Capítulo 16

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Steve:

—¡Doscientos cincuenta dólares de fianza!

—Ya te dijimos que lo sentimos.

—¡No es por el dinero, Steve! —Nancy giró completamente molesta para vernos a Robin y a mí—. ¡¿Qué no te das cuenta que pudieron meterse en un grave problema?! ¡Tú sobre todo con tu panzota!

—Oye, todavía no se nota demasiado, no me trates así —dije agarrando mi vientre, que apenas se veía por el disfraz ancho que usaba.

—¡Es que yo no sé en qué idioma decirte que no puedes arriesgar así a tu hijo por Eddie!

—Pensé que lo conseguiríamos —musité agachando la mirada.

—¡¿Solo los dos?! —exclamó incrédula—. ¡¿En una prisión?! Sí claro.

—Dustin también ayudó —dijo Robin sin mirarla por el miedo.

—Robin, mejor no digas nada. No sé por qué apoyaste esta idea tan tonta —dicho esto, caminó más rápido para dejarnos solos a mi amiga y a mí, mientras tanto, Dustin ya la esperaba en el auto.

—Qué genio —le susurré—. ¿Por qué no vas y la besas o algo para que se tranquilice?

—Estás loco.

—¿Por qué? Te gusta, le gustas, es mutuo.

—No le gusto, Steve, menos ahora que quiere matarme. Además tiene novio.

—Esa relación terminó hace mucho, a mi parecer. Ni siquiera se llaman o se visitan. Mike fue a visitar a Jane hace una semana, ¿y Nancy? Ni pensó en ir con su hermano para ver a Jonnathan.

Mi amiga no dijo nada, solo guardó silencio.

—Piénsalo —le guiñé un ojo y subí al auto, donde Nancy nos esperaba muy enojada.

***

—No entiendo por qué Nancy se enojó tanto —el susurro de Dustin se escuchó en toda la habitación.

Max, Lucas, Nancy, Robin, Dustin y yo habíamos decidido reunirnos en mi casa para discutir lo que había pasado. Nancy no dejaba de regañarnos y decirnos que si queríamos sacar a Eddie de la cárcel, debíamos tener un plan más elaborado.

En cuanto escuchó a Dustin, giró enojada y lo miró.

—Pregúntale a Steve por qué —todos me miraron a excepción de Robin, quien entró en pánico como yo.

—¿De qué hablas? —me hice el desentendido.

—Tú sabes perfectamente, creo que ya no debes ocultarlo más, si se te nota claramente desde aquí.

—¡Nancy! —Robin se levantó para calmarla—. Basta por favor, ¿de qué hablamos?

—¿Qué hablaron de qué? No estoy entendiendo nada —habló Lucas.

—Sí, ¿por qué cuidan a Steve como si fuera un bebé? —esta vez fue Max—. Si quiere meterse en pleitos por sacar a Eddie de la cárcel allá él, ¿no? Es su asunto.

—Es un muchacho grande. ¿O estás enfermo, amigo? —ahora Dustin.

Harto de la situación, exploté:

—¡Porque estoy esperando un bebé de Eddie! —me levanté de la cama y bajé la cremallera de mi disfraz para dejar de ocultar mi vientre—. ¡Ya! ¡¿Contentos?!

Todos guardaron silencio mientras yo cubría mi rostro para liberar estrés. Suspiré cansado y decidí salir de mi habitación sin decir nada, necesitaba respirar un momento.

I can't feel you | Steddie M-PREGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora