Una Apuesta Perdida

[Capitulo 1]

                             Elian Jones

Pongo los ojos en blanco cuando la profesora sigue hablando.

— Recuerden hacer la tarea porque...

La campana suena pero ella sigue hablando, aprieto los labios con fuerza sin poder aguantar un minuto más su chillona voz. Agarró mi mochila y salgo de la clase sin decir nada, algunos se quedan en el aula poniendo atención a la maestra, y los demás se van. La maestra grita y se queja pero la ignoro.

Siento como me dan un golpe en mi hombro y con una sonrisa divertida me giro para encontrarme con mi mejor amigo, Augusto. El se acomoda su cabello castaño con su típica sonrisa. Sus feos ojos color caca me miran. Somos amigos desde niños, y los más populares de aquí.

El me sonríe mientras busca una botella de agua de su mochila.

— Odio a esa profesora — murmuro haciendo una mueca — Y odio aun más también a las profesoras viejas con labial en los dientes. ¡O sea que la odio aun más!

Ruedo los ojos y caminamos por el pasillo. Las chicas nos miran fijamente con una sonrisa coqueta en sus labios, no las culpo. Siempre que pasamos por pasillos ganamos miradas coquetas, citas, números de teléfono. Obviamente nunca lo aceptamos, al parecer es algo que las chicas no pueden evitar no hacer.  En este instituto, somos guapos, inteligentes y millonarios. Es obvio que llamaríamos la atención.

Mi familia y la de Augusto son viejos amigos, pues desde siempre hacen negocios. La familia Baker es una de las familias más millonarias de esta ciudad. La familia Jones también, es una que casi se lleva el primer lugar.

Claro, digo casi. Porque ese lugar está ocupado por la familia más arrogante, rara, enojona de esta ciudad.

Los Evans.

La familia más millonaria y famosa de aquí. Es una familia muy pequeña. Está conformado por Anastasia Evans, una mujer fuerte y decidida, que no se deja pisotear por nadie, también es una mujer muy tranquila y hermosa.

Su pequeño hijo Oli, de tan solo siete años como mi hermana Mía.

Daniel Evans, un gran empresario y mis teorías dicen que es un mafioso, pero mi padre dice que es imposible. Es un señor con poca paciencia, que nada le importa, salvo su familia y...

El demonio que se hace llamar su hija.

Paulette.

La típica chica hermosa y sexy, que anda rompiendo corazones y le importa un carajo. La inteligente y buena estudiante con cara bonita que todos los profesores aman. Aunque cuando la veas te parezca un ángel caído del cielo, que no te engañe. Es una mimada, creída y odiosa. Típica abeja reina que hace bullying  a los que usan lentes diciéndoles cuatro ojos.Hija de papi que no le puedes tocar ni un pelo porque ya está quejándose con su papá.

Suspiró intentando mantener la calma al recordar su estúpida actitud de niña mimada. Conozco a Paulette desde que era una cría, y siempre fue una mocosa presumida y mimada. Aunque no soy cercano a ella, y claramente la detesto, tengo que verla muy seguido. Nuestras familias son demasiado muy importantes, y eso significa tener que verla siempre en los eventos y fiestas en la que nos invitan. Sin mencionar que somos compañeros y que nuestras casas están al lado prácticamente.

Conviví con Paulette desde que nací, nuestros padres eran grandes amigos, así que no tenía otra opción más que estar con ella casi todo el tiempo. Y desde que éramos unos críos nos odiamos, lo cual nuestras madres veían como tierno cuando en realidad queríamos matarnos. Pero cuando teníamos siete años. Ya no nos vimos tan seguidos, pues nuestros padres se pelearon y hasta el día de hoy se siguen odiando, y nunca nos dijieron el porque.