Capítulo 48

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"Ven y dale un abrazo a tu madre".

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Los ojos, la sonrisa, la calidez, era demasiado realista...

Esa sonrisa estuvo ahí para mí en mis momentos más débiles y en mis momentos más tontos.

Las largas noches, las mañanas frías, las tardes hambrientas, las noches silenciosas, a través de todo eso, esta mujer fue capaz de darme la más brillante de las sonrisas y aun así abrazarme en su calidez.

Incluso después de su muerte, ella me protegió, mis poderes que me permitieron sobrevivir, el vínculo con la naturaleza, los árboles, las voces en los años solitarios, todo.

Y ahora ella está frente a mí con esa misma mirada.

El abrazo perdido que deseé en los días de lluvia a través de mi interminable entrenamiento.

¡El calor de una madre que me fue arrebatada en la vida de ambos!

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"Ven. Llevas tanto peso, mi pequeño Damián. Suéltate y ven con tu madre". Ella susurró mientras me tambaleaba.

*Paso*

*Paso*

*Paso*

Lentamente di unos pasos hacia adelante, sentí un enorme peso sobre mi cuerpo, era como un agujero negro, tirando de mi ilusión para soltarme y devorarme entera.

*Paso*

*Paso*

*Paso*

Me paro justo frente a ella, a unos metros de su abrazo.

Sabía que era mentira pero no pude evitar seguir mirando su rostro, aunque fuera un truco de mi enemigo, seguía siendo una luz en la oscuridad.

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"Ven ahora, regresa con tu madre y deja de lado tus preocupaciones". Dijo la ilusión de mi madre.

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"Madre..."

"¿Sí?"

"Hace 8 años me dijiste que hiciera lo que hiciera, siempre me apoyarías..."

"Por supuesto, cariño. No importa si todo el mundo está en tu contra, solo recuerda que mamá siempre te amará".

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'Eso es exactamente lo que dijo en ese entonces...' pensé mientras la miraba por última vez.

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Por mucho que lo quisiera.

Por mucho que ansiaba su aceptación.

Sabía que era demasiado bueno para ser verdad.

Demasiado perfecto, demasiado maravilloso.

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"Entonces, por favor... muere por mí".

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*AGARRE*

Dicho esto, agarro la ilusión por la garganta y la levanto 3 pies del suelo.

La ilusión se agita en el aire, tratando desesperadamente de liberarse de mi agarre.

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"¡D-Damien, d-detente! S-soy tu m-madre..." Murmuró mientras golpeaba mi pecho con dolor.

La voz era un poco demasiado suave... demasiado similar a su voz.

One Piece : Camino al PoderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora