•𝐌𝐲 𝐒𝐭𝐨𝐫𝐲•[Tᴏᴋʏᴏ ʀᴇᴠᴇɴɢᴇʀs x ᴍᴀʟᴇʀᴇᴀᴅᴇʀ]

•Capítulo veintiséis•

- ¿Cuántos hay de ustedes? -

- 100 - señor que estás en los cielos...

- ¿Eh? -

- 5 contra 100, ¿Eh? -

- ¿5? No sé de qué hablas - empecé a retroceder lentamente, yo si aprecio mi integridad física.

Rápidamente sentí la mirada del chico de la cicatriz encima mío, era una mirada curiosa más que nada.

- Oye, ¿Tú eres ______ Satō, no es así? - ¿Cómo sabe mi nombre?

- ¿Por qué te interesa? - me detuve un momento para preguntar.

- ¿Entonces si? Bien... Vayan, chicos -

En ese momento todos empezaron a irse, quedando solo el chico de cicatrices y nosotros.

- 4 contra 100, eso sería un poco injusto, ¿No? Hagamos un 1 contra 4 - el chico sonrió casi burlándose.

Entonces Smiley paso al frente dando la cara por los hijos....que acaba de adoptar.

- Wow, tu si que tienes bolas, ¿Huh? Cabrón -

- Capitán del 4to escuadrón, Nahoya Kawata, pero si vas a pelear entonces yo haré lo mismo - dijo con su sonrisa de siempre.

- ¡Nahoya! -

- ¡Espera, eso es injusto! -

- ¡Buena suerte, Smiley! -

- Uh... - solo mire la situación con los brazos cruzados.

- Rey celestial de Tenjiku, Kakucho - lindo nombre.

- Lindo nombre - volví a repetir para mí mismo, está vez, en un susurro.

- ¡Adelante! - y la pelea se desató.

Ví como esos dos peleaban sin cansarse, aunque algo a destacar...no es sobre la pelea.

Pero de repente sentí algo raro en el pecho, no lo sé....como un mal presentimiento.

Se pateaban, se golpeaban, Dios...

- Hombres tenían que ser - murmuré para mí mismo aún así siendo escuchado por los chicos.

- ¿Y acaso tú no eres hombre? - ese fue Chifuyu.

- No, yo soy un unicornio, ¿Cómo la vez? - sonreí burlonamente mientras me encogia de hombros.

Chifuyu me ignoro y siguió haciéndole barra a Smiley.

Y finalmente Smiley en un salto logro derribar a Kakucho usando sus pies.

- ¡Si! -

- Es cierto que eres fuerte, Kakucho, Rey celestial, ¿Eh? - Smiley suspiro y entonces regreso a nuestro lado - ¡Muy bien!¡Regresemos a Tokyo! -

Los tres se dieron la vuelta para irse, yo no tuve tiempo pues mi teléfono empezó a sonar.

Lo saqué y era mamá quien llamaba, suspire y me dirigí a Takemichi - Takemichi, ¿Quieres que te espere, o....? - pero el parecía sumergido en sus pensamientos - ...Oh bueno, te veré luego - suspire nuevamente y salí del lugar para contestar - ¿Si? -

- ¿Dónde estás? Estoy preocupada desde que no sabíamos dónde estabas la otra noche - me habló preocupada.

- Mamá, ese día solo me perdí, si? No te preocupes, de todas formas...estoy algo lejos de casa en este momento, pero... - me negaba a volver estar incómodo en esa moto - Tardaré un poco en llegar a casa - aunque también podría ir en tren...

De todas formas caminar me hará bien...me gusta hacerlo.

- ...Entiendo, pero por favor ten cuidado, ¿Si? A pesar de todo, no dejas de ser mi hijo... -