Una noche de Halloween

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Ya era la media noche y la fiesta estaba en su punto de máximo esplendor, los países que al inicio pensaron que sería solo una gala aburrida, ahora se encontraban riendo y jugando bromas, esta había sido la mayor fiesta del año ¿Pero como no serlo? si fue estados unidos quien lo estaba organizando, todos conocían su potencial y ahora, con esta gran fiesta, demostraba a todos que no habia nadie mejor que él.

La música, luces, bebidas, juegos y la comida, eran estos los elementos que conformaban la alegre fiesta, aunque la mayoría se encontrara divirtiéndose, unos cuantos countrys miraban desde las esquinas, estos eran: URSS, Inglaterra, Francia, I. Japones, Siria, China, Corea del Norte y Vaticano, cada uno por distintas razones.

URSS: No pienso ir a bailar como el resto y terminar ebrio . . . otra vez vez.

Francia: Las damas no bailamos eso.

Inglaterra: Francia y yo apostamos, quién primero se una a la fiesta tiene que acompañar a USA en sus días de depresión.

I. Japones: no pienso deshonrar más a mis ancestros.

Siria: No puedo creer que su fiesta sea mejor que la mía ¡me niego a ser parte!

China: No saber bailar

Corea del Norte: No pienso humillarme frente a mis enemigos 

Vaticano: (guarda la compostura Vaticano, ¡guarda la compostura Vaticano!) 

Venezuela suele pasar pequeños tiempos junto a Siria para que no se enoje con él por formar parte de esa fiesta "capitalista", lo que enfadó a I, Japones ya que su esposo no hacía lo mismo y solo gozaba de la fiesta.

Sin duda alguna, esa fue la mayor fiesta de la historia, USA supo como combinar todo en una bomba de alegría para crear la mayor fiesta del mundo y todo iba de maravilla, eso claro estaba.

Narra URSS

Estaba viendo a mis hijos, los menores disfrutaban de la fiesta en compañía de países nórdicos, mientras que lo mayores criticaban los pasos de baile del resto, conocía bien esas miradas, por otro lado mis niños que tenían pareja estaban haciendo otras actividades como jugar en los laberintos, tomarse fotos, competencia de comida o carrera de calabazas.

A mi parecer era una fiesta para todos, tenía espacios donde la música era completamente insoportable, pero tambien lugares tranquilos y aterradores, al igual que lugares cómodos para pasar el rato, decidí salir a tomar un poco de aire y descansar de tanta música, caminé tranquilamente por el laberinto hasta llegar al centro, era un lugar tranquilo, sin ruido y con luces vagas, podría llegar a dar miedo, pero a mi no, llegué al centro, allí habían unos espejos y un banquillo en el medio, caminé y observé cada espejo, noté que tenían truco puesto que al caminar se veía como si una sombra te siguiera, al principio me llevé un gran susto, pero luego encontré el truco y empecé a reír, solté un suspiro y tomé asiento en el banquillo - ¿Qué estarías haciendo ahora? - sabía que era tonto preguntarme eso otra vez, pero no podía evitarlo, en cada actividad pienso lo mismo ¿Qué estaría haciendo él? - bueno conociéndolo estaría con sus amigos, primero el laberinto - me puse de pie y empecé a buscar la salida -porque la fiesta es mas loca por la noche, luego las fotografías, para quedar bien y no con vomito por tanto tomar- sentía que estaba caminando en círculos - luego los juegos como carrera de calabazas, competencia de pasteles, carrera de ciegos o tres pies, peso muerto u otros, él aprovecharía que aun no estaba cansado - decidí hacer trampa, me había perdido - luego a bailar y karaoke, todo esto mientras bebe sin control, después de tanto tomar terminaría coqueteando con Italia Fascista hasta que notara que es Italia fascista, terminaría insultándolo y luego iría por otra presa quizás Irak o Irán, siempre le gustaron las personas que dieran miedo - hablaba en voz alta mientras buscaba una salida, no había nadie ahí, era libre de hacer lo que guste y eso me gustaba, luego de muchos minutos encontré la salida, pero me sentía distinto, miré el laberinto y sentí que había dejado algo allí dentro, no le di importancia y continué con mi camino, quería beber algo y pronto, mientras llegaba a las puertas traseras de la casa vi una silueta, era la de él, tenía sus manos, sus piernas, sus brazos, su cintura, su cuello, su cabeza y su cabello . . . todo era de él, me acerqué aun mas y pude escuchar su voz . . . era hermosa, estaba algo emocionado ¿Había regresado? ¿Por fin había llegado su turno de retornar al mundo de los vivos? ¿Cuánto tiempo llevaba aquí? quizás todo esto era una sorpresa, él sabía que estaba aquí y por eso llegó a saludarme, me acerqué rápidamente y quedé a unos centímetros de él, quería abrazarlo, pero no quería incomodarlo ¿Me veía bien? estaba nervioso, entonces él volteó y lo vi, eran sus lindos ojos verdes y sus dientes . . . tenían truco nunca entendí como es que se veían normales, pero a la vez dejaban marca de tiburón, no importaba eso, él se veía genial . . . pero no era él, eran sus ojos, pero no eran suyos, era su voz, pero no eran suya, era él, pero no era él.

