Vida tras cámaras [MINSUNG]

3. Pasado: La inseguridad se quita con paciencia.

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Han continuó su meticuloso estudio de la situación hasta que sintió un dolor en el cuello; quiso masajearse la zona afectada para bajar la tensión muscular pero la mano del mayor llegó antes que la suya, pillándolo desprevenido. 

En ese momento, Han dedujo una epifanía tardía.

"Eureka."

"¡Lo había logrado!"

"¡Había conquistado el Everest sin haber escalado! ¡Invadió China más rápido que Gengis Khan; había dominado el loto primario sin saber taijutsu!"

"Tenía todas las de perder pero hoy era su día de suerte ¡Logró atrapar a un tigre sin ninguna red o escopeta! Su habilidad para la caza era innata, invaluable, majestuosa, y su mejor ama era la labia."

"¡Era todo un rock star!"

Terminó dando pequeños pasitos en su sitio, aleteando con sus manos como si fuera volar. 

Había atrapado a un hermoso ejemplar que se encontraba en la lista de los hombres más guapos de Corea del Sur; un hombre tranquilo con una mirada soñolienta (agresiva) y una sonrisa pícara que regalaba a la fanaticada sin resabio; con su cuerpo bien trabajado y sus piernas que lo hacían desfallecer cada vez que se concentraba al ver sus fancams en tiempos de descanso. 

Ni hablar de su personalidad ¡Oh! Su unica personalidad de cuarta dimensión que atraía locos a todos, y con todos evidentemente se refería a él.

"Hola, me llamo todos, no Jisung", nombre muy sobrevalorado. "También pido perdón a mi familia. Mamá, papá, hermano Bbama. Su pequeño ya quedó atrás en la historia, soy un adulto desde hoy."

A pesar de ser pegajoso, seguía con la mueca de diversión y la vista agitada por el duro trabajo de bailar 2 horas seguidas en la tarima. 

Han detuvo su ritual de la felicidad y reparó en la incomodidad de su espacio ocupado con un empujón leve, alejando al otro y recuperando el aliento por la arritmia de su alegre corazón. 

Sin embargo, desconoció la reacción de Minho quién seguía actuando igual.

Eso le pareció extraño.  

Repasó su investigación sobre el romance y comprendía que, al declararle el amor a alguien, la otra persona tenía que actuar feliz y sentirse agradecido, saltar hacia sus brazos y correr hacia el amanecer en medio de un campo lleno de rosas; o si por el contrario no era adepto a su sentir, a lo sumo actuaría apenado por la confesión y lo rechazaría de tajo. 

No es que no tuviera experiencia en este tipo de cosas, y ni que fuera versado en los temas del cortejo y la pasión juvenil (Lo único que le interesa del amor está en películas, libros, o videojuegos de dónde saca apoyo para sus canciones) pero el actuar de su media naranjita presentaba una anomalía que atrajo su curiosidad.

"¿Por qué se veía tan tranquilo?"

Han, con el cerebro de pan que ilustra sus días, lo pensó seriamente.  

Después de varios minutos, y darle tantas vueltas a la aptitud de su circunspecto amigo, teorizó una hipótesis que desinfló sus ilusiones. Podía ser, para tristeza suya y el de su corazoncito dolido, que la decisión del mayor nació más debido a la euforia naciente producto del espectáculo que del hecho mismo hecho de sentir amor hacia su persona.

Se pellizcó las manos, enojado.  

"¿Qué estupideces piensas, Jisung? Solo estas asustado porque no sabes cómo lidiar con un Minho qué... esté... enamorado de... ti".

Mientras se dirigían a los camerinos, detalló que el bailarín parecía una estatua griega que fue rociada gentilmente en su jardín en donde todo se veía remotamente normal. Además, faltaba el lenguaje corporal de sus actos.

De hecho, no se habían dado ni un agarre de manos.  

Sin embargo, lo entendía; había muchos ojos atosigándoles el paso, y no se imaginaba tener que lidiar con los chismes. 

Además, tenía entereza de que el mayor siempre sostuvo sus acciones con hechos; nunca negaba algo que le gustara, y siempre salía en contrataque si algo le fastidiaba, actuando autentico.

"El secreto de una buena relación está en la confianza", había escuchado de Chan Bing cuando escribía una de las canciones de Noeasy; quizás en la de lo siento, yo te amo pero no estaba por completo seguro. 

Tendría que aplicar la frase a pesar de las dudas presentes en su cabeza por la llegada de su primavera, o en términos coloquiales, ¿Cómo pedirle la mano a Lee Know sin morir asfixiado por comer papel higiénico o ser incinerado en la air fryer a 180 °C a fuego lento? Nivel I de XXXXXX...

Por otro lado, estaban insolados, la falta de su hogar los colocaba sensibles; el cambio de horario, la privación de sueño, la sensación de estar en medio de una multitud de extranjeros, o el simple hecho de decir "si quiero" por mero aburrimiento; tantas excusas que después echó por la borda cuando al cerrar la puerta de los camerinos, ya estando solos los dos, las cosas cambiaron. 

Minho comenzó a repartir pequeños piquitos sin mediar, sorprendiendo en el acto a Han; la zozobra murió cuando sus dedos se entrelazaron por su iniciativa, aumentando el ritmo de los ósculos hasta convertirse en un beso correspondido.

—Han... Me tientas demasiado.

—Hyung, no te preocupes. Estoy 100% para tí—lo abrazó, arrecostandose sobre su hombro—... Ahora somos novios.

Sentía cosquillas por la respiración del bailarín en su frente. De repente, de un jalón, el agarre entre sus caderas lo ocupó hasta levantarlo del suelo.

Antes de poder quejarse, Minho traspasó todos los estados de color rojizo en menos de 10 segundos. 

No pudo decirle nada.

Río y apretó más hacía sí al puro nervios de Lee; el calor que emanaban de su cuerpo lo ahogaba, pero por la dicha no podría sino hacerlo recordar que estaba en el lugar adecuado.   

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