Romeo y Julieta: A una pantalla de distancia

Capítulo 15

Dedicado a VictoriaSofiaValero
Lesliearianav

y a Drachbooks por las hermosas publicidades que le ha hecho a la historia esta semana. GRACIAS RACH HERMOSA POR TU APOYO!!!

ESTE CAPITULO SE NARRA EN TERCERA PERSONA. Espero que les guste.
Hay gente nueva leyendo asi que BIENVENIDOS!!! y solo paso a recordarles que TENEMOS GRUPO DE WHATSAPP CON LOS LECTORES: UNANSE AL GRUPO.

Y ya... ahora si los dejo disfrutar

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Narrador Omnisciente

Ethan estaba tan emocionado por presentarle su lugar de trabajo a su novia que no se percató de las señales que ella manifestaba en ese momento. Percibió que su mano derecha se encontraba algo sudorosa, pero le resto cierta importancia. También ignoró el hecho de que al hablarle de aquella persona que se encontraba apoyado sobre el vestíbulo de la estación de enfermerías y que era nada más y nada menos que su jefe, ella no se inmuto ni le respondió.

Jane se quedó inmovilizada, presa de un pánico que ni ella entendía. Vio cómo su novio se alejaba hacia aquel hombre por el que había sentido una pizca de atracción en un pasado no tan lejano.

—¿Y esa quién es? — fueron las palabras que Aarón escupió con un desdén de aburrimiento como si de verdad no entendiera porque su interno más respetado en el hospital se osaba a traer a una estudiante cualquiera.

—Mi novia. Su nombre en Jane.

El primer pensamiento que paso por la mente de aquel hombre fue "¿en serio? No me había dado cuenta. Si no me lo decías pensaría que son amigos a pesar que literal estaban tomados de la mano hace cinco segundos"

Aarón se limitó a poner sus ojos en blanco lo que le dio el pie a Ethan a proseguir con su explicación.

—Prometo que no será un problema. Nos acompañara en la guardia. Es una chica muy responsable, sabe muchísimo más de lo que debería para su edad.

Aarón quería reírsele en la cara mas entendía que muy probablemente él no supiera aún de los acontecimientos en el avión y no quería ser quien estuviera en medio de esos dramas absurdos de pareja. Si lo que le faltaba para ese año nuevo era que el hospital del que estaba a cargo en forma temporal fuera el escenario de un pleito de parejas.

Por eso adoraba estar soltero y el cero compromiso con una mujer. "Son tan demandantes" pensaba él "exigen fidelidad, responsabilidad afectiva, compromiso cuando uno solo busca un rollo de una noche"

Es algo que le parecía extraño al observar a Ethan y ver que, con todas las tentaciones diarias que tenía en el hospital, se mantenía fiel ante esa chica que, según él, no tenía nada de especial. Le parecía tan ordinaria y corriente. Se imaginaba otra cosa puesto que Ethan se pasaba horas y horas comentando a las enfermeras quienes los miraban de manera embelesada cuando les relataba acerca de las "hazañas", como él le llama, que llevo adelante para conquistarla. Como si fuera el único hombre del mundo que valiera la pena, cuando en realidad era un cursi de mierda.

—Puede ser la princesa de Inglaterra, pero no la quiero estorbándome en este piso.

—Es la hija de nuestros jefes. Esto es suyo en forma práctica. Puede estar aquí si se le antoja y dentro de unos años puede ser quien nos de órdenes.

Él observo a aquella joven ahora con una intriga mayor que antes. Tenía un presentimiento de que algo no estaba bien con ella. Estaba más pálida de lo que recordaba al haberla visto en aquel vuelo. No lo pensó mucho, había dos opciones: o su interno no era tan listo como él pensaba y no se había dado cuenta que su novia estaba en shock o ella estaba cursando una enfermedad y se lo había ocultado. La curiosidad ya le había picado la oreja por lo que le encargo a Ethan una paciente puesto que tenía que sacarlo de la ecuación y averiguar qué era lo que estaba pasando. Si sus cálculos no fallaban esa joven se desplomaría en el piso de emergencias de la clínica en no más que un minuto.