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"......."

La tía Chen la miró. Olvídalo, ella no podía entender el mundo de los jóvenes.

Pero antes de salir, la tía Chen aún dijo: "Señorita".

Nuonuo miró hacia atrás.

El tono de la tía Chen no varió: "Esta mañana el señor Qiu estaba muy contento. Nunca había visto al Sr. Qiu tan feliz. Realmente se preocupa por ti".

Los ojos de Nuonuo se abrieron de par en par, "Tía Chen, le tengo miedo. La forma en que le gusta la gente es extrema y da miedo".

La tía Chen no dijo nada, abrió la puerta y se fue.

Nuonuo recibió una llamada inesperada de Song Lian.

Song Lian le preguntó incómodamente sobre la lesión de Nuonuo, y ésta sintió la incomodidad de sus ojos y le dijo suavemente: "Está bien".

La voz de Song Lian se elevó, "Papá me pidió que te agradeciera, las acciones de la familia Song fueron devueltas".

Nuonuo levantó los ojos, y de repente recordó aquel día en que Qiu Li sonrió y dijo: "Las acciones originales en manos de tu padre serán transferidas de nuevo en unos días".

Una vez dijo que todo era para ella.

Después de un largo rato, Song Lian dudó en decir: "Song Nuo, Yao Jiajia te empujó en la cancha de baloncesto ese día".

Nuonuo frunció el ceño, pensó que había sido un accidente. Inesperadamente, alguien la empujó.

"Pero desde ayer, todo el mundo habla de ti y de Hang Rui. Por la tarde, Yao Jiajia no vino a clase".

Hang Rui y su rumor era algo que Nuonuo esperaba, pero ¿por qué Yao Jiajia no fue a clase?

Mientras Nuonuo pensaba, la sirvienta la llamó.

Nuonuo colgó la llamada y bajó las escaleras. El criado le dijo a Nuonuo: "Señorita, tenemos una visita fuera. Dijo que era su compañera de clase, llamada Yao Jiajia".

Nuonuo dijo: "Déjela entrar".

En realidad, no la vio durante dos días, pero cuando Yao Jiajia entró, su cara estaba pálida, sus ojos estaban rojos e hinchados.

Tenía un aspecto aterrador.

Una mujer de mediana edad la siguió y dijo en cuanto llegó: "Lo siento, Song Nuonuo, lo siento, mi Jiajia era ignorante y cometió un error. ¿Puedes perdonarla?" Al pinchar a Yao Jiajia, ésta se estremeció y le dio una disculpa a Nuonuo inclinándose 90 grados, "Lo siento Song Nuonuo, no debí haberte empujado ese día".

Al ver que Nuonuo no respondía, Yao Jiajia gritó: "Perdóname, por favor, perdóname. Nunca me atreveré a hacer eso de nuevo, me arrodillaré".

Cuando estaba a punto de arrodillarse, Nuonuo la agarró rápidamente del brazo.

"No lo hagas".

Nuonuo no podía perdonarla, después de todo, ella no era la Virgen María. Yao Jiajia sólo tenía 17 o 18 años, pero había herido gravemente a su compañera de clase.

Pero una persona tan mala ahora tenía miedo.

Nuonuo le preguntó en voz baja: "¿Alguien te obligó?".

Los ojos de Yao Jiajia se abrieron de par en par y rápidamente negó con la cabeza: "No, no".

Al ver su mirada de pánico, Nuonuo tuvo una idea en su corazón. Susurró: "Yao Jiajia, vuelve. Ya no eres una niña. Dios está observando desde el cielo, no debes hacer daño a los demás".

Esposa fugitiva de un CEO tirano [+15]Where stories live. Discover now