Capítulo 18

183 6 1
                                    

Alya Bletchley

La silueta recostada en mi cama se incorporó, y quedó inmóvil.

Yo, paralizada por la desconocida presencia saque me varita lentamente apuntando hacia ella. Si era Matheo, esta acción podría tratarse de otra imprudencia, o de algo que podría salvarme la vida.

Con mi pulso acelerado, alcance a escuchar una suave risa y un susurro en el silencio.

-¿Piensas matarme Alya?

-¡¿Piensas matarme tu a mi de un infarto!? -grite entre susurros- Eres imbécil Tom.

El volvió a reírse y yo avance hacia la cama, dejando la varita sobre la mesilla de noche. Ahora que estaba cerca podía ver mejor el rostro de Tom.

Estaba un poco despeinado, y en su cansado rostro eran visibles las ojeras a causa del sueño acumulado. Su mirada se posó en la mía. Y automáticamente se levantó. Y tomándome de la muñeca me acercó a él.

-Eres hermosa Alya -susurró mientras una de sus manos se posaba en mi mejilla.

Ahora que estábamos más cerca podía apreciar el olor a alcohol que desprendía. Al parecer no había sido la única que había bebido esta noche.

-Estas borracho Tom -lo aleje posando una mano en su pecho y empujándolo con delicadeza.

-¿Y? Borracho o no sigues siendo hermosa.

-Me gustaba más el Tom serio y desagradable.

-Yo no soy desagradable. -Solté una risa burlona ante esto.

-Claro que si.

-Contigo no lo soy.

-Bueno... Depende del momento.

El soltó una pequeña risa, sentándose de nuevo en mi cama, esta vez en el borde.

-¿Que haces aqui Tom? -Prengunte acercándome a él, quedando enfrente suya.

-Solo -lo penso unos segundos- caminaba por el pasillo y decidí venir aquí. Pero vi que no estabas, a si que decidí esperarte.

-Pues ya estoy aquí. Ahora vete.

-Vaya, ¿Quién es la desagradable ahora?

No le contesté, solo le miré por unos segundos.

-¿Donde estabas? -pregunto con seriedad.

-¿Que te importa?

-Solo me preocupo por ti.

-Suenas al típico novio tóxico, ¿Sabes?

-Alya, es peligroso andar de noche por los pasillos de Hogwarts, y no por que haya fantasmas precisamente.

-Tu vas solo se noche por los pasillos.

-Es distinto. -afirmo cortante.

-No le veo la diferencia.

-Matheo es la diferencia.

Si está conversación la hubiéramos tenido unos días antes, Tom no hubiera llevado razón, pero ahora si la lleva, aunque no por los mismo motivos.

-El te busca a ti, no a mí. - Aunque probablemente ahora también este yo en su punto de mira.

-Alya, solo quiero que tengas cuidado.

Lost control  Where stories live. Discover now