Prólogo

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Me mire al espejo por última vez, mi vestido negro resalta cada una de mis curvas, benditos los genes de mamá.

Tenía una abertura que comenzaba desde mi muslo, tenía unos pequeños tirantes que se cruzaban en mi espalda en forma de cruz, pero aún así resaltaba el escote de ella.

Mis tacones dorados, alargaban más mis piernas, mi cabello recogido en una perfecto coleta, y claro no podía faltar mi cadenita que me había regalado papá para mí coronación dónde resaltaba el dije de mi loba dorada tal cual como es ella.

-¿Estás lista?

Asentí dándole una sonrisa a mi hermano menor.

-¿Cómo me veo?

-tan hermosa como siempre.

-¿Dónde está Jacob?

-Esta abajo, interrogando al galán, sabes cómo es de celoso incluso invito a Cristóbal para poder intimidar al chico- soltó una carcajada

-No lo puedo creer el pobre debe de estar asustado - tome mis cosas para poder salir de la habitación

-hey tranquila - me tomo suavemente de los hombros - sabes cómo somos, eres nuestra única hermana y papá aunque lloro a moco suelto ya nos advirtió que su princesa tenía derecho hacer feliz.- Aiken beso mi frente

-¿Hablaron con papá? - pregunté con el ceño fruncido

-Claro, lo llamamos para preguntarle si podíamos arrancarle el corazón a un humano, sin que nadie se entere - lo mire horrorizada - quiso saber la razón, le contamos y bueno lloro, lloro y lloro hasta que mamá lo regalo, diciéndole que ya eras una mujer- sonreí, mi padre siempre me mimo y cuando era pequeña yo siempre le decía que nunca tendría compañero que el y mis hermanos siempre serían mis únicos hombres.

-Son unos chismoso Aiken todavía no les contaba y ustedes van con el chisme - lo amenace con mi dedo

El solo se escogió de hombros restándole importancia, claro ellos querían que papá volviera para obligarme a deshacerme de mi compañero.

Camine detrás de el, estaba nerviosa, mis manos sudaban un poco, estaba nerviosa, está sería nuestra primera cita, aunque ya nos conocíamos, ahora las cosas son diferentes, por fin le había declaro mis sentimientos y el me había correspondido.

Desde que supe que el era mi compañero me di el tiempo de conocerlo y lo quise enamorar, que me amara por voluntad propia no quería obligarlo a estar conmigo solo porque el era compañero, el era un humano, y su corazón no funcionaba igual que el mío, yo lo ame al primer momento que mis ojos se conectaron con los suyos, cuando por primera vez lo ví sonreír, amaba todo de el incluso sus maldita obsesión por siempre robar mi comida.

Al bajar las escaleras pude escuchar las voces masculinas de que venían del salón, me asome sobre el hombro de Aiken.

Ahogue una carcajada, Jacob y Cristóbal tenían una competencia con mi compañero, estaban jugando al uno, podía ver el ceño fruncido de Cristóbal, Tyler se mordía las uñas nervioso y la sonrisa de arrogante de Jacob.

-¡Uno! ¡Gane perras! - grito Jacob mientras hacía un baile de Víctoria

-No sé cómo siempre ganas joder, eres un tramposo - se quejo Cristóbal de brazos cruzados, mi hermano le saco el dedo corazón mientras se burlaba

-Soy pésimo para esto, Leonor me matará cuando se entere que aposté, teñir el cabello.

-¡Que hiciste que! - exclamé saliendo detrás de la espalda de Aiken, los tres se quedaron blancos, eran como tres papeles con ojos, a mi lado Aiken soltó una fuerte carcajada - ni lo sueñes Tyler- lo apunte - y tu, ¿Eres idiota? - reclamé a mi hermano

- Lo siento hermanita apuesta son apuestas - Jacob se frotó las.manos - ahora veremos el color de cabello.

- ni se te ocurra, o le diré Camila que les has estado robando sus chocolates favoritos - el se puso una mano en el pecho fingiendo dolor

-Eres una....- entrecerre los ojos en su dirección- hermosura - hablo con los dientes apretados

-Ahora vayanse - se despidieron, para luego marcharse dejándome a solas con el hombre que me vuelve loca, gire mi rostro, me dió una mirada recorriendo mi cuerpo.

Se acercó, tomándome por la cintura apretando mi cuerpo contra el suyo, dejo un suave beso en mi cuello.

-estas hermosa mi amor - susurro en mi oído

Mi piel se erizo ante su toque, podía sentir como mi corazón se aceleró, mi respiración se comenzó agitar.

-tu estás guapo.

-Me estás volviendo loco Leonor, no sabes las ganas que tengo de hacerte mía nena- susurro con su boca a solo centímetros de la mía.

Sin pensarlo Dos veces lo tome por las solapas de su chaqueta, juntando nuestros labios, el apretó más su agarre sobre.mi cintura, profundizando más nuestro beso, su lengua se unio a la mi, era un besó lleno de deseo y pasión, un besos lleno de necesidad.

Nos separamos por falta de aire. El acaricio mi mejilla mientras unía su frente con la mía.

-Te amo Leonor, te amo como nunca he amado ha alguien

Ahí estaban las palabras.que tanto desee escuchar, sentí como Miles de mariposas revoloteaban en mi estómago.

No podía sacar la sonrisa de mi rostro, me sentía tan feliz, el me dijo que me ama por fin lo había dicho, después de seis meses.

El me ama

Yo lo amo

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Dejen su amor. ♥️

Amado y Deseado por Mi Reina AlphaWhere stories live. Discover now