Mírame [TaeNy] [SNSD]

La Puerta del Fondo

Los días transcurrieron tranquilos, Taeyeon cuando podía salía por las tardes, así que no sabía del todo sobre Hwang, solo salía y entraba pese a estar herida.

Taeyeon o Hwang siempre salían sin importar el clima, lloviese o no, salían.

Ese día, Taeyeon estaba en el departamento, estaba decidida a volver a la base a decirle a su comandante que no debía estar fuera de servicio. Tomo su traje y se lo puso sin gran problema, sus heridas no habían sanado, y se mantenía haciendo ejercicios para mantener movilidad aunque aún usaba el cabestrillo.

Suspiro profundo y antes de tomar las llaves, sonó su celular. Se sorprendió al ver el nombre de aquella persona que, no era alguien importante.

—¿Y ahora que quieres? —se tomo un segundo para deslizar su dedo sobre la pantalla y contestar— ¿Hola?

—Teniente Kim ¿Cómo te has sentido en el departamento?

—Uhm... —rezongo—. ¿Qué se le ofrece, doctora Choi?

—Quería pedirte un favor...

—Ya le dije que yo no hago favores. —estaba por colgar hasta que la doctora grito.

—¡Se trata de Stephanie! —Kim gruñó y se volvió a pegar el celular al oído.

—¿Ahora qué?

—Este viernes es el primer juicio para el imbécil de Park Jinyoung, me gustaría que fueras testigo para hundir al cobarde.

—Les dije ese día que yo me haría cargo, tengo el poder suficiente para no tener que testificar hechos que no le habrían importado a la policía.

—Créeme que yo aceptaría sin problemas, pero Stephanie es diferente...

—Ella no tiene porqué enterarse, a parte yo tengo cosas más importantes que hacer.

—Si la acompañas... No me des la renta de un mes, créeme que el dinero es lo que menos me preocupa.

A Kim le pareció tentadora la idea y jamás iba a permitir que alguien pusiera sus sucias manos en alguien como lo era Stephanie Hwang, una chica invidente.

—Esta bien, solo la acompañaré, más no daré ningún testimonio.

—Te lo agradezco mucho, lo que ocurre es que Seohyun no pudo ir porque está en grabaciones.

—Como sea.

—Muchas gracias, te debo una.

—Ajá.

Enseguida Taeyeon colgó. No le importaba nada más, tenía prisa y tenía que ir a reclamar su liderazgo.

Ella era una de las mejores, sino es que LA mejor del escuadrón. Su problema era que hacía todo sola y sin ninguna ayuda, si, aunque suena como algo genial, tampoco estaba bien. Kim estuvo a punto de morir incontables veces por ser la Encapuchada.

Cuando Kim estaba lista, se dio una última mirada en el espejo. Los golpes del labio ya estaban a nada de sanar en su totalidad. Abrió la puerta y enseguida abrió los ojos en par.

La belleza única de una practicante de yoga que hacía sus ejercicios con tanta tranquilidad. El ruido que había causado la puerta ni siquiera le pudo robar la calma a Hwang, quién estaba sentada en el piso con unos pantalones de ejercicio negros, top rosa y el cabello atado en una coleta, Stephanie se estiraba y movía los brazos a todos lados buscando relajación. De fondo un poco de música relajante de alguna cascada y la naturaleza en si.

Kim ladeó la cabeza alzando las cejas al notar una larga cicatriz de la oreja hasta la nuca de su compañera. Por un momento se quedó perpleja cuando Hwang en un movimiento estiraba la espalda y el cuello dejando al visto su bello perfil.