2

802 89 13
                                    


.

.

El trabajo por fin finalizó y un Hyunjin cansado guardaba su gorra y mandil dispuesto a regresar a casa para terminar algunas tareas pendientes que lastimosamente no puedo terminar el otro día, de tal manera que pueda descansar en paz uno vez acabado todo, no tardó mucho para retirarse hasta que su jefe apareció en su camino dejándolo sorprendido, no era buena señal.

Aparecer abruptamente, se supone que todavía no era el pago.

— Hyunjin debemos hablar de algo delicado — tenía un sobre en la mano derecha cerca de su bolsillo, este solía aparecer cada dos semanas, era el pago que se le otorgaba al final de cuentas.

No eran para nada buenas noticias. Tragó en seco viendo por lo bajo.

— ¿S-sucede algo señor? recuerdo que no tuve algún inconveniente en mi trabajo y-

Sus manos temblando nerviosas al sentir una presión en su pecho.

— No es eso ... en realidad necesitamos a un joven de tiempo completo y usted está en la preparatoria, así que ... nosotros necesitamos a alguien que cumpla ese requisito puesto a que la clientela está subiendo últimamente, no lo malinterprete por favor jóven, usted es muy buen trabajador.

— ¿Estoy despedido? — el otro asintió con pena y vergüenza ante el chico en frente — entiendo, gracias por el empleo, estos seis meses fueron de gran ayuda.

Hyunjin tomó sus cosas, recibiendo el cheque, guardando este en su mochila, antes de irse hizo un una reverencia, para abrir la puerta del local de comida de rápida y despedirse.

"¿Qué hice mal?", bueno, no era claro, la razón parecía una excusa.

¿Cómo va a sustentar sus gastos?¿robando?, ese era el gran problema, ¿cómo podría arreglar esto?, necesita a sus padres, pero no los tiene, ellos fallecieron hace tiempo. Realmente, todo sería mejor si tuviera algún tipo de apoyo por parte de algún familiar, mínimo la compañía de alguien que lo anime porque aveces todo se vuelve tan sombrío y su cara decae enormemente ante noticias así.

Él claramente no es un alfa, como los de las novelas, incluso las chicas bonitas lo miran dolidas de su condición, hasta con lástima, pero ya está acostumbrado a ese trato, "pobrecito", no posee una mansión o una piscina, no es un pura sangre de esos fuertes y dominantes. Suele descuidar su apariencia por llegar a tiempo al trabajo, bueno al que tenía, no las culpa, puede valerse por si mismo y no por los demás.

El camino fue tan aburrido con pensamientos negativos en la mente.

Llegó a su casa, tomó una siesta en su muy pequeña y acogedora cama no muy suave, en un cuarto donde la luz es robada del vecino por parte de la dueña, que no le puede dar algo mejor que eso, y a veces con suerte consigue wi-fi, es tan miserable en ese aspecto, que aveces se pregunta si puede continuar con sus estudios. ¿O dejarlos le facilitaría todo?

Ama pintar, pero no tiene pinturas ni pinceles, cuándo sea millonario cómo esos alfas a los que admira podrá haber cumplido cada uno de sus sueños.

"Creo que hoy no voy a cenar, debería repartir el dinero para que me alcance para la semana completa", sonrió desganado.

"CORTEJANDO A UN ALFA" → Hyunho Where stories live. Discover now