Capítulo 13

183 24 5
                                    

Narra Noah

Me había ido muy temprano de la casa de Venus, puesto que tenía que ir a mi casa a bañarme y arreglarme para irme a Cali, y mientras estaba debajo de la regadera, mi cabeza reproducía todo lo que Venus y yo habíamos hecho por la noche. No me arrepentía.

Me gustó darme cuenta de que, ella no tenía temor de mí, de que pudo entregarse completamente a mí; sin pena, sin miedo y sin objeciones. Cada cosa que yo quería hacerle, ella me lo permitió. En ningún momento me detuvo y eso me gustó.

Ambos sabíamos que eso ya no era parte de nuestro de juego y también me gustó esa madurez que ella tuvo por la mañana; cuando despertó y no me corrió o se escondió de mí, sino que, sonrió, me dio los buenos días y me dio un corto beso en los labios. Por las mañanas lucía como un cielo soleado, sus pecas se notaban más, puesto que se le había caído todo el maquillaje que siempre las cubría.

Definitivamente, ella era Fiona: de día era una, pero de noche era otra. Es solo que no era una conversión de princesa a ogra, sino de cielo soleado a cielo estrellado.

Terminé de ducharme y enseguida salí con el cuerpo aún húmedo, puesto que todo lo estaba haciendo a las prisas ya que, quizás y así, alcanzaría a pellizcar el desayuno que Lilith vino a dejar a mi habitación a escondidas de mis padres. Como me vieron llegar por la mañana, mencionaron que estarían esperándome en el comedor para hablar de mi falta. «No tenía tiempo para eso».

Mientras me cambiaba, tomé mi celular que estaba conectado a la corriente y le escribí un mensaje a Venus. No quería que pensara que era de esos chicos que conseguían lo que querían y al día siguiente actuaban como si no hubiese sucedido nada. Bueno, en realidad, sí fui de esos, pero con ella no quería serlo, no tenía por qué. Sabía que habíamos tenido un desliz y que quizás después de eso, se podía volver a repetir, pero también sabíamos que estábamos unidos por un juego y que en cualquier momento todo se acabaría. Lo de nosotros solo era momentáneo, aunque, nos la pasábamos muy bien. De hecho, había considerado en que podríamos quedar, así como Ann y yo; siendo solo amigos y en un futuro reírnos de lo que habíamos hecho. Podría ser posible, ¿no?

Noah:

Espero que tengas un bonito día en Southvalley. Creo que hoy no será posible que vaya por ti y me temo que tampoco podremos vernos «le pongo un emoji triste».

Venus:

«Me envía una foto en un semáforo». Voy en camino «pone un emoji somnoliento», levantarse tan temprano debería ser ilegal.

Noah:

Lo sé, todo por la culpa de Adán y Eva.

Venus:

«Pone un emoji riendo». Creí que era la única que los culpaba por todo, ja, ja, ja. En fin, que triste que no vayamos a vernos, la verdad es que no tengo planes para hoy, pero supongo que los haré con mis amigas.

Noah:

¿En serio me sigues respondiendo? ¡Vas a chocar! Diviértete, cualquier cosa que necesites, solo me llamas.

Venus:

«Pone un emoji con los ojos hacia arriba». Suerte en Cali.

Noah:

¿Me vas a seguir respondiendo? «le pongo un emoji enojado». Si fuera policía, ya te hubiese infraccionado.

Venus:

Si fueses policía, ya hubiese cometido un delito para que me arrestes «pone un emoji de diablito morado».

Noah:

El que se enamore pierdeWhere stories live. Discover now