[Diferentes] - Hardenshipping (Magno/Maxie x Aquiles/Archie)- Pokémon ORAS

Capítulo 15: Descontrol

- ¿Qué es de tu abuelo, Aquiles? - preguntó Erico-. Hace mucho que no le veo.
- Bien, sigue igual de bien que en sus tiempos mozos - dijo el Aogiri-. Y por lo que veo, tu también, Erico.
- Sí, bueno, yo sigo como puedo - el líder de Malvalona rio.

El abuelo de Aquiles, Harry y Erico se llevaban muy bien. Habían empezado juntos su aventura hace muchos años atrás. Ambos tenían ya una edad avanzada, pero habían seguido caminos distintos en los últimos 20 años. Erico se presentó a la candidatura para ser líder del gimnasio de Malvalona. Quizá tenía una edad avanzada pero como decía él "Los jóvenes de hoy en día son los que me animan a seguir combatiendo, encienden esa chispa que reside en mi interior". Y aún disfrutaba de los combates, el hecho de ser un líder veterano le hacía tener una experiencia en los combates tan alta que dejaba sin aliento a los nuevos aspirantes.

Por otro lado, Harry se dedicó al estudio y descubrimiento de nuevos Pokémon acuáticos y el estudio del cielo y meteorología. El mar le encantaba, algo de pirata si que había en él. También el cielo. Por eso su especialidad eran los Pokémon de tipo agua y volador. Amaba el sentimiento de surcar los cielos de Hoenn a lomos de su Swellow y bucear por el mar de las rutas acuáticas junto a su Tentacruel. Había trabajado en el museo oceánico de Calagua preparando exposiciones y visitas guiadas sobre el mar, el océano y Kyogre. Él no tenía una obsesión con Kyogre como había tenido su nieto, y se fijaba tambien en otros Pokémon de tipo agua como el legendario Suicune o Lugia, Pokémon legendarios originarios de la región de Johto.

Cuando eran jóvenes también mantenían una bonita rivalidad, donde la mayoría de veces la victoria se la llevaba Erico por la ventaja de tipos. Pero Harry buscaba estrategias continuamente, probaba con todo tipo de Pokemon y movimientos.

- ¿Y a ti que te ha pasado? - preguntó el anciano.
- Fui envenenado por mi propio Pokémon - respondió-. Es demasiado rebelde y Harry y yo creíamos que sabríamos calmarle, pero no ha sido así.
- Podrías dejarlo en la guardería - sugirió.

Pero Aquiles negó con la cabeza.

- No. Yo creo que para que un Pokémon te tenga confianza, lo mejor que se puede hacer es convivir con él y apartar todas las diferencias - argumentó-. Dejarle en la guardería sería como alejarme más de él.
- Hum, es cierto...

Se hizo el silencio en la habitación. Aquiles solo pensaba en Magno y en lo ocurrido minutos atrás. Realmente estaba muy agradecido con él, apreciaba su vida y el pelirrojo, la persona que le gustaba, le había salvado su vida.

- ¿Y qué hay del pelirrojo que te ha dicho que volvieses a tu cuarto? - preguntó.

Aquiles salió de sus pensamientos, se alteró un poco.

- Es un amigo mío, me ha salvado de morir ahogado y envenenado - explicó-. Se llama Magno y es el líder del Team Magma, estamos recorriendo Hoenn juntos para tratar de salvar la región.
No podíais haber tomado mejor decisión - dijo Erico-. Pero lo que habéis hecho está muy mal, ha sido muy peligroso y tenéis ideales muy egoístas. Los dos.

El Aogiri se quedó perplejo.

- ¿Me estás regañando, Erico? - preguntó, con una sonrisilla traviesa.
- Naturalmente.
- ¡Oh, vamos, no tengo cuatro años!
- No, pero cuando tenías cuatro años sí que te regañaba - respondió soñador-. Recuerdo que me quedaba en casa de tus abuelos a tomar el café de media tarde y cuando hacías una trastada te acababa regañando. El pequeño Aquiles, que quería ser pirata.

Eran buenos tiempos, Aquiles los recordaba con cariño. Cuando era pequeño y había reuniones familiares se juntaban Lloyd y Mireia, los padres de Aquiles, sus abuelos, Harry e Irene y cuando Erico iba a visitarlos se quedaba también. Lamentablemente, Aquiles nunca vivió cerca de sus abuelos. Sus padres se mudaron desde Johto cuando él era pequeño, con unos cuatro años. En cambio, sus abuelos habían vivido en Hoenn toda su vida, en Calagua.