Algo tan bonito nunca puede ser borrado. Nuestra historia es una de esas que perduran para toda la vida y no se pueden borrar.
Porque no apostaba por nosotros, que lo que todo empezó siendo una amistad maravillosa acabando siendo la relación más bon...
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El móvil no deja de sonar, no se cuantos mensajes me habrán llegado ya, e incluso llamadas. Ha estado sonando por un buen rato, que aún no lo he cogido es evidente, puede ser importante si, pero si estoy dormida no cojo el móvil hasta que ya me pongo en pie.
Hace unos minutos que ha parado, pero yo creo que es que ya ha llegado el teléfono a punto de colapsar porque madre mía parecía que echaba fuego.
No estoy muy preocupada la verdad, porque si fuera algo de mi hermana ya hubiesen entrado mis padres a contármelo, al igual que si fuese de algún miembro de mi familia.
Harta de dar vueltas y vueltas en la cama, me pongo de pie y cojo el móvil. Entro al baño y después bajo a desayunar.
Cuando ya estoy sentada en la mesa con un zumo de piña y unas tostadas, me pongo a ver el móvil.
Mensajes de mi hermana, mensajes de Pedri , mensajes de Fer, mensajes de Pau, mensajes de Eric, mensajes de Unai. Menciones en Instagram, en tiktok, en Twitter.
No quiero entretenerme y ver todo uno a uno. Si ha pasado algo necesito saberlo ya y que mejor que enterarme por mi hermana.
- Afrodita, ¿ estas bien? - me pregunta mi hermana nada más descolgar.
- ¿ qué pasa? ¿ porque tengo tantas llamadas y tantos mensajes y demás?
-¿ no te has enterado de nada?
- no África ¿ qué pasa? Me estás preocupando.
- te cuento.
Mi hermana empieza a contarme que están todos los deportistas españoles en una villa olímpica, algo que ya sabía, y que en esa villa hay dos chicas que ayer se presentaron a los chicos. Una de ellas, llamada Noelia, no dejaba de mirar a pedri y le coqueteo. También me cuenta que pedri no estaba para nada cómodo, que se encontraba muy reacio y que se fue a dormir rápidamente.
Después de la charla con mi hermana, una de mis amigas, me envía por Instagram un directo de una chica, por simple curiosidad me meto y veo que es la tal Noelia esta.
La chica esta sentada al lado de una compañera en la que imagino que será su habitación. La verdad no le estoy echando mucha cuenta hasta que dice algo que hace que me atragante con el zumo de piña.
- me he liado con pedri - suelta la chica y yo abro los ojos.
Rápidamente apago el móvil por completo, no quiero saber de nadie.
Acabo de desayunar aunque sin hambre alguna y subo a mi habitación. Me tumbó en la cama y las lágrimas empiezan a brotar de mis ojos.
Pienso y espero y deseo creer que Pedri no me haría eso, pero ahora mismo no quiero saber si lo ha echo o no, solo quiero apagar el móvil y desconectar.
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Estamos la mayoría en la habitación de Marco Asensio y Dani Ceballos jugando a la play, Dani olmo apaga la televisión un momento y todos le miramos con cara de pocos amigos.
- no me mateis. Pero mirad esto es importante - dice con su iPad en mano.
La coloca en lo alto de la cama y todos formamos un coro alrededor de ella.
- es un video que me han pasado de un directo que ha echo Noelia hace unos minutos - dice Olmo.
Chasqueo la lengua y el le da al play.
- pedri y yo nos hemos liado. - suelta tan pancha.
Todas las miradas recaen en mi y todos los chicos niegan con la cabeza.
- esto es alucinante de verdad. Que necesidad de inventar cosas falsas tiene la gente tío. - digo frustrado.
- lo hace queriendo pedri, quiere tú atención - me dice Asensio y yo asiento.
- pues mi atención no la va a tener.
Escuchamos unos nudillos golpear la puerta y Dani ceballos, que es el que está más cerca de la puerta, abre. África pasa rápido a la habitación.
- creo que mi hermana ha visto el directo, porque ha apagado el teléfono.
Me llevo las manos a la cara y suspiro. Mi móvil empieza a sonar y es Fer.
- pedri no habrás sido capaz ¿ verdad?
- te lo juro por dios Fer.
- menos mal hermano, mucha suerte con afrodita.
- gracias.
Estoy un rato en mi mundo, pensando en que puedo hacer para que Afrodita no se crea esa noticia.
- pedri la cabeza te va a echar humo - me dice Eric.
- un momento.
Cojo el móvil y me salgo al balcón, hago una llamada y solo espero que mañana todo esto se arregle.
- pedri, ¿ qué has echo? - me pregunta Pau.
- mañana lo veréis, ahora solo os digo una cosa. Como esa niñata rompa lo que Afrodita y yo tenemos, se va a liar.
- así se habla pequeño - me anima unai.
Cuando ya estoy en mi habitación por la noche intento llamar a Afrodita un par de veces, mandarle mensajes, pero nada de nada. Suelto un suspiro en el aire y me paso las manos por el pelo.
Esto se va a solucionar como que me llamo Pedro González López, porque soy capaz de subirme en un avión, perderme los juegos olímpicos para ir a por ella.