníamos malos ratos y dolían de diferente manera nadie entendía a nadie porque todos pasamos por cosas diferentes.
Mi celular vibró y Kihyun se separó de mí.
-Te están llamando. –me dijo mirando la pantalla de mi celular, Dan me llamaba, ya eran las 9:35, estaba llegando tarde otra vez.
*En la llamada*
-Bueno
-Lisa, ¿dónde estás?, la maestra ya llegó.
-Ya voy para allá, no tardo.
📞📞📞
Colgué la llamada y recogí mis cosas rápido.
-Pero todavía no terminas de desayunar. –dijo Kihyun viendo como recogía todo.
-Sí, es una lástima, sabia tan rico, pero ya tengo que irme y no puedo comer en clase. –dije mirando triste el exquisito pastel de chocolate.
- ¿Ni siquiera el café?
-Oh creo que ese sí
-Entonces vamos, te llevas el café al salón y en el camino come más pastel. –se puso de pie y tomó mi lonchera.
-Okey!!!! vamos. –comencé a comer más del pastel y Kihyun me miro con una sonrisa en su rostro.
- ¿Sucede algo?
-De verdad, te gusta mucho ese pastel. – de la nada pasó su dedo por mi labio inferior y limpio los restos de chocolate que había, después lamió su propio dedo, ¿qué estaba haciendo?, ¿no le daba asco mi saliva? Lo mire pasmada, el calor subió por mis mejillas y se coloraron, eso de verdad no me lo esperaba.
-Ummm de verdad está delicioso el pastel. –sonriente
Yo no dije nada y miré hacia otro lado y seguí comiendo el pastel, de verdad Yoo Kihyun era una caja de sorpresas.
-Hyung¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ ¿Dónde estabas?, Minhyuk hyung te está buscando desesperado.
Ese chico yo lo conocí iba en primer año de la facultad, era un chico alto, de la estatura de Kihyun, se veía más grande de su edad, era de confección delgada y tez morena clara, su rostro era pequeño y delgado, su mandíbula se marcaba, se notaba que hacia ejercicio ya que su cuerpo se veía saludable y sus brazos fuertes, se veía muy intimidante.
- ¿Qué quiere Minhyuk? -dijo Kihyun rodeando los ojos
-Pues menciono un trabajo y…-el chico puso sus ojos sobe mí y me barrio de pies a cabeza, su mirada era de verdad muy profunda. –Hola!!, soy Im Changkyun ¿tú eres? –extendiendo su mano
-S-soy Melissa González –le estreché la mano
-Concéntrate Changkyun –dijo Kihyun mirando al chico – ¿Que mas dijo Minhyuk?
-Ah cierto, que tienes que ir rápido para resolver lo del trabajo porque se le olvidó su parte.
- ¡Mierda!, le dije a ese idiota que lo hiciera y que era importante –se veía realmente enojado nunca lo había visto así –tengo que irme lo siento –me miró algo preocupado y me dio el café. –nos vemos después, vamos changkyun.
-Ah, yo puedo acompañar a Mely a su salón.
-No, tú vienes conmigo. –dijo impaciente y con la mandíbula rígida. 
-No puedes dejarla sola, y sería buena compañía. -sonrió pícaramente
-IM CHANGKYUN!!!! –penetró a Changkyun con la mirada, Kihyun daba un poco de miedo estando enojado… pero no podía negar que también se veía muy sexy. Me sonrojé más ante ese pensamiento y el hecho de que me regresó a ver directo a los ojos
-No le voy a hacer nada solo la voy a acompañar. –mencionó Chang calmado
-Aj está bien se me hace tarde, ¿dónde está Minhyuk? –dijo a regañadientes
-Está en la biblioteca, suerte hyung.
Kihyun se fue, y me quede sola con Changkyun.
-Tú primero linda –dijo haciendo un ademán para que pasara, no lo voy a negar ese chico me ponía nerviosa era muy guapo, era el más popular entre los de prepa, por ser muy atractivo y ser el más pequeño del grupo de “los chinitos” como les decían.
- ¿De dónde conoces a hyung?, ¿eres su novia o algo así?
-Eh? A no solo somos amigos. –su voz era muy grave y profunda, ahora entiendo por qué era tan popular, era muy sexy y a pesar de ser muy callado me estaba hablando.
-Hyung no suele ser celoso…eres especial para él. –me dijo eso y mis mejillas ardieron otra vez, no podía ser verdad lo que escuchaba, era muy bueno para ser cierto. - ¿Este es tú salón? –dijo cuando llegamos al último salón que era el mío.
-S-sí, e-este, gracias por acompañarme. –todos nos estaban viendo, era muy incomodo
-De nada linda. –me guiñó el ojo y se fue sin decir nada más.
Todos me miraron, era algo que odiaba, llamar la atención, todos me miraban y se susurraban entre sí.
Lo días pasaron, los chismes corrieron, estaba en boca de todo BGC simplemente por el hecho de que Changkyun me acompañara a mi salón, decían que engañaba a Kihyun con su amigo, los rumores me tenían preocupada porque cada vez era más y más molesto…ninguno de los dos me topaba y ya decían que era un triángulo amoroso, de verdad era irritante, pero estar con Kihyun de verdad me hacía bien y no quería que nos distanciáramos eso era lo que realmente me preocupaba, que se sintiera incómodo y ya no me hablara.
- ¿Qué clase tienes ahora? –me dijo Kihyun mientras caminábamos por el pasillo
-Física –dije algo aburrida.
- ¿No te gusta física?
-No es que no me guste, de hecho, se me hace muy interesante, lo que pasa es que no se me da bien, no soy buena en física prefiero la química.
-Ya veo… pero puedes mejorar, tú eres muy buena con las matemáticas, además no creo que te valla mal, eres muy inteligente.
-G-gracias oppa –levemente sonrojada
Llegamos al salón y la maestra ya estaba ahí.
-Pasa, hola Yoo Kihyun, ¿necesitas algo? –Kihyun negó con la cabeza
-Solo vine a acompañarla, nos vemos profesora.
La maestra se despidió con la mano, él me miró una vez más y comenzó a alejarse, me quedé ahí viendo su espalda hasta que entró a su salón.
La maestra de física hacía muchas dinámicas para ganar puntos y pasar con 100 su materia, formamos equipos yo estaba con mis amigos.
-Puedes ayudar al equipo tres por favor, te daré una recompensa si lo haces. –me dijo la maestra susurrando, lo pensé un poco y miré a mis amigos, los quería mucho… pero de todas maneras no era de mucha ayuda porque Estefanía sabía mucho también, así que me cambié de equipo además porque también estaban mis amigas Michelle, Mariel y Ali.
-Ey Lisa!!! ¿a dónde vas?, no Lisa, nos traicionas.
-Creí que éramos amigos
-No hay amigos solo conocidos!!!!
Dan y Estefi no decían nada, por otra parte, mi otro equipo contestó y se puso a “defenderme”, sabía que lo hacían de broma y todo, pero estaban haciendo mucho ruido y eso me ponía ansiosa, de verdad, fui a decirle a ms amigos de mi situación, les dije lo que me había dicho la maestra.
-Pues sí, pero los amigos son primero. –ahí fue donde me cuestioné, ¿los amigos exigían compañía y ayuda?, lo decían de broma lo sé, pero no pude evitar pensar de esa manera.
-Ey no, dejen a Lisa en paz ella está en nuestro equipo.
Eso me trajo un amargo recuerdo.
*Septiembre de 2014*
-Lisa! ¡haz equipo con nosotras!
-Tú eres la lista, yo no sé.
-No pues vete con tu amiguita.
-Recuerdan la vez de cuando fuimos a la casa de Fany jajaja, ay si es cierto Lisa no fue.

*Agosto de 2010*
-Chinga tu madre!!! esta es mi casa y tú eres mi esposa
- ¿para qué vienes si solo vienes a pelear? Vete, vete de aquí ya
-Mamá, papá no peleen más por favor – dije en un susurro y sollozando

Esos recuerdos me embargaron llegaron a mí los peores momentos eran recuerdos de la secundaria y de mi infancia se hicieron presentes, no sé por qué, el ruido comenzó a penetrar mis oídos, odiaba los gritos y las peleas trataba de evitarlas a toda costa porque eran lo peor para mí.
Comencé a sudar, y a temblar, la respiración me hacía falta, sentía el pecho apretado, no podía más, los gritos, los recuerdos, todo se juntaba dentro de mí estaba explotando.
-¡¡YA BASTAAAA!!!!! ¡DEJEN DE GRITAR!!!!!!!
-Lisa ¿qué tienes? ¿cómo te puedo ayudar? – me dijo Dan de verdad estaba muy preocupado
Las lágrimas comenzaron a resbalar por mis mejillas, no sabía cómo calmarme, no podía, ya tenía ataques de ansiedad, pero siempre los controlaba, esta vez era diferente… no podía parar de temblar. Era la cosa más horrible del mundo, estaba colapsando.
*Enero 2016*
-no creas que te voy a ir a buscar, no te voy a extrañar, ya sabes como soy, si me dejan, yo no busco a nadie –me dijo mi papá en un tono severo, era la última vez que lo iba a ver antes de irme a Guadalajara y fue muy hiriente…
-perdón, yo si te voy a extrañar mucho… te quiero mucho –sollozando
Mi mente ya no podía más, traía los recuerdos tristes una y otra vez, mi cabeza estaba dando vueltas, mi pecho me quemaba, ya no tenía aire…
*Noviembre de 2011*
-está muerta… -me dijo la novia de mi tío… mi abuelita estaba muerta… la persona que más amaba ya no iba a abrir sus ojos nunca más… ya no iba a escuchar su voz… ya no la iba a abrazar.
-N-no es cierto…-dije y mis piernas se debilitaron, caí al suelo… era una sensación horrible estaba al borde del desmayo, no podía respirar y temblaba, temblaba mucho.

Los recuerdos venían uno por uno como una película, y dolían como si fuera la primera vez, quería salir corriendo, pero las piernas no me respondían, escuchaba a mis compañeros y a la maestra decir algo, pero no podía entenderles. De pronto sentí como alguien me abrazó, es él -pensé de inmediato-, su aroma me embriago, me levantó de la silla y me sacó sin decir nada. Me llevó atrás del salón, ahí estábamos solos y me desplomé a llorar en el piso, Kihyun se sentó a mi lado y acarició mi cabeza, se sentó y me acomodó de tal manera que quede encima de sus piernas, no pensaba muy bien lo que hacía solo quería que se quedara a mi lado, me sentía bien ya que él estaba ahí, era como si todo lo malo se hubiera evaporado y quedado en segundo plano, mi respiración se estaba calmando ya no era agitada y dejaba de temblar poco a poco, rodee su cuello con mis brazos y recargué mi cabeza en su pecho.
-Todo está bien, Melody ya pasó, estoy contigo, estas a salvo. –me dijo dulcemente y recargó su mejilla en mi cabeza. Su voz era como una dulce melodía que me calmaba y me daba mucha paz. El llanto cesó, pero no dije nada.
- ¿Estas mejor? –dijo tomando mi rostro con ambas manos.
Asentí y volvió a abrazarme. Con una de sus manos acarició mi mejilla y eso me hacía muy feliz.
-G-gracias –dije por fin con un hilo de voz y volviendo mi rostro frente al suyo.
-Estoy para ti no tienes que agradecer. –alejando un mechón de pelo de mi rostro –siempre voy a estar para ti… -estábamos a centímetros uno del otro, él bajó su mirada a mis labios y yo no pude evitar morder el mío, estaba algo nerviosa, comenzamos a acercarnos más y más nuestros labios rozaban yo cerré los ojos, -quédate quieta, quédate quieta- y…

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Y... Nos vemos la próxima semana jsjs los amito muchooo gracias por ver mi historia y votar por mí, quizá este cap sea muy sentimental, pero espero que les guste, es una parte fundamental de la historia jsjs Weno byeee los amo 💕