No significa nada- 1 (Draco Malfoy)

25

Leash cerró la puerta de su cuarto molesta, Draco era un tonto. Por supuesto que ella quería ir con él, pero no era adivina, si en verdad hubiera querido ir pudo haberle dicho y ella no hubiera aceptado ir con Harry. Pero no iba a dejar que eso arruinará la ocasión, iba a ir al baile e iba a ir con Harry, su amigo, tenía planeado disfrutarlo aunque no fuera con Draco.

Había olvidado por completo a lo que había venido y cuando recordó ya se le estaba haciendo muy tarde, abrió rápidamente la puerta de su cuarto y salió corriendo hacía la torre de lechuzas, cuando salió, Draco ya no se encontraba ahí y ella agradeció eso.

El camino hasta donde reposaban las lechuzas era largo, pero si su hermana Lidia había mandado el vestido allá es donde estaría y en efecto, cuando Leash llegó encontró a la lechuza de su familia posando arriba de una caja cerrada, Leash recogió la caja y alimentó a su lechuza antes de regresar a su sala común, pero mientras salía de la torre, se topó con un pelirrojo alto que se detuvo al mirarla.

-Hola- dijo en un susurro

-Hola- contestó rápidamente intentando ser cortés pero no se detuvo ni un segundo

Fred se volteó intentando decir algo pero ella se había ido, así que se rindió y siguió su camino.

Leash estaba en la soledad de su cuarto, observando la caja que reposaba en su cama, reconocía perfectamente la caja, cuando le pidió a Lidia que mandará un vestido, jamás pensó que le mandaría ese vestido.

Con las manos temblorosas quitó el nudo de la caja y quitó la tapa dejando ver el contenido de esta y sintió todos los recuerdos regresar.

El vestido era largo, con la parte de adelante siendo un poco más corta para darle una ilusión de una cola, era de un encaje detallado, muy delicado y tenía mangas largas para ocultar sus brazos. Aquel vestido le había pertenecido a su madre y se lo había dejado a ella hace muchos años pero jamás se había atrevido a usarlo, de todos los vestidos que tenía, Lidia había mandado ese por una razón.

Para Leash era extraño pensar en su vida, podía recordar todo perfectamente, hasta podía recordar los sentimientos que tuvo en aquellos momentos, pero al mismo tiempo, pensaba y sentía como una chica, su cuerpo, pensamiento y sentimientos no correspondían con lo que había vivido y a veces aquello la hacía sentir increíblemente melancólica y confundida.

Acarició el vestido con cariño, preguntándose sí sí quería era digna de portarlo, sabía que su madre lo había dejado específicamente para ella, pero aún se preguntaba si en verdad lo merecía.

Al día siguiente la escuela había cancelado todas las actividades, dejando a los estudiantes correr de lado a lado con esperanzas de arreglarse lo mejor posible. Chicas y chicos de la misma casa se reunían en sus dormitorios, pero en el caso de Leash, Hermione y Luna estaban en casas diferentes, por lo cual habían coordinado ir a arreglarse a un baño en el piso superior.

-¡Leash!- dijo Hermione en cuanto la vio entrar- Ella es Ginny, la hermana menor de Ron- dijo presentándole a la pelirroja

Ginny sonrió con ternura, saliendo por detrás de Hermione

-Hola, tú hermano es un tonto- dijo en burla Leash y Ginny rio

-¿Cuál de todos?- siguió ella y las cuatro rieron.

Leah bajo su bolsa y caja que traía en el lavabo y se sentó en el lavabo de al lado.

-¿Cuál es el plan?- preguntó Leash

-Creo que es mejor si primero nos peinamos y maquillamos y hasta el final los vestidos, así podemos estar más cómodas- recomendó Hermione

-Perfecto- se volteó a ver a Luna- ¿De casualidad sabes hacer una trenza, Luna?- preguntó Leash

-Seguro- dijo Luna con una sonrisa

-¿Alguien sabe cómo maquillar?- preguntó Ginny juntando el maquillaje de todas- ¿Leash?- preguntó extendiendo una brocha

-No soy la mejor pero puedo intentar- sugirió sentando en frente de Luna, dándole la espalda para que la pudiera peinar

El resto de la tarde se la pasaron arreglándose y ayudándose entre ellas, hablaban y reían con una fluidez natural, se llevaban muy bien entre ellas, al fin y al cabo tenían muchas cosas en común, todas eran increíblemente inteligentes, tenaces y valientes, por lo cual tenía sentido que encontraran familiaridad entre ellas.

-¿Estás lista Hermione?- preguntó Leash tocando la puerta del cubículo en el que Hermione estaba

-Aún no- contestó ella aún poniéndose su vestido

-Déjala, está nerviosa por su cita con Krum- se burló Ginny arreglándose en el espejo

-¡Ginny!- se quejó Hermione

-No sabía que irías con Viktor- dijo Luna sorprendida

-Sí, pues...- suspiró Hermione- Me invitó hace unas semanas y creí que sería una buena idea- comentó tras la puerta

-¡Por supuesto que es una buena idea!- dijo Ginny inmediatamente- Es Viktor Krum-

-Pero no es Ron- dijo Leash en un susurro como sólo Hermione escuchó

-Seamos sinceras, la única que va a ir con quien quiere es Luna- dijo Hermione y Luna sonrió con alegría

-¿Leash, no vas a ir con Draco?- preguntó Ginny peinando el cabello de Luna

-No, iré con Harry ¿Con quien querías ir tú?- preguntó sin darse cuenta

Ginny no pudo contestar porque Hermione y Luna lo hicieron

-Con Harry- dijeron al mismo tiempo

-Oh- dijo Leash sorprendida- Sólo vamos como amigos- dijo rápidamente

-Yo igual, sólo amigos- suspiró, pero puso una sonrisa en su rostro- Aún así, iré con Justin Finch entonces, todo bien- aseguró

La puerta del cubículo fue abierta y las tres chicas soltaron un suspiro de asombro al ver a Hermione, traía puesto un vestido azul hermoso que caía como cascada, Luna la había peinado con unos rizos arreglados y unos cayendo por su rostro, Leash la había maquillado un poco porque Hermione ya se veía preciosa desde antes.

-Hermione, te ve preciosa- aseguró Luna y Hermione se sonrojo

Mientras la noche llegaba, cada uno terminó de ponerse sus atuendos y luego cada una regresó a su sala común a terminar los últimos detalles.

Leash estaba terminando su maquillaje en frente de su espejo, asegurándose que todo estuviera listo, observó los rizos que dejó fuera de su trenza para cubrir la cicatriz de su rostro, pero después de observarse unos segundos, tomó un pasador y apartó los rizos de su rostro, mostrando su cara por completo, sonrió al espejo y salió de su dormitorio.