Capítulo 16

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Capítulo 16: No puede ser.

Adana:

Salimos juntos de la ducha cada uno envuelto en su albornoz.
Tener sexo fue como encender un botón que había muerto en mi,y ese mismo botón se quedó atascado poniéndonos en un sin parar.

Prácticamente no dormimos nada.
Pero bueno...valió la pena.

Busco en el armario algo decente que ponerme para ir a la oficina ,mi ropa se basa en jeans y sudaderas así que no me queda de otro que ponerme uno de mis jeans más decentes y una blusita corta y de mangas.

El cabello me lo recogo en un moño alto mientras que Ian se coloca uno de sus perfectos trajes.

Me siento diminuta a su lado,quizás hasta insegura...pero el que el se acerque y me de un leve beso en los labios con una sonrisa le sube los ánimos a cualquiera.

Tomo mi teléfono de encima de la mesita de noche y cuando lo voy a encender para llamar a Daniela no enciende.
Aprieto el botón con fuerza dándome cuenta que es un caso perdido.

-¿Pasa algo?-Pregunta Ian acercándose.

-Parece que se rompió..-Susurro.
El pobre no debe dar más,lleva años conmigo y es muy viejo.

Ian se aleja acercándose a una de las gavetas de la mesita y de ahí saca una caja de un celular.

-¿Y ese teléfono?..-Susurro cuando veo que se acerca mi y lo deja en mis manos.

-Bueno..era mío y ahora es tuyo.

Abro la boca para quejarme pero el que me arrebate el teléfono viejo de las manos me hace callarme.

-Sin quejas.-Sentencia tomándome de la mano y llevandome fuera.-¿Desayunamos en la oficina?

Asiento con la cabeza mientras salimos de la habitación para subirnos al coche.
En el camino el engreído de mi ex jefe pone música en la radio mientras que yo me dedico a activar mi nuevo celular.
Es un iPhone última generación,nunca he tenido un teléfono así..

-Gracias..-Le susurro mirándolo.

-No tienes porque agradecerme..después de todo soy tu novio y te puedo regalar cosas,no?

Me quedo estática al oír sus palabras.
Mi..mi novio
El corazón me late rápido y no se si estaré loca pero juro que si lo miro demasiado me van a salir corazones en las pupilas.

-Mi..novio..-Susurro más para mi misma que para el.

-Claro que si.-Toma mi mano y la besa mientras la sonrisa no se borra de su rostro.

Nos pasamos todo el camino charlando,nos detenemos en un restaurante y desayunamos algo después seguimos a la oficina.

Me quedo petrificada observando el enorme edificio.
Es en colores grises y blancos,refinado pero aburrido.

Ian no duda a la hora de tomar mi mano y comenzar a caminar conmigo hacia el lugar.
Nada más entrar nos llevamos las miradas de todos.
Subimos al ascensor y nos detenemos en un lugar lleno de pequeños despachos y personas en cada uno de ellos trabajando en sus computadoras.
Su atención se fija en nosotros nada más poner el primer pie dentro.

Ian no se inmuta y algunos susurran los buenos días que como el chico no responde me dedico a contestar yo.
Caminamos un poco más y Ian me señala una puerta.

-Esa es la oficina de tu amiga.-Me dice y yo asiento con la cabeza.-¿Te muestro la mía primero?

-Si.

Camina a la izquierda y nos encontramos con otra puerta.
El la abre dándome paso a una oficina enorme pero apagada.
Tiene una gran mesa de cristal en medio y una silla rodante detrás.
Pegado a la pared un sofá enorme y una mesita delante de el mismo.
Y todo lo otro espacio libre y vacío.

Muéstrame Tu OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora