Howling for You | Merlina x Enid (+18)

1.

Febrero, Sábado 7
7:30 pm

La fúnebre mirada de una chica de coletas azabache estaba fija al interminable vacío frente a ella, dando paso fijo por el pueblo de Jericho prestando nula atención a las aburridas vidas de los normales en este pueblo olvidado por la civilización yendo en dirección a su escuela mater Evermore. Estaría cursando el semestre rodeada de idiotas que pretenden llamarse interesantes viviendo dramas hormonales adolescentes sin sentido.

Merlina Addams quién no hace mucho había cumplido los 18 años iba rumbo a su escuela para excluidos sin ningún otro pensamiento en mente más que los fuegos del infierno haciéndole cosquillas en la punta de la nariz avisándole de un nuevo adversario aproximándose a sus espaldas.

Su intuición no le falla salvo por su tardía reacción, cuando cayó en cuenta unos brazos forrados de cuero sintético de tonos rosa pastel la abrazarían por alrededor del cuello paralizandole todo el cuerpo por completo.

-¡Merlina!- la voz dulce de Enid, su compañera de cuarto se clavo en sus tímpanos

-Enid, sueltáme o te romperás algo más que una pata- advirtió Merlina sin cambiar su tono de voz habitual

La rubia se quitaría de encima y con una sonrisa temerosa solo se colocó a lado de su roomie saludándola con nerviosismo alzando una de sus manos

-Ya, ya. Se que no eres fan del contacto físico. ¡Solo que aún así me alegro de verte!-

-Enid. Prácticamente vivimos juntas-

-Si, pero te escapaste en la mañana a quien sabe dónde y mi olfato no falló, estabas en el pueblo-

La chica de coletas azabache se limito a rodar los ojos para regresar a su caminata rumbo a la escuela seguida por su loba compañera.

-Y... Bueno. ¿Que hiciste todo el día de hoy?-

Enid miraba de reojo a su contraria con muchísima curiosidad y emoción como si fuera un cachorro de Golden retriver.

-Enterré los restos de una serpiente para un ritual que me ayude a acabar con la humanidad-

Merlina hablo sin voltear la mirada, sin pestañear ni alguna sorpresa por sus mismas palabras
Enid apenas pudo