¿malestares?

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Una semana había pasado, la cita de Bell y lefiya se ruvo que posponer debido al entrenamiento de ambos, tanto el albino como la elfa habían mejorado enormemente y eso era notado por sus debidos maestros, por una parte lefiya había aprendido dos hechizos más, siendo uno de ellos de encantamiento rápido, riveria al saber eso no pudo salir de su sorpresa debido a los raros que eran esos hechizos, por otras parte bell había refinado más su estilo de pelea, ahora los movimientos del albino eran más minuciosos así evitando los movimientos innecesarios, justo ahora ambos adolescentes se ubican en el patio de entrenamiento de la sede de la elfa cada quien practicando su propio entrenamiento.

- no te pongas rígida, si calmas tu cuerpo el hechizo será más fácil de invocar.

- si riveria-sama.

Riveria daba sus consejos a la elfa de pelo rubio dorado riveria miraba el crecimiento de su alumna.

- "¿Soy yo o está creciendo más rápido de lo normal?".

Riveria pensó para su misma mientras miraba a su alumna empezar a convocar un hechizo sin embargo de la nada un gran golpe se escuchó, ambas elfas miraron la fuente del mismo esperando encontrarse con un albino tirado en el piso pero...

- jejeje, eso... No me lo esperaba.

Finn estaba incrustado en el muro de la muralla que protegía su sede, a ocho metros se encontraba Bell con el puño extendido y visiblemente agitado, por otra parte Finn se lograba ver con varias heridas, nada grave pero al final de cuentas tenía heridas en su cuerpo, con una sonrisa de nervios el hobbit miro al albino.

- ¡¡jajajaja, tomala enanin, por fin logré acertarte un golpe!!.

Bell estaba emocionado, acertar un golpe al capitán de la segunda familia más fuerte era un logro del cual estar orgulloso pero...

A Finn no le gustaba que le señalaran su estatura así que con la mirada baja se puso de pie y empuñando su lanza miro al albino que este se asustó por la expresión del hobbit.

- ahora sí ya sacaste boleto chamaco, en capítulos anteriores te dije que no por nada soy el capitán de la segunda familia más fuerte de orario.

Sin dejar que Bell dijera algo para defenderse Finn lo atacó con la fuerza que su nivel le permitia, en otras palabras no se contuvo...

XXX

- bien, nueva regla, no burlarse de la estatura de finn-san...

Estando tirado en el piso con diversos moretones en su cuerpo bell se hizo esa promesa a si mismo, el sabía muy bien que su estilo de pelea había mejorado pero aún así no era suficiente para enfrentar y vencer al capitán de la familia Loki.

- lo siento, creo que me excedí...

- no, perdón por burlarme de su estatura.

- si... Nunca me ha gustado que hagan eso, pero mira al menos ahora tienes una excusa perfecta para recostarte en el regazo de lefiya.

Extendiendo su mano Finn ayudo a Bell a ponerse de pie, su entrenamiento ya había concluido por lo que ya no era necesario seguir con sus armas así que ambos aventureros dejaron de lado sus armas.

- sabe finn-san, me agrado este entrenamiento, ¿Podría no contener su fuerza para el siguiente entrenamiento?.

- ¿Eh?, ¿Por qué quieres que haga eso?.

Por alguna razón Bell levantó su mano como si tratará de atrapar el sol con su palma.

- quiero llegar a derrotarlo, no quiero que nadie sea rival para mí.

¿esta mal embarazar a una elfa siendo un aventurero de 14 años?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora