22. Nada es tan simple.

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Solo habían pasado unos días desde que Adrien había salido de Francia para realizar un trabajo en los E.U.A, a instancias de la empresa Agreste, pero Adrien ya esperaba que las semanas pasaran más rápido para poder regresar.

No podía dejar de pensar en Marinette y la incomodidad que venía de ella con cada llamada, había algo mal en ella que ya había notado desde la última conversación que habían tenido. Adrien no sabía qué era peor, preguntarle a Marinette qué estaba pasando o seguir fingiendo que no se había dado cuenta.

Nunca antes había estado en una relación realmente amorosa, y tampoco había muchos ejemplos en su casa. Además, Marinette Dupain cheng no era exactamente una mujer muy convencional. Si ya era bastante difícil cuando solo eran amigos con beneficios, ahora que estaban saliendo se sentía como si las cosas estuvieran más enredadas que nunca.

Adrien se sintió atrapado en un maldito laberinto, seguro de nada más que puertas en las que no podía decidir por cuál entrar. 《Ah, maldito viaje.》 Adrien suspiró. Estaba en el último descanso del día, después de maquillarse aún tenía que terminar de filmar el guión de la nueva campaña fotográfica y, para empeorar las cosas, se vio obligado a sentarse frente a un espejo lleno de fotos de sí mismo, por lo que podría elegir cuál se usaría en la portada de una revista.

El Agreste estaba tan distraído, que ni siquiera se dio cuenta de que una de las modelos se le acercaba, hasta que ella ya estaba sentada en la mesa y cruzando las piernas para apreciar el gran chip en su vestido. La mujer italiana de cabello castaño y flequillo lo miró con una sonrisa pretenciosamente provocativa.

- ¿Que pasa contigo? - Cuestionó la mujer con una voz tan suave que casi resultaba irritante.

Adrien puso los ojos en blanco, esperando que ella se hubiera dado cuenta, así que saldría de allí con toda la irritación del ego magullado y lo dejaría en paz, desafortunadamente ella no lo vio, de hecho, era más probable que estuviera fingiendo no darse cuenta del desprecio de lo modelo, para que pudiera continuar con las burlas que estaba a punto de hacer.

- Estás distraído... Suele estar bastante concentrado en el trabajo. ¿Qué ha cambiado en París?

- ¿Como asi? - Pregunta el rubio sin apartar la mirada del espejo que tiene frente a él. No necesitaba mirar a Lila, su reflejo en el espejo ya mostraba su mirada indiscreta.

- Antes no había nada que te retuviera allí. Darías cualquier cosa por pasar el tiempo en otro lugar. Pero ahora actúas como si todos los días aquí fueran una tortura, miras tu celular todo el tiempo y ves un boleto de avión a Francia.

Ella era irritantemente observadora. Y Adrien había aprendido que tenía que estar en guardia a su alrededor de la manera difícil. Antes de conocer el carácter dudoso de la castaña, se había permitido involucrarse con ella, hasta que ella empezó a contar mentiras en los medios sobre que estaban saliendo. Fue un gran problema tener que negarlo todo y aún así tener que apoyarla como compañera de trabajo.

- Entonces, Adrien, ¿qué tiene París de interesante ahora?

Casi de inmediato, el teléfono celular de Adrien vibró en su mano cuando llegó un mensaje. Los ojos curiosos de la castaña siguieron al dispositivo, pero Adrien ya lo había recogido de inmediato.

My lady❤ :

" Te necesito."


Agrete se levantó rápidamente, sin dejarse oír por las pretensiones de la joven Rossi y fue en busca de su agente, deteniéndose un segundo en medio del camino solo para volverse hacia Lila respondiendo la última pregunta que le hizo.

Más que amigos, menos que amantes.  (OneShot) adrienette +18 [Terminada]Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum