ɪɴᴇᴠɪᴛᴀʙʟᴇ ʟᴇɢᴀᴄʏ [ᴊɪᴍ ʟᴀᴋᴇ ᴊʀ]

Capítulo 3

╭══════•>✾<•══════╮

Estrella.

╰══════•>✾<•══════╯

Las semanas pasaron. Entre entrenamientos, la escuela y el sobrevivir a la vida adolescente. James se sentía cansado y un poco estresado, ya que de nuevo no podía conciliar el sueño. Cosa que su mentor noto.

—Maese Jim— Blinky toma la llave para ajustar parte del motor—He notado cierto cambio en usted.

—Oh por dios—responde asustado—Por favor, dime que no es una de esas platicas de cambio de...

—¡No, en absoluto!—interrumpió alarmante— No se como se trate ese tema, pero me refiero a otro tipo de cambio.

—Te escucho— Jim retiraba las tuercas viejas.

—Para empezar— se detuvo y lo observo— ¿Como has dormido?.

Jim dejo de hacer las cosas , acción que preocupo más al troll.

—¿Lo has hablado con Tobías o Clara?.

—Toby me escucha, pero sólo se queda callado—movía las herramientas sin sentido— Y a Clara, no lo sé. Aún no somos tan amigos como para hablar de ello.

—Creí que le tendrías más confianza, porque ya sabe...tu gustas de ella.

Soltó la llave y tomó las cajas con las refracciones —Han cambiado un poca las cosas y se que nunca iba a funcionar, es decir, apenas notó que existo.

—Pero es un avance, las cosas deben fluir por si solas.—aconseja su mentor.

—Lo sé y es precisamente lo que sucede con...

Sus palabras quedaron al aire sin terminar la oración.

—¿Sucede con quien?—pregunto un tanto curioso por el cambio de actitud repentina.

—Nada, nada— contestó rápido. Jim se paró de su asiento y camino hacia el mesón donde estaban algunos planos.

—Maese Jim— detuvo lo que hacía y camino hacia el, Jim ni si quiera despegaba sus ojos de ahí—Sabe que se puede desahogar cuando lo necesite.

El pelinegro divagó un poco, pero tenía razón. Blinky ha sido un gran mentor y amigo.

Inhaló y exhaló antes de contestar —Hace unas semanas conocí a una chica.

Una sonrisa apareció en la cara de Blinkous.

—Ella es inteligente, graciosa y — sin notarlo, sus ojos brillaban de sólo hablar de ella— Muy bonita, tiene unos ojos tan...y su sonrisa.

Sus ojos se perdieron un momento hacia el techo junto una sonrisa boba, olvidando lo que decía.

—Vaya, suena muy bien para usted.

—¡Ese es el problema!— exclamó con sus manos hacia el aire. —Es demasiado bueno para ser verdad. Si la hubiera conocido antes cuando todo era "normal", no me hubiera preocupado. Pero ahora, no puedo hablar completamente con la verdad sin mencionar— miro a todos lados y señaló con sus manos el lugar.