Superando miedos/ Kiribaku

9

Los dos amigos se sentaron juntos justo en frente de sus padres, y una vez la comida servida, su madre decidió hablar.

-Bueno, Kirishima, ¿qué tal fueron tus notas?

-Oh, esto, bueno...de no ser por Bakugô, habrían sido horribles.

-¿A qué te refieres?

-Él me ayudó a estudiar la semana anterior a los exámenes, si él estaría perdido.

-Entonces tú debes ser uno de los chicos que fueron a por él en Kamino -dedujo la mujer.

-Así es -respondió el pelirrojo más serio tras haber notado a su amigo tensarse a su lado tras la mención del secuestro.

-Oh -respondió Mitsuki con pena- siento que aquí la mierdecilla te hubiera causado molestias por...

-No lo hizo -respondió Eijirô firme notando cómo la mirada de su amigo caía fijamente en él.

-¿Qué...

-No es como si fuera su culpa que la liga fueran detrás de él.

-Bueno, solo digo que si su actitud hubiera sido diferente, todo habría sido más sencillo -trató de apaciguar la situación Mitsuki.

-Uno normalmente no sabe como reaccionar a que un grupo de villanos psicópatas te persigan para unirte a ellos. Sinceramente, me sorprende que Bakugô lleve tan bien la situación.

Katsuki miró a su brazo dañando sintiéndose mal porque Kirishima le estuviera defendiendo inútilmente.

-Podemos pasar a un tema de conversación más alegre -intervino Masaru- Muchas gracias por haber ayudado a nuestro hijo en todo lo posible.

Kirishima sonrió como si esa fuera una explicación suficiente.

Terminada la comida en incómodos silencios rostos por su padre terminaron la comida y POR FIN Bakugô podría estar a solas con su amigo.

Al entrar a su dormitorio Kirishima estaba tan callado que Bakugô empezó a prepararse para el golpe.

Le he hecho pasarlo mal

Se va a querer ir

Me voy a quedar solo, decidido

No siquiera querrá estar más conmigo

Me odia en este momento

-No me cae bien tu madre -dijo de repente.

Katsuki estaba desconcertado.

-No te trata bien, no me gusta.

El corazón del rubio latía tan fuerte que se maravilló por no tener un infarto.

-No es para tanto, solo es intensa, no es que haya mucha diferencia entre su comportamiento y el mío.

-No es lo mismo.

-Lo es -contradijo el rubio pensando amargamente en el infierno que le hizo pasar a Deku.

-No quiero discutir a cerca de si te mereces ese trato, solo vamos a relajarnos y ver la película -dijo Eijirô volviendo a su actitud de siempre.

En cuanto se sentaron y pudo relajarse por tener al pelirrojo al lado, a Katsuki le habían empezado a pesar los párpados. Anoche durmió para la mierda.

-¿Tienes sueño? -preguntó suavemente el otro, recibiendo un gruñido de respuesta.

-Puedes apoyarte en mí, se nota que necesitas descansar.

Probablemente si Bakugô hubiera estado más consciente le habría mandado a la mierda, pero un Bakugô cansado se tiró encima de él, y de repente el pecho de Kirishima se sintió cálido.

Como si tuviera todo el mundo protegido entre sus brazos.

Mierda, realmente estaba enamorado de Bakugô, aunque realmente la idea no le molestaba en absoluto.

~.~

¿Cuánt@s simpeando por un Kirishima enfadado?