#100

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Era una isla nueva, calurosamente bella y desolada, no había mucho en ella pero la simple idea de salir a investigar en ella resultaba emocionante.

-¿Vas a querer bajar?- Nami se acercó hacia mi con pasos rápidos, la emoción en su rostro era casi palpable.- ¡Estoy lista para encontrar tesoros!

-No veo por que no.- Me encogí de hombros deseando realmente encontrar algo bueno dentro de ella.

Una isla de la qué no había leído nunca, de la qué no tenia ni un solo dato para informar, y el vacío de conocimiento estaba hecho para llenarse, así que dispuesta ya estaba para poder conocer todo acerca de ella.

-Bien, le diré a los chicos que nos acompañen por si sale algún animal peligroso, ¡Oigan, inútiles!- Llamó a algunos de los chicos, yo me reí en respuesta.

-¿A quienes llamas?- Pregunté realmente divertida con la situación, aunque claro que sabía quienes eran los tres chicos que ella solía llamar de ese modo.

Luffy.

-¡Nami! ¡Estoy por bajar a la isla! No me distraigas mucho rato.- Le dijo, sin embargo llegó corriendo y con una enorme sonrisa.

Sanji.

- ¿he escuchado un canto melodiosa? ¿Qué es lo que desean las hermosas damas dueñas de mi corazón? ¿Hay algo en lo que pueda ser útil? ¿Tal vez como esposo?- Se acercó a nosotras mostrando entre sus manos suaves un par de mochilas.- Por cierto, el almuerzo esta listo, por si gustan bajar a la isla, tendrán comida y bebida.

-Eres un maldito adulador asqueroso y acosador.- Y claro, no podía faltar el último pero no menos importante, Zoro, el malhumorado espadachín qué siempre me miraba de la misma manera.

Y sí, ahí estaba la mirada.

Llegó hacia nosotras, su mirada cayó de reojo en mi varias veces, como si no quisiera verme de frente y sus mejillas se tiñeron suavemente de color carmesí antes de que apretara los labios y se girará por completo a mi rostro.

-¿Qué demonios me ves?

-¡Esa no es forma de hablarle!- Escuché un golpe y claro que Sanji lo había intentado golpear, pero lo había detenido.- Disculpate.

-¿Y quien demonios eres tú como para decirme qué hacer o cómo actuar? Yo la veo y le digo lo que quiera.- Frunció el ceño.

-¡BASTA LOS DOS!- Nami bufó molesta separando a los dos hombres que estaban a punto de molerse a golpes.- Ni loca me los llevo juntos a la isla.- Se cruzó de brazos, pero muy tarde se dio cuenta de cierto detalle.

-Nami... Luffy ya se ha ido.- Le dije mirando a nuestro capitán correr hasta bajar del barco en dirección a la isla.- Y sospecho qué los demás también, chopper fue quien decidió quedarse en el barco, así que es el único que debe estar cerca.

-Oh, Joder.- Nami los miró con lo que parecía ser odio, alargó un suspiro y los tomó del cuello de la camisa a ambos.- Escuchen bien, idiotas, somos dos hermosas mujeres indefensas y...

-Ella no es indefensa.- Zoro me señaló con la cabeza.- Ella podría matar a quien quisiera, te lo aseguro.

-Oh, gracias por el halago.- sonreí genuinamente, que me viera como alguien fuerte era un gran elogio, sus mejillas de inmediato se tintaron de rojo.- Tú también eres muy fuerte.

-¡Sí, si, los dos son muy fuertes!- Nami parecía apresurada por bajar, así que de un empujón trajo a Zoro hasta mi.

Tambaleó un poco, incluso tuve que elevar un poco mis manos y colocarlas en su pecho para no chocar, ante mi tacto retrocedió de manera alarmante.

one shorts de ZoroxRobin.Where stories live. Discover now