| Capítulo 6 |

36.1K 3.2K 1.2K
                                    

Roma.

Corrí por su lado mientras me dirigía a su laboratorio.

—  Roma —  Habló a mi espalda —  Corazón, no dolerá —  Dijo tranquilo.

—  ¡No me inyectarás esa mierda, Giovanni! —  Aterrada y con el corazón a mil, corría lo más rápido que podía alejándome de él.

—  Dolerá en cinco meses —  Susurró siguiéndome.

—  ¡¿Se supone que eso me debe tranquilizar, cabrón?! —  Grité enfadada. Mi pie se enredó con una máquina de laboratorio mandándome al suelo. Giovanni no perdió tiempo y en segundos estaba a horcadas sobre mí.

—  ¡Por favor! —  Lloriqueé mientras me removía bruscamente tratando de escapar —  No lo hagas, te lo suplico —  Lo miré con los ojos cristalizados.

—  No duele —  Me acercó la inyección y yo inmediatamente grité y me comencé a revolcar.

Mi bebé. Eso le hará daño a mi bebé.

—  Estás muy alterada —  Susurró llevando su mano vacía al bolsillo del pantalón.

Mi bebé.

—  ¡Por favor! ¡Te lo suplico! ¡Te lo ruego! —  Su mano sacó el Spray de sueño mientras lágrimas caían de mis ojos —  Estoy emb... —  No termine de hablar cuando caí profundamente dormida.

***

Abrí lentamente mis ojos y me asusté al no ver nada, solo oscuridad. Respiré profundo al darme cuenta de que estaba en la habitación oscura de Giovanni.

Me senté con cuidado y cuando un leve dolor en el cuello me hizo recordar todo lo que había sucedido.

Me inyectó el G - 20.

Inmediatamente, mis ojos se llenaron de lágrimas las cuales no intente retener. Recosté mi espalda en la pared mientras enrollaba mis brazos alrededor de mi cuerpo.

Es mi culpa. Si algo le pasa es mi culpa por no defenderse, por no defenderlo.

Lloré hasta desahogarme, estaba tan cansada de todo, de toda mi vida y lo que sucede en ella, solo he tenido desgracias, decepciones, muertes y corazones rotos.

¿Cuándo podré ser feliz? ¿Cuándo tendré la familia que tanto deseo? ¿Cuándo tendré un despertar al lado de alguien que me ame?

Al parecer todo eso sigue estando muy lejos.

Respiré profundamente y limpié mis lágrimas. Aunque quisiera seguir llorando no podía, ya que tengo que seguir mi actuación.

No lo arruines ahora, pronto el FMI vendrá al no recibir mensajes ni llamadas, solo aguanta Roma, por tu bebé. Ya luego llorarás.

La puerta se abrió de golpe, cegándome por algunos segundos ante la intensa luz.

—  Has tardado en despertar ¿Cómo estás, corazón? —  Giovanni entró por la puerta.

¡Te odio! ¡Te odio!.

—  Mal —  Bufé —  Siento mi cara hinchada y me arden los ojos —  En lo último no mentí, ya que siempre el cambio de luz era tan brusco que mis ojos ardían y quedaban cegados por segundos.

—  Mierda, corazón —  Casi vómito por su apodo —  ¿Eres alérgica a algo? —  Dijo acercándose.

Y esta era la pregunta que necesitaba.

—  Si, al estrógeno —  Era uno de los medicamentos que contenía el G - 20. Giovanni no sabría que estuve llorando, se pensará que mi cara hinchada y mis ojos rojos son por algún tipo de reacción alérgica del G - 20.

SOMBRAS  (+18)Where stories live. Discover now