Tal vez solo haya sido un sueño, o tal vez me haya vuelto loco. ¿Alguna vez habéis sentido que todo el mundo en el que habíais vivido cobraba verdadero sentido después de vivir algo que cambia tu vida? ¿No? ¿Solo me pasa a mí? Tal vez sea algo que l...
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— ¿Tú sabes que horas son estas? Te dije que tenías que volver a las diez en punto —. La cara de mi padre era de muy pocos amigos, suponía que le había molestado que llegara tarde, comprensible.
Lo que me molestaba es que mis hermanos pudieran llegar al día siguiente con el desayuno mientras yo no podía ni volver al final del horario infantil un sábado. Quizás él tenía un problema con que yo no trajera comida de fuera para apaciguar a los dioses.
— Me he encontrado con una amiga y nos hemos puesto a hablar, se me ha ido el tiempo. Lo siento mucho —Me disculpé porque no soy una descarada, era un vago intento para calmar a la bestia aunque no parecía tener resultados.
—Podría haberte pasado cualquier cosa, iba a llamar a la policía— mi padre sonaba totales fuera de sí e incluso Nate parecía compadecerme esa vez, a diferencia de todas las otras veces en las que parecía divertirse cuando se armaba una de esas.
—Solo se ha retrasado media hora, papá, por ser su primera cagada podrías descontarle un poco de bronca —Blair intentó interceder por mí aunque mi padre por desgracia no parecía muy dispuesto a hacerla caso. William Lockwood era un hombre que no se cortaba un pelo a la hora de agasajar a sus hijos, pero tampoco de educarlos, y esa parecía ser un caso de los segundos, la primera vez que yo presenciaba uno dirigido hacia mi persona, cabía añadir. Debería haberme quedado callada, pero mi orgullo me impedía permitir que mis hermanos volvieran cuando les diera la gana y yo no, así que hice lo que mejor se me daba, rechistar ante algo que no me parecía justo.
—Ellos se retrasan mucho más otras veces y nunca les dices nada, no es nada justo que por solo media hora quieras reñirme tanto, se que he estado mal pero la próxima vez te avisaré si no me da tiempo —alcé los brazos, ojo, furiosamente, y luego agité las manos hacia arriba hasta conseguir una escena similar a la del hámster del meme que reclama dramáticamente. Si no lo habéis visto… deberíais.
—No habrá próxima vez, Tysha, has burlado mi confianza— mi padre sonaba tajante, tal vez hasta demasiado. Mis hermanos se miraban entre sí como diciendo "ya tenía que venir a cagarla" y ahí fue cuando supe que no lo estaba haciendo nada bien, pero ya era demasiado tarde para echarme atrás. ¿Realmente iba a permitir eso? No era justo que mis hermanos hicieran lo que les daba la gana mientras que yo tuviera que comerme los mocos como si tuviera ocho años.
