𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓽𝓻𝓮𝓼

697 68 0
                                    

Los de la aerolínea nos encerraron a todos en una habitación para esperar a unos agentes del FBI para entrevistarnos.
La mayoría miraba a Alex como si él fuera el culpable del accidente, Tod y yo éramos los únicos que no lo mirábamos de esa forma, no lo culpaba de algo que era imposible que él cometiera, solo me lamentaba por la muerte de George.

La imagen de la joven pareja que había visto antes, me transmitía un amargo sabor de boca, tan solo pensar en ellos...

Tod se limitaba a quedarse neutro mirando el piso con una mirada fría, por mí parte, me sente en una esquina mirando un reloj que había en una de las paredes.

—Me miran como si yo fuera el que causó todo eso..no lo hice...

—¿Hay algún sobreviviente? —preguntó Lewton cruzada de brazos.

Tod miró a su mejor amigo esperando una respuesta..

—Eso no lo sé ¿Que creen? ¿Que soy una especie de-lo interrumpí.

—No es un brujo o algo parecido..—todos nos quedamos callados para segundos después, escuchar a alguien abrir la puerta.

—Soy de la asamblea de transporte, ya contactamos a todas sus familias y vienen en camino..¿Hay alguien aquí que necesite tratamiento médico? O ¿Consuelo espiritual en este momento?

—¿De que está hablando? ¿Hay algún sobreviviente? —interrumpió Lewton histérica volviendo a preguntar lo mismo.

—La causa de la explosión aún no es definida, las autoridades todavía están en la escena..el rescate naval viene en camino ahora...

—Perdonen, soy el agente Weine y mí compañero, el agente Schrerk, somos del FBI..comprendo como deben estar sintiendose pero necesitamos hacerles unas preguntas del suceso mientras los recuerdos esten frescos..—todos vieron a Alex.

Entrevistaron a cada uno, me sentía muy cansada y tenía un sueño increíble así que solo me dormí en una silla.

Los padres de mis compañeros no tardaron en llegar, aunque solo abrí los ojos a Tod con los ojos lagrimosos abrazó a sus padres.

Nadie vendría por mí, de echo vivía con Tod pero sentí que no debía arruinar su momento por lo que solo me quedé quieta.

—¿Dónde esta Abigail? —preguntó su madre buscándome con la mirada.

—Ahi está. —el papá de Tod me señalo y vinieron ambos para envolverme en un abrazo reconfortante.

—No, tranquilos vallan con Tod. —comencé a llorar apenas sentí ese afecto tan cálido de su parte.

—Tranquila, también eres como nuestra hija. —me dijo el padre de Tod y ví a mi novio..solo.

Volví a la casa de los Waggner pero solo para recoger todas mis pertenencias del cuarto de Tod, necesitaba alejarme de todos, la muerte de mis padres había sido tan solo unas semanas atrás, una nueva muerte importante para mí me golpeó y eso ameritaba una gran reflexión y tiempo a solas.

Tod ni siquiera me miraba a los ojos, yo tampoco lo hacía, pero no porque estábamos peleados por la estupidez de sus bromas sin sentido sino porque, supongo que entendía mi posición y que no lo estaba abandonando.

Había una cabaña, fue lo único que me dejaron mis padres y no había lugar más perfecto que ese para perderme un par de semanas y tomarme un tiempo.

Apenas comía..extrañaba tanto a George, siempre fue tan responsable, empatizaba mucho con nosotros, soportaba nuestras pequeñas peleas de pareja con Tod y nos daba consejos bastantes útiles..haría falta.

—Han pasado 39 días dónde perdimos a nuestros 31 seres amados, alumnos y maestros..queremos recordarlos con este monumento...

Los verdes arbustos en nuestro alrededor, el viento otoñal daba suaves y refrescantes oleadas, los reporteros se encontraban registrando y fotografiando todo..

Mi pelo castaño obscuro volaba sutilmente para atrás mientras mí cabeza se negaba agacharse pero mi miraba se mantenía baja, no había mucho que remarcar de un ánimo tan esperado de mí parte ante una pérdida así.
 
El funeral de las víctimas del accidente parecía más un show que un recordatorio de lo que perdimos y nosotros como sobrevivientes fuimos a dejarles unas rosas blancas y rojas, como también los familiares de los fallecidos.

En medio de ese proceso Carter y Alex por poco se volvían a pelear pero para la fortuna de la mayoría, se detuvieron antes de que se agrave.

—Voy a dejar esto. —Tod les mostró las rosas a sus padres para que ambos le dieran el permiso para que su hijo se aleje.

Con mi flor en la mano, permanecia quieta viendo la estatua con la gente pasando enfrente mío con una tristeza notoria y amarga, Alex se colocó muy cerca mío para ver con más detenimiento la estatua.

—Hola. —saludó Alex apenas se acercó Tod.

—Hola..-Tod le contesto haciéndome sentir que sobraba en ese sitio.

—Oye, no lo malinterpretes pero..te extraño, enserio. —me sorprendí ante dicha declaración por parte de Alex.

—Si, yo también..pero no creo que mí padre pueda entender eso...

—Si..

—Cuando superé esto..iremos un día a la cuidad ¿No?  -ambos esbozaron una sonrisa.

—Claro, claro que sí Tod..

Era hora de irme pero no podría hacerlo sino le agradecía a Alex antes de que me marchase.

—Gracias a ti aún estoy con vida.. muchas gracias. —le ofrecí mí flor y la aceptó, Tod no me miró, se reconocía con facilidad su dolor.

—¿No me culpas por lo que pasó? —frunciendo el seño.

—Claro que no, de cierta forma, confío en ti, es imposible que hayas tenido algo que ver con lo ocurrió..—conteste con simpleza.

Un fotógrafo nos saco una foto con flash, Alex y Tod voltearon, aproveche esa oportunidad para irme. 

Destino Final {fanfic +18}Where stories live. Discover now