CAPÍTULO DIEZ

138 15 7
                                    


🐺💙🐺



El sol daba sobre Siwon, quien envolvía a DongHae en una suave cama cubierta por un dosel y un cálido mobiliario de madera. Parpadeó hacia la luz del sol, su perezosa satisfacción se convirtió en confusión y luego en consternación ya que de alguna manera había pasado la noche en la casa de DongHae, perdido en el placer y la carne, alimentándose de los pequeños ruidos y lágrimas saladas de DongHae. El persistente olor del placer de ambos, lo asfixiaba, por lo que apartó las sábanas, agudizando la vista y sintiendo la garganta seca, mientras buscaba el baño.

DongHae gimió y continuó durmiendo, sus pestañas oscuras reposaban contra sus pálidas mejillas, y su boca roja abierta, estaba humedecida con saliva. Las contusiones anteriormente amoratadas en su cara, espalda y costillas, estaban ahora tornándose verdes y amarillas. Siwon recordó cuán descuidado había sido con ellas la noche anterior, y la forma en que DongHae no se había quejado en lo más mínimo. O bien el chico disfrutaba del dolor o estaba dispuesto a soportarlo a cambio de placer. Se aclaró la garganta, pero DongHae sólo se quejó en su sueño y siguió durmiendo.

Después de orinar en el baño adjunto, Siwon se puso su ropa del día anterior, abotonándose la camisa lentamente mientras miraba al joven en la cama, tratando de hacer que su vida volviera a encajar en la que él conocía. Incapaz de hacer que eso sucediera, finalmente se acercó a la cama, retirando el cabello de DongHae de su frente y le dio un beso allí.

Un calor que casi había olvidado, una especie de alegría y de paz combinada, se propagó a través de él. Puede que no conociera el futuro, pero en este momento al ver que este hermoso hombre era suyo para siempre, no sentía arrepentimientos.

Salió de la habitación y cerró la puerta con cuidado detrás de él, se dirigió hacia la parte delantera de la casa, no sabiendo si iba a la salida o simplemente en busca de algún tipo de desayuno. Sólo sabía que se sentía demasiado inquieto, acelerado con anticipación y dosificado con una cantidad generosa de sorpresa, como para permanecer sentado.

Las escaleras lo llevaron a la sala frontal y dos sirvientes beta estaban susurrando cerca de la puerta. Cuando lo vieron, sus caras se pusieron serias y el llamado Ren, dio un paso adelante preguntando cortésmente:

—Señor, ¿quiere su abrigo y sombrero? ¿O se unirá al señor Kim para el desayuno?

Siwon abrió la boca para pedir sus cosas, pero entonces su estómago rugió. La última comida que había tenido había sido la sopa que Hyukjae le obligó a comer, y había estado físicamente muy activo desde ese entonces. Además, supuso que enfrentar a Heechul con Yesungntía y a solas, en lugar de salir corriendo avergonzado, era lo menos que podía hacer después de la generosidad que le había mostrado ayer por la noche al descubrirlo desnudo con DongHae.

Su cuello se sintió arder al decir:

—El desayuno.

—Por aquí, señor. —Ren le hizo un gesto hacia una habitación al lado de la cocina que Siwon recordaba de las fiestas. No era el gran comedor o salón de baile, sino una pequeña sala soleada con una mesa que, durante las fiestas, era llenada con aperitivos y dulces.

Ahora sólo tenía a Heechul, sentado con una bata blanca, el pelo rojizo desordenado y lo que parecía ser glitter plateado en las pestañas. Siwon no lo había notado la noche anterior, pero brillaba con la luz del sol de la mañana, cuando Heechul levantó los ojos y le mostró una agradable, aunque algo reservada sonrisa, haciendo a un lado el periódico que había estado leyendo para indicarle la mesa.

—Me disculpo si...

—Por supuesto que no —interrumpió Heechul, como acostumbraba hacer—. Por favor acompáñame. Toma asiento. Por lo general DongHae duerme hasta tarde, algo que tendrá que cambiar en Mokpo. —Agarró un pan tostado y le untó mermelada, cerrando los ojos mientras daba un bocado y lo saboreaba—. El sabor perfecto. ¿Te gusta la mermelada? — Hizo un gesto hacia el frasco medio vacío en el mantel blanco.

Celo de Amor (Libro II, Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora