Bang Chan: hermoso empresario multimillonario, dueño de todo Seúl; dueño de todo.
Su mejor amigo, Hwang HyunJin, cae en banca rota y necesita dinero con urgencia. Bang Chan le ofrece un trato. HyunJin y su maravilloso esposo, Lee Felix, reciben la...
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No era su momento, ni su día, ni su vida. Las piernas le temblaban y su voz se trancó, sus ojos se volvieron borrosos y el espíritu se le desplomó.
No era la manera en la que imaginó que sería su reencuentro con HyunJin, no quería que fuera tan abrupto, sin siquiera tener chance a idear una mentira piadosa que lo salve del precipicio. Sin tiempo a nada.
En los ojos oscuros navegaba una profunda pena, rabia, amor, toda una amalgama de sentimientos encontrados. Chan por su parte observó a la pareja mirarse el uno al otro, el silencio incómodo en la habitación era asfixiante, sin embargo, la mirada de advertencia de la pálida rubia le dijo que no se atreviera a abrir su bocota.
—Felix... ¿Qué haces aquí? —HyunJin fue el primero en romper el hielo, dando un paso hacia delante.
Era la primera vez en la vida que Felix se sentía tan pequeño delante de su esposo. No pudo detener las lágrimas, no pudo evitar sentir la ansiedad carcomiéndole las entrañas.
—Felix, una de las mucamas envió este té para la zorra de Bang y ... ¡Santamadredecristo! —SeungMin se quedó perplejo. Había entrado bruscamente a la habitación y sólo segundos después se dio cuenta de la presencia de HyunJin allí y a su mejor amigo a punto de desmayarse.
—SeungMin—Nombró—Debí imaginarlo. Felix nunca habría podido hacer algo así solo.
SeungMin dejó la taza de té sobre una pequeña mesa decorativa en la habitación. Encaró de mala gana a HyunJin.
Felix estaba en shock. Era un mar de lagrimas.
—¿Hacer qué ? Exactamente— Enfrentó.
La mirada dolida y molesta de HyunJin cayó sobre el rizado de pie a un lado de la cama.
—Tu eres el peor. ¿Sabes por qué no te parto la cara ahora mismo? —Miró a Felix— Porque no creo que Felix valga tanto la pena. No después de esto.
Salió de la habitación hecho una ventila de rabia y dolor, era obvio lo que la mente de HyunJin había calculado e imaginado al encontrar a su esposo después de tantos meses, y precisamente en la casa de Chan.
A Felix se le estaba partiendo el corazón gracias a las palabras dichas por HyunJin antes de marcharse. JaeWoo y Chan se miraron mutuamente, con eso la chica le dijo que debía hacer lo correcto.
Chan salió detrás de HyunJin, sinceramente ya estaba harto de tanta mierda y su cabeza era un lío; tenía demasiados problemas y una promesa que cumplir. Le dijo a Felix saldría de su vida y su matrimonio, así sería, pero debía empezar por cortar aquella mierda de raíz.
Bajó las escaleras encontrando a su hermana en la sala de estar con un libro entre sus manos. Uno de los hobbies favoritos de la rubia era leer, en casa de sus padres solía tener una biblioteca solo para ella. El rizado le preguntó por HyunJin, ella le dijo que lo vio salir al patio hacía tan solos unos segundos.