RDA: Buenas noches papá.

Fue lo que dijo Republica Democrática de Alemania con una gran sonrisa antes de abrazar a URSS 

URSS: solo eres tú mi pequeño tiburón

RDA: Dije que no me gustaba ese apodo 

URSS: Perdón, sabes que siempre lo olvido 

RDA: No pasa nada papá

RDA soltó a su padre y continuó hablando con sus amigos, URSS los vio con algo de celos y luego de dirigir una mirada de odio a todos se fue, sí, él sentía celos de las personas que se acercaban a su hijo, pero no era culpa suya, tampoco tenía malas intenciones, todo era culpa del gran parecido que tenía con él , por otro lado Alemania no se parecía en nada, Alemania tenía mas parecido con su tío Weimar, pero RDA . . . él era la copia exacta de su padre, era como si ambos fueran el mismo, claro, URSS  intervino un poco allí, convenciendo al menor a practicar deportes, aprender idiomas, cocina, danza y muchas cosas más, nunca obligó al menor solo lo convenció de ingresar a cada una de esas asignaturas, URSS no lo sabía, pero luego de investigar en la mansión encontró distintas fotografías, medallas y copas, tambien había reconocimientos y diplomas, la familia alemana tenía muchos talentos, luego de contar todos los trofeos llegamos a la respuesta, él tenía más.

Narra URSS

Caminé por todo la casa, tenía decoraciones para Halloween y lugares específicos para perderse y terminar pegando un grito, luego de algunos minutos llegué a la mesa donde habían bebidas, pero al llegar vi que todo estaba en calma, eso era extraño y mucho, todos estaba en un circulo y habían velas a su alrededor, cogí una botella de vino y fui con ellos, tomé asiento y vi como todos contaban historias de terror por turnos, todas muy interesantes, con algo de tiempo llegó mi turno y conté un leyenda urbana que solía contarme mi padre (que por cierto estaba a como unas 15 personas de mi y me miraba con enfado, de seguro le había robado la historia que él tenía en mente) todo fue muy tranquilo, vi como algunos se asustaban y otros solo reían, pero no lo voy a negar las mejores historias fueron la de los americanos desde Canadá hasta Chile, al parecer tenían mucho que contar, al finalizar todos tuvimos que decir algo que quisiéramos y dejar como ofrenda algo dentro del circulo, todos pedían cosas como poder ver algún fantasma o hablar con muertos, todos mantenían la estética de Halloween, a acepción de algunos countrys y yo, algunos pedían una vida cómoda, otros  dinero y yo . . . yo solo pedí volver a verlo, todo me miraron raro mientras pedía eso y dejaba como ofrenda un pequeño espejo de bolsillo, no tenía nada mas que dejar, así que opté por eso y regresé a mi lugar, cuando terminaron, todos nos tomamos por las manos y recitamos un conjunto, luego quemamos todas las ofrendas y la fiesta continuó hasta el día siguiente, no recuerdo bien que fue lo que pasó, pero terminé despertando a las 9 de la noche, lo mas gracioso es que la fiesta continuó y al final todos nos despedimos a las 12 no sin antes gritan "feliz año nuevo" Eso fue gracioso, no lo voy a negar 




Apuesto que él se hubiera divertido mucho

otra ves navidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora