Banquete Hyuga "Feliz cumpleaños" (resubido)

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Una fiesta de cumpleaños era para felicitar a la cumpleañera en cuestión, para divertirse, pero este no era el caso, Hinata Hyuga quien acababa de cumplir sus 19 años, estaba siendo de todo menos felicitada

_Haí está la vergüenza de la familia Hyuga - dijo uno de los invitados

_Me compadezco de Hiashi, al menos su hija menor no es una vergüenza - dijo su mujer

Todos y cada uno de los comentarios hería a la joven ojiperla, pero no podía desmoronarse en frente de toda la gente, se acercó un camarero y le ofreció una copa, ella no bebía, y el camarero le dijo que eran bebidas sin alcohol, ella sin desconfiar tomó una y la bebió. Había pasado un rato desde que se había tomado la bebida, se sentía mareada, pronto sintió qué su cabeza daba vueltas, o más bien el salón daba vueltas, se acercó a una mesa y se recargó, sus piernas temblaban, pronto caería si no se sostenía de algo, de pronto la voz de su medía hermana se escuchó

_Hina, hermana! Al fin te encuentro

Hinata la miró con extrañeza, pues jamás se habían podido llevar bien, no por ella, si no por Hanabi, ella la odiaba en todo el sentido de la palabra y muchas veces se lo dejó claro a la gente, la mamá de Hinata había fallecido cuándo ella tenía 3 años en un "accidente", sin embargo, su padre no tardó ni dos semanas para cuándo llegó a casa con otra mujer y una bebé en brazos de unos cuantos meses de nacida, ella no sabía que había pasado, pero estaba feliz de tener una hermana, pero no podía decir lo mismo de su madrastra, quién aprovechaba cualquier momento para culparla de cualquier cosa, los años pasaron y creyó que su hermana la quería pero pronto se daría cuenta de que no era así, Hinata salió de sus pensamientos y puso atención a Hanabi quién hablaba sin parar

_Naruto-kun me dijo qué te buscara, te tiene una sorpresa nee-san, ohh!! Upss - dijo cubriéndose la boca _No le vallas a decir qué te dije, me dijo qué no te dijera, te está esperando en la tercera habitación a mano izquierda subiendo las escaleras - dijo rápidamente

Hanabi quién a pesar de tener 16 años tenía un cuerpo bien definido, hacía meses qué mantenía una relación amorosa con Naruto a escondidas y hoy por fin haría qué el dejara a la insípida de su medía hermana

_Ehh!! Naruto-kun me tiene una sorpresa

_Debes apurarte o se desesperara y se irá

Al escucharla Hinata dió media vuelta y se dirigió hacía donde había su media hermana, aunque casi tropezaba un par de veces, se las ingenió para llegar, al entrar a la habitación miró a alguien y se acercó....

_Hanabi-chan!! Has visto a hina?? - preguntó un joven acercándose a ella

_No, no la he visto naruto-kun - dijo mientras lo miraba y se acercaba a él para darle un beso, el rápidamente la apartó

_No es el momento ni el lugar, seguiré buscando a hina

Un dolor insoportable de cabeza la estaba matando, no quería levantarse, su cuerpo le dolía, restregó sus ojos un par de veces y bostezó un par más, abrió los ojos perezosamente, miró a su alrededor y esa no era su habitación, comenzó a agitarse pero de pronto se tensó al sentirse desnuda, abrió los ojos asustada mientras a su mente llegaban los recuerdos de la conversación con Hanabi, una sonrisa se posó en sus labios al saber lo que había pasado, el rojo cubrió todo su rostro, Volteó lentamente a ver a su amado rubio y grande fue su sorpresa al ver a un joven de cabellos negros completamente desnudo a su lado, se quedó petrificada en el instante, por otro lado aquél joven abrió los ojos, la miró, se levantó se vistió y se fue con una sonrisa casi indescriptible en sus labios, de cierta manera el azabache también estaba sorprendido pues no se había esperado tal escenario, a su edad de 22 años jamás en su sano juicio se había enredado con una mujer, todas precian molestarlo, sentía repulsión por ellas, pero por alguna extraña razón esta chica no le causaba ese sentimiento, vagamente podía recordar el roce de su cuerpo y su olor, realmente era extraña la sensación que le causaba, bajó las escaleras y salió sin despedirse. Por otro lado en el comedor estaba un hombre muy alterado

Una nueva razón para vivirWhere stories live. Discover now