2. Mi amigo Gabriel.

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A la mañana siguiente, me desperté por los rayos de luz del sol que atravesaban las ligeramente las cortinas. Me dolía todo el cuerpo, y mi cabeza era un desastre, tenía una sensación muy parecida a la resaca. Me moví un poco y noté que Gabriel estaba acostado a mi lado, me bajé cuidadosamente de la cama para no despertarlo, y fui al baño a lavarme la cara.

Mientras me dirigía al baño, oí que la furgoneta estaba encendida, y que la familia estaba preparándose para salir, andaban parloteando sin parar. Por curiosidad, me detuve unos minutos frente a las escaleras y logré escuchar parte de la conversación.

—Parece que los chicos aún duermen—afirmó Asriel, la hermana mayor de Gabriel.

—Tuvieron una tarde difícil ayer,   ¿Tu hermano no te contó, hija? —comentó su padre.

—No me dió muchos detalles...

— Verás, se toparon con un mapache poseído o algo así, el hijo de Nancy lo mató, pero salió herido, Gabriel lo trajo corriendo para acá.

—Vaya...eso significa que aún quedan espectros sueltos por ahí.

—Eso me temo, cariño, y por lo que veo son muy agresivos.

—Si, aunque me sorprende que el chico haya lidiado con una de esas cosas él solo.

—La verdad, es sorprendente, yo creo que el chico es especial en cierto modo.

— ¿Y si hemos encontrado a un "purificador"?

—No te adelantes, cariño, aún no conocemos bien al muchacho, además, sería muy apresurado hacerle pruebas ahora, lo asustaríamos.

—Tienes razón—suspiró—, ¿Entonces?

— Dejemos que todo fluya, convivamos más con él, así lo conoceremos mejor y quizá descubramos cuál es su don, y si no es un "purificador", no importa, parece un buen chico, y eso es lo que cuenta. Esperemos que no se espante cuando sepa que somos hechiceros y cazadores de demonios.

— Rezo por qué así sea, padre.

— ¡Asriel, Rafael, ya vámonos! Las calles no se limpian solas, queridos— exclamó la madre.

Todos salieron apresurados, dejando la casa en completo silencio.

Después de usar el baño, regresé a la habitación y me senté a un lado de la cama. Gabriel de despertó con ojeras, y parecía muy cansado.

Le pregunté cómo se sentía y me contestó entre bostezos —Estoy perfectamente—, me encogí de hombros y le pregunté sobre lo que escuché de la conversación de su familia.

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⏰ Last updated: Sep 10, 2023 ⏰

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Las alas de un cuervoWhere stories live. Discover now