Mundus ha condenado a Vergil a vagar eternamente por el averno infinito a través de dimensiones que ningún hombre o demonio habría imaginado, durante uno de sus viajes, el hijo de Sparda acaba en un mundo donde los humanos nacen con dones capaces de...
Con la velocidad una liebre, Miruko se dio la tarea de hacer a Vergil añicos, haciendo uso de sus gran astucia y velocidad, ella atentaba conectar una patada, más los reflejos de Vergil eran aún más avanzados que los de su don
Miruko: Agh!
Vergil: Demasiado lento
Miruko: Heagh!!
Vergil: No eres digna como mi oponente
Miruko: Menos charla y más acción!
Vergil: No te confi- Mmhp!!
A Vergil se le impidió completar su advertencia puesto que por fin Miruko le asestó una patada directo a las costillas, lo suficientemente fuerte para hacer que se arrodillara unos segundos
Miruko: Eres más predecible de lo que crees, te mueves en patrones diagonales cada vez que me esquivas, solo tuve que anticiparme para por fin cerrarte el hocico
Vergil: A la ofensiva entonces....
Un aura azul empezó a emanar de Vergil, cada vez emitiendo un brillo más fuerte tomando la apariencia de espadas, que rodeaban cada flanco
Vergil: Intenta adaptarte a esto
Miruko: Fácil!
Esa sonrisa pronto se tornaría en desdén al ver que las espadas habían desaparecido de su vista, ¿Donde habrían ido? Se preguntó
Crust: Miruko! Detrás de ti!
Al precipitar su ventaja, Miruko sintió como las hojas pasaban sobre su espalda, cayendo del dolor al suelo
Crust: Miruko!
Vergil: Demasiado débil
-......Aun no me rindo!!!....
Vergil: Mmph?......
Miruko: Crees que esta es la primera vez que me han empalado algo? Ni en sueños he pasado por más palizas de las que puedes imaginar, esto es simplemente un rasguño para mi
La adrenalina hacia su trabajo, el dolor motivó lo suficiente a Miruko para poder ser más rápida y fuerte para poder ser rival de las capacidades de Vergil
Con cada puño y golpe asestado, más se empeñaba Miruko en acabar esto, cada vez que se acercaba, más colérico era su esfuerzo
En la fracción de un segundo, Miruko alcanzó el abdomen de Vergil, haciendo que este se inmutase unos metros, trayendo sorpresa y asombro a los rostros de Dabi y Twice, el asesino oscuro crecía considerablemente desgastado
Dabi: Parece que este diablo no era lo prometido
Twice: Ya pensaste en como huir de aquí?
Miruko: Asustado Vergil!?
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