• 1/3 •

633 39 7
                                    

“No miro atrás, porque hemos encontrado nuestro destino” –La profunda y hermosa voz de Taehyung resuena en todo el predio. El joven luego da un paso a la derecha y se acuclilla, dejando libre el centro del escenario.

“No me arrepiento, bebé” –Ahora es Seokjin quien endulza los oídos de todos los presentes con su preciosa voz–. “Por siempre”.

“Por siempre” –Repite Tae, poniéndose de pie y ubicándose justo delante de Jin, mirando al frente.

   Los demás miembros siguen interpretando DNA como siempre, pero Taehyung tiene otra cosa en mente. Sin previo aviso se voltea, su rostro a pocos centímetros del de su hyong. Ante esta inesperada acción, Jin abre muy grande sus ojos y se queda petrificado, aunque intenta mostrarse normal.

   Sin dejar de mirarlo, Tae avanza rápido los centímetros que los separan, y presiona inocentemente su nariz con la del mayor, desplegando luego una sonrisa. Ante los ojos del público que observa en vivo y a través de las cámaras, esto fue una acción pícara y adorable.

   Pero para el staff y para el resto de los miembros, eso fue una completa osadía.

   Una relación secreta de unos cuatro años de duración está todo el tiempo al borde de ser descubierta, por causa de ese atrevido y temerario hombre. Sí, Kim Taehyung ama el peligro, ama jugar con las reglas, ama la adrenalina que corre por su cuerpo con estos actos. Una de sus cosas favoritas es coquetearle a su hyong frente a miles de personas, y hacerlo pasar por simple fanservice.

   Pero en el fondo también tiene algo de temor, de que un día sus rebeldes acciones tendrán consecuencias irremediables. Sin embargo, ni siquiera su propia mente logra detenerlo. El hombre sigue aprovechando toda oportunidad para flirtear con su Jinnie en el escenario.

   Luego del show, todos deciden que lo mejor es separarse e ir a cenar en la tranquilidad de sus habitaciones, para reponer energías. Tae y Jin, por supuesto, están en la misma habitación.

–Hyong tienes que probar esta ensalada. No pensé que tendría tan buen sabor –Expresa Taehyung, con la boca aún cargada de sabrosas verduras.

–No, gracias. Ya no me cabe un bocado más –Resopla Jin, recostandose en el respaldo de su silla. La ensalada es solo uno de los cinco platillos que ordenaron.

   Taehyung no quiere seguir comiendo solo, así que en cuanto su hyong dice eso, él también deja de comer. Bebe un trago de agua, toma una servilleta y limpia los restos de comida que tiene en las comisuras.

–Ohhh, cierto. Yo tengo que hablar seriamente contigo, niño travieso –Dice el mayor, girándose hacia Tae. Su tono pretende sonar enojado, pero dista mucho de eso.

–Ya sé de qué quieres hablarme –Sonríe el otro con picardía, dejando la servilleta en la mesa–. Oh, hyong, ¡Te veías tan hermoso hoy! Con esa ropa, y tu frente descubierta. No pude resistirme.

–¡No me vengas con eso, Kim Taehyung! Te conozco, lo hiciste a propósito –Jin se esfuerza en vano por sonar enojado.

   El hombre no está ni remotamente enojado, la verdad adora recibir muestras de afecto de su bebé. Pero por conservar su orgullo, debe pretender estar molesto.

–Bueno... No puedo mentir, llevaba un rato planeándolo. Aunque no pude hacer todo lo que había pensado –De repente, Taehyung se pone pensativo y serio, tocando su barbilla con su dedo índice.

–Ah, ¿No?– pregunta Jin con curiosidad.

–No. Yo quería besarte –Lanza descaradamente el menor, volviendo a sonreír con picardía.

Vlive Taejin (three-shots) EN ESPAÑOLWhere stories live. Discover now