UNA GRAN AVENTURA: EL VIAJE DE LA VERDAD

CAPÍTULO 116

En el capitulo anterior llega el padre de nuestro protagonista, quien al ver que Sigmund había muerto por alguien como César se decepcionó tanto de su propio hijo

MIGUEL: - *viendo las cenizas de Sigmund* - no puedo creer que hallas perdido contra alguien como tu hermano menor - *saca un cigarro y lo enciende* - eres una deshonra para la familia Soles, que vergüenza me das - *fuma* - pero no es momento para lamentos

CÉSAR: - *serio* - un padre que esta avergonzado de su propio hijo no es un verdadero padre

MIGUEL: tú que sabes de estas cosas, solo eres un simple mocoso que morirá ante mis manos

Dicho esto Miguel saca una vez mas aquella espada que mató una vez a nuestro protagonista. Todos los soldados de sombra se preparan para intersectar cualquier movimiento del enemigo, pero se detuvieron cuando su rey les manda una señal en sus mentes sobre una nueva misión. Rápidamente todos los soldados de sombra se llevan a toda la gente de la ciudad fuera de la capital junto con los aventureros

AKAME: espera... ¿que esta pasando? - *dijo Akame viendo como un oso polar de sombra la carga en su lomo junto a Eve, Evan y Sinon*

CÉSAR: - *serio* - ellos los alejaran de la pelea que se viene, los protegerán hasta que todo esto terminé

AKAME: ¡¡no me quiero alejar!! Quiero pelear a tu lado para derrotar a ese bastardo de tu padre

Nuestro protagonista se sorprende por aquellas palabras que dijo su amada esposa, no estaría mas agradecido de tener a una mujer como Akame de su lado, pero.....

CÉSAR: agradezco eso, mi amor, pero yo no peleare en este batalla

SINON: ¡¿de que estas hablando?!

CÉSAR: - *serio mientras mira a Miguel acercándose a cada paso* - hace unas horas me encontré con alguien que puede ayudarme a detener todo esta locura de Darksnake y de sus lacayos que quieren matarme. Ese alguien tomará prestado mi cuerpo por un corto tiempo acambio de algo, así que.... quiero mantener a todos no tan lejos de esta batalla para no salir heridas....

AKAME: Cariño....

EVE: papá....

SINON: César....

EVAN: compañero.....

Todos estaban preocupados por nuestro protagonista al saber que alguien tomará su cuerpo, esto no era la primera vez que sucedía. César al ver que estaban preocupados les muestra una sonrisa

CÉSAR: - *ojos poker y sonriendo* - tranquilos estaré bien, no estarán muy lejos para así poder ver como ganaré la batalla, les prometo que regresare

Ellos sabían que algo mal saldría en esto, pero al conocer a César quien no rompe sus promesas deciden confiar en él. Así sin preámbulos ellos se van mientras gritan "ten mucho cuidado". Una vez dicho esto, nuestro prota se da la vuelta para ver a su padre quien estaba a unos metros cerca de él

MIGUEL: veo que eres un tonto al no usarlos de carnada. Si quieres morir solo entonces cumpliré tu deseo como cualquier padre lo haría

CÉSAR: - *serio* - ¡tú no eres mi padre! Nisiquiera mereces ser llamado así después de todo lo que le hiciste a mi madre

MIGUEL: ja que buen chiste, que no me consideres tu padre es patético. Dentro de ti recorre mi sangre

CÉSAR: - *ojos* - no, literalmente no eres mi padre biológico

MIGUEL: ¿eh?

CÉSAR: - *suspira* - mejor dejaré que el te lo explique

Dicho esto, una gran cantidad de fuego aparece en todo el cuerpo de nuestro protagonista. El fuego era tan caliente que Miguel apenas podía soportarlo, lentamente retrocede para atrás para no quemarse, pero en ese momento siente una gran cantidad de poder en medio del fuego. Derepente de aquel fuego sale una persona, era muy diferente a César, mediante mas alto, tenía una armadura plateada muy reluciente, sus cabello era largo y de color rojo, pero sus ojos, aquellos ojos que reflejaban la destrucción misma tenían la forma de un dragon. Aquel ser que acaba de salir del fuego muestra su verdadera apariencia mostrando que era un ser que te mata 100 mil millones veces antes de tocar el suelo