3.6

1K 134 88
                                    

- ¿A qué te refieres con que no irás? ¡No puedes abandonarme! -protesta Lucas con total indignación. Sam en el casillero a su lado esboza una sonrisa culpable.

-Tengo algo que hacer. Pero Mateo y Seth irán contigo, Lu. A demás, no te acordarás de mí una vez que veas a Rivera.

- ¿Qué podría ser tan importante para perderte el campamento? -pregunta desviando la conversación. Samuel pone los ojos en blanco.

-Ambos sabemos que tú no irías si no estuvieras obligado a hacerlo. Detestas a los niños.

-No los detesto. Solo...no los tolero. Es diferente. ¡Lo es! -insiste ante la mirada incrédula de su amigo- ¿Es por esa chica? ¿La porrista?

Samuel inhala profundo mientras lo mira como si estuviera debatiendo consigo mismo si debe decirle o no la razón por la que se perderá el campamento de la NFL. La verdad es que Lucas también preferiría no ir a ese evento, pero es importante para la liga y no tiene más opción que ir.

-Bien, pero quiero que prometas que no harás todo un alboroto por esto. ¿De acuerdo?

-Lo prometo.

-Iré a visitar a Carlos.- Lucas frunce el ceño sin comprender.

-Eso es... ¿bueno? ¿Por qué haría...?

-Voy a pedirle que sea mi novio.

-... ¡¿QUÉ?! -Sam exhala sabiendo que algo así pasaría- ¡Pero...! ¡¿QUÉ?! ¡¿Cómo...?! ¡Tú...! ¡¿QUÉ?!

-Te dije que no hicieras un alboroto por esto.

- ¡Pero tú eres hetero!

-En realidad nunca dije que lo fuera- responde él con tranquilidad cerrando su locker- tú supusiste que lo era porque tuve una novia. Puedo salir con ambos.

-Diablos, ¿por qué no me lo dijiste antes? Sobre ustedes.

-Porque sabía cómo ibas a reaccionar y quería estar seguro de lo que sentía antes de entrar en esto.

- ¿Carlos lo sabe? -Samuel se encoge de hombros, pero una inevitable sonrisa lo invade.

-Creo que sí, pero quiero ir a verlo en persona. No es la clase de conversación que quiera tener por teléfono.

- ¡Sabía que había algo entre ustedes! ¡Lo sabía! Cielos esto es...es increíble, Sam.

-No quiero que hagas todo un drama por esto, Lu. Ni siquiera sé si él...

-Ay, por favor. Por supuesto que sí. Carlos está igual de enamorado que tú.- Samuel sonríe ampliamente, Navarro no recuerda haberlo visto sonreír de esa forma antes- Bueno, ahora que vas a salir con Carlos tengo la necesidad de decirte esto: él es mi mejor amigo, es como mi familia. Si le rompes el corazón haré que Tyler te persiga cada partido por lo que te resta de vida.

-Vaya, así que ya usamos a Rivera para hacer amenazas ¿eh?

-Me debe un favor- dice intentando sonar como si no fuera la gran cosa, fallando épicamente.

-No le digas nada a Carlos, ¿bien? No hasta que yo hable con él.

-Bien, pero cuando vuelvas quiero saber la historia completa.

-Me parece justo.

Se despiden fuera del estadio y Lucas regresa a su departamento porque tiene mucho que empacar. No deja de pensar en Carlos y en lo mucho que se merece algo así. Es que ellos dos encajan como si hubieran sido creados para estar juntos. Puede imaginar lo feliz que estará, después de dudar de cada palabra de Sam y negarlo muchas veces, sabe que será feliz.
Qué impredecible resulta la vida. Solo le tomó un momento, una decisión que está cambiando su vida y la de todos a su alrededor. Nunca pensó que volver a la liga sería un cambio tan radical para la gente que lo rodea. Y por la forma todo se está acomodando, pareciera que fue lo correcto.

Tiempo FueraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora