Una chica que se mudo a la ciudad para seguir su carrera de actriz, mientras su hermano solamente desea lo mejor para ella, ¿qué pasara cuando conoce a un chico que sin conocerla, inmediatamente le pide que sea su reina?, ¿qué es lo peor que puede p...
Los días pasaban y aquella chica miraba con atención aquel hombre que miraba aquellos documentos.
Hombre:¿señorita, está segura de casarse con el señor Kurapika?
T/n: si, es mi sueño desde que lo conocí...
Aquel rubio solo se cubría la cara cansado.
Kurapika: solo cumpla el capricho de ella.
Hombre: lo haría... ¿pero no cree que está confundida?, es solo una niña que recién será adulta el próximo año y usted es demasiado mayor para ella.
Kurapika: créame que eso se lo llevó diciendo desde que nos volvimos a ver en un museo, pero está aferrada a casarse conmigo.
Al ver la molestia del rubio, está solo se levantó de su asiento y miro amenazante a aquel hombre, el cual le dió un poco de miedo.
T/n: a usted no le debe importar quién se casa con quién, ahora lo hará...
Hombre: te arruinaras la vida.
T/n: prefiero eso a que me quemen viva.
Al escuchar ambos aquello, la miraron preocupados y por fin aquel hombre acepto aquella solicitud, al salir del lugar Kurapika la miro.
Kurapika: ¿en tu país queman a las personas?
T/n: si y no... -lo mira fríamente- es solo que yo morí quemada cuando fui de viaje al pasado, pero hey... que gran experiencia tuve.
Bajo la mirada, se sentía culpable por todo lo que tuvo que experimentar en ese tiempo.
Kurapika: lo lamento.
Se estira un poco y como pudo acaricio su cabeza.
T/n: no hay problema Kurapika de hecho... ahora que lo pienso no a cambiado mucho nuestro alrededor, es un poco...
Kurapika: horrible... -al escuchar aquello la miro y sonrió- me alegra saber que recuerdas algo a pesar que es traumático.
T/n: yo de lo único que me alegro es que quiero seguir con mi plan original del que jamás te conté.
Lleva sus manos a su cintura y este la miro curioso.
Kurapika:¿y eso es?
T/n: crear un nuevo clan Kurta, es decir recuperarlo, si sabes a lo que me refiero.
Aquel rubio no pudo evitar sentir demasiados nervios e incluso sentirse claramente avergonzado.
Kurapika: eso... eso es...
T/n: quiero los nueve hijos que me prometiste o mas y la casa lejos de toda la civilización, dónde tendremos dos perros, tres gatos... no, mejor conejos.
Kurapika: ¿aún lo recuerdas? -asiente y este la abraza- te extrañe tanto, no sabes en serio la falta que me hiciste... los días para mí fueron eternos y cada vez me sentía más solo.
Aquellas lágrimas poco a poco se hicieron presentes y oculto su cara en el cuello de ella.
T/n: lo sé... -le acaricia la cabeza- es por eso que me siento culpable por todo lo que pasaste, realmente fui una egoísta, no pensé en como te afectaría y solo actúe, lo lamento mucho... en serio.
Se abrazaron con tanta fuerza que parecía como si no se habrían visto en tantos años, era algo tan extraño y poco usual ver aquello, lo único que querían ambos era estar para toda la vida el uno con el otro apoyándose para la eternidad, cosa que sucedería con el pasar del tiempo.
Kurapika: vamos a casa y preparemos todo, ¿de acuerdo?
Acaricia su cara con mucho cuidado y ella empezó a llorar, los años pasaban y T/n solo miraba aquel paisaje tan hermoso que su esposo le había dado.
T/n: si vienes a persuadir a esta chica sobre que sea un vampiro, me niego...
Sonrió y aquel rubio se sentó a un lado de ella.
Kurapika: hey... no venía a eso, ¿quería saber cómo te sentías?, recuerda que nuestro décimo hijo está en tu vientre y necesito cuidar a ambos... ¿por qué no quieres ser mi reina?
El se acercó a ella con mucho cariño y le repartió besos en toda la cara.
T/n: ya lo soy... pero como te dije, yo tengo miedo que te aburras de mi con el tiempo, es por eso que es mejor seguir con mi ciclo de vivir y morir, ¿me entiendes verdad?
Kurapika: entiendo tu punto, pero no quiero sentirme solo.
T/n: Noche escarlata... -la mira- te prometo que cada vez que esa luna aparezca, nos volveremos a ver y... te prometo que recordaré todo.
El sonrió y le revolvió el cabello a su esposa.
Kurapika: más te vale cumplirlo -toma la mano de ella y la besa- de lo contrario te voy a castigar.
T/n: te amo...
Kurapika: y yo a ti...
Ella se acomodo en el pecho del contrario y este la abrazo sobreprotectoramente, aquel chico simplemente acepto lo que ella quería y respeto su decisión al pie de la letra y aunque ella fuera ya una mujer de la tercera edad jamás se atrevió a separarse de ella, con el tiempo se acostumbro a qué T/n viniera y se fuera... y siendo sincero para el parecía una pésima idea, sin embargo, poco a poco entendió a lo que se refería T/n, ya que eso fue reflejado en el matrimonio de su primo en algunas ocasiones.
Narra Kurapika: Admito que la extraño, pero al menos nos seguimos viendo... -sonríe- te amo como no tienes una idea y es por eso que aceptaré todo lo que me pidas, seré paciente si tú lo deseas, si quieres que sea así... así será y siendo sincero me agrada esto...
Aquel chico miraba como la nieve empezaba a caer por segunda vez, el frío era un poco terrible, este solo se acomodo la bufanda y miro por última vez aquella luna roja.
Kurapika: no sabes cuánto adoro este tipo de días...
Aquella chica buscaba en su mapa con mucha emoción, para ella aquel lugar era sin duda alguna... algo nuevo para ella, al ver a aquel rubio, guardo en su mochila el mapa, se acomodo aquella bufanda y saco, sonrió y se acerco con cuidado.
T/n:¿te hice esperar mucho?
Aquel chico volteo a verla mientras lloraba, estaba feliz, tanto así que poco a poco se acomodo la bufanda.
Kurapika: no, no lo hiciste... te extrañe mucho.
Ambos fueron directamente a abrazarse y se dieron el beso que necesitaban ambos.
T/n:¿listo para nuestra nueva vida?
Kurapika: más que listo mi bella reina de las noches escarlata.
Se abrazaron con tanta fuerza haciendo que aquella unión entre humano y vampiro fuera una vez más un lazo más fuerte y duradero, se sentía tan bien y tan raro a la vez, pero eso no les impediría volver a sentir ese amor que se tenían desde tiempos antiguos, eran solo ellos, el uno al otro y la noche escarlata que era la promesa de ese amor.
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Fin...
Aisha: muchas gracias por leer hasta aquí, las amamos y nos vemos en otra historia, las amamos.
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