Existe un momento en la vida cuando te das cuenta de que todo a tu alrededor se desmorona. A veces es poco a poco; otras veces es rápido, tanto que cuando te das cuenta ya tocaste fondo y no tienes una forma de regresar.
No puedes ir más abajo.
No hay más abajo.
Y no sabes cómo regresar o si existe alguna manera de hacerlo.
Hace unos meses, hace unos días, hace unas horas creí estar en ese lugar. Creí haber tocado fondo y que nada más podría compararse a ello. No había nada peor, nada podía sobrepasar esa situación.
Estaba completamente equivocada.
A veces necesitas encontrarte con una situación peor para darte cuenta de que lo anterior no era tan imposible de resolver.
Ahora nada podía compararse con los gritos, el frío y la gran oscuridad que me rodeaban.
Nada podía ser peor que esto.
Nada.
YOU ARE READING
Nuestra Constelación en el Cielo | Sample
RomanceHan pasado años desde la última vez que Anna se permitió buscar la Constelación de Virgo, aquella que le recordaba a su niñez, aquella que la unía a él. En 1912 Anna es toda una adulta, y, para la sociedad, una mujer de su edad ya debía empezar a fo...