La Conquistadora

Gran Señora

Valeria se arregló bien el vestido mientras aceptaba la mano del sirviente para bajar del carruaje. No estaba muy emocionada por entrar al senado, pero su tío había pedido su compañía en persona junto con su madre, a los lejos podía ver a su tía Escribonia junto con su prima, la mujer parecía francamente aburrida, pero siempre había sido así, su tía solo sentía amor por su hija

- Que bueno que habéis llegado- Dijo Julia Jr. acercándose a ambas y abrazando a Valeria, estaba muy nerviosa- Hace poco han entrado todos al senado

- ¿Esta el famoso comandante adentro? - Pregunto Julia madre mientras las 4 mujeres avanzaban hacia el lugar donde todos los senadores y grandes poderes de Roma comían

- La comandante querrás decir- Dijo Escribonia divertida haciendo que tanto Julia como Valeria se detengan

- ¿Es una creación de Afrodita? - Pregunto Valeria intrigada, no era común que llegaran a puestos de poder, la gente solía odiarlos o ignorarlos

- Si, una con bastantes agallas, solo se sacó el casco y siguió hablando con el comandante Adraseur como si nada- Se rio la mujer- Augusto estaba más rojo que su capa porque además se ofreció a acompañar a la señorita Adraseur cuando el comandante se lo insinuó

Eso detuvo de inmediato la caminata de Valeria que observo a su tía con ojos interrogantes, solo había una mujer creación de afrodita a la cual el comandante Adrián dejaría para cuidar a su "preciosa hija"

- ¿De casualidad su nombre es Alexandra? - Pregunto en voz baja, peligrosa. ¿Por qué demonios Alexa no se lo habría comentado anoche? Se habría arreglado mucho mejor ahora que lo pensaba

- Si, Alexandra de Macedonia, es la heredera de Alejandro Magno- Valeria y su madre se observaron, recordando que Alexa había dicho que había encontrado a su familia al fin

Las 4 entraron al salón donde el olor del vino y la comida las invadió, estaba en el primer plato, la entrada. Las mujeres avanzaron entre las mesas y los esclavos que llevaban la comida hasta llegar a una zona más privada, donde debería estar el emperador

Dicho y hecho, Augusto está comiendo algún platillo ligero para abrir el apetito mientras que Adrián hablaba tranquilamente, bebiendo de una copa de vino mezclado con miel, con una mujer que estaba de espaldas a ellas. La respiración de Valeria se atascó al reconocer aquel cabello, había deseado pasar sus manos por aquel sedoso pelo toda la noche, pero fue su madre quien dijo aquel nombre

- ¿Alexa? - La comandante de inmediato reconoció la voz de la única mujer que había tenido como figura materna en su niñes, así que rápidamente se levantó de la silla y se quedó estática, algo nerviosa de como reaccionaria la mujer ante su presencia

- Gran señora, qué gusto verla de nuevo- Dijo haciendo una ligera reverencia hacia Julia que seguía un poco impactada- Señora Escribonia señoritas Julia, un placer conocerlas- Se acerco a ambas mujeres y beso sus manos con galantería y educación- Señorita Valeria, es un honor verla de nuevo- Valeria se sintió un poco ofendida de que la haya saludado al último, pero decidió ignorarlo, después de todo lo mejor estaba al final. Acepto con una sonrisa coqueta que Alexa besara su mano

- Mi niña, no sabía que ocupaba el cargo de Legatus- Murmuró Julia acercándose bajo la mirada de su hermano y abrazando con fuerza a aquella niña que había cuidado como si fuese suya- Que honor pensar que te vi crecer hasta convertirte en la campeona de Roma

- ¿La conoces hermana? - Pregunto Augusto con curiosidad, no esperaba que la comandante conociera a su hermana, pero parecía que así era, tal vez le beneficiaría

- ¿Recuerdas aquella huérfana que cuide hace tantos años? - Augusto asintió, le había dicho mil veces a su hermana que dejara aquella huérfana pudrirse en la calle- Es ella, mi pequeña Alexa se convirtió en toda una soldado- El emperador definitivamente se atragantó con lo que comía ante sus palabras