Kara sostuvo con fuerza el cuello de la botella de cerveza en su puño, dejando que su pulgar se deslizara sobre el vidrio liso. Trató de ignorar la opresión en su garganta, su pecho agitado y su respiración acelerada. Trató de controlarlo como si hubiera estado tratando de controlar todo lo demás en su vida. Pero no importaba cuánto intentara pensar en algo positivo, su mente seguía repitiendo las mismas palabras que le habían dirigido innumerables veces.
"¿Cómo no sabes lo que es eso?"
"¿Has estado viviendo debajo de una roca toda tu vida?"
"¿Qué quieres decir con que no lo entiendes? Es fácil."
"¿Por qué estás vestida así?"
Kara podría seguir y seguir sobre todas las veces que sus amigos y conocidos la juzgaron o la menospreciaron por no captar un concepto de inmediato. La hacía sentir estúpida e insegura, y lo peor de todo, la hacía dudar de sí misma.
Hizo todo lo posible por comprender las diversas culturas y costumbres de la tierra y, claro, a veces leía mal una situación o no actuaba de la manera más aceptable socialmente. Eso no descartaba el hecho de que ella lo estaba intentando .
Cuanto más nerviosa se ponía al respecto, menos culpable se sentía por tirar la botella de cerveza contra la pared del callejón. El vidrio se hizo añicos junto con algunos pedazos de yeso del edificio, el sonido del choque rebotó en el edificio detrás de ella. Tirar la botella no necesariamente la hacía sentir mejor, pero era lo único que podía pensar para disolver su ira sin causar una gran escena...
"¿Que demonios fue eso?"
...o eso pensaba ella.
La voz del hombre sobresaltó a Kara. No tanto porque tuviera miedo de meterse en problemas por dañar la propiedad privada, sino por el hecho de que había estado tan enojada, ni siquiera lo había escuchado cerca con su audición avanzada. Oh bien. Otro error para agregar a su lista cada vez mayor. Afortunadamente, pudo volar antes de que el hombre la confrontara, solo que, antes de que ella estuviera a punto de hacerlo, lo escuchó murmurar en voz baja:
"¿Te importaría hacer tu berrinche en otro lugar? Algunos de nosotros estamos tratando de no perder una extremidad aquí".
La última declaración la hizo congelarse en el lugar, de repente alarmada de que él pudiera necesitar ayuda. Después de todo, eso no era algo que la gente dijera de manera casual cuando estaban solos. Encendiendo su visión de rayos X, pudo ver a través de los altos edificios que la rodeaban. Escaneó hasta que pudo ver un edificio de dos pisos, una vieja librería por lo que parece, y vio al hombre en cuestión tirado en el suelo, de espaldas a ella, y su pie obviamente atrapado en algo. Estaba acostado boca abajo, tratando de llegar a su espalda, pero cada vez que lo intentaba, siseaba y volvía a su posición delantera durante unos segundos. Kara no tenía idea de en qué tipo de artilugio estaba atrapado su pie, pero sabía que podía ayudarlo a salir de él.
Kara estuvo frente a librería en cuestión de segundos. Se obligó a reducir la velocidad para no asustar al hombre con su velocidad y entró en la tienda, aunque tenía curiosidad por el hombre, no pudo evitar mirar primero los artículos diversos esparcidos por la habitación. Había cabezas de animales colgadas en las paredes, muebles de todo tipo, libros polvosos,una gran colección de películas y música, pinturas y mucho más. Estaba agrupado hasta el punto de que Kara sintió que tenía que hacerse lo más pequeña posible para navegar con éxito hacia el hombre sin derribar nada.
Los ojos del hombre se habían centrado en ella tan pronto como entró, pero solo ahora pudo asimilar correctamente su chaqueta de cuero marrón, ojos azules y un rostro demasiado familiar. A juzgar por su ceja levantada, Kara supuso que Jason Todd también la reconoció.
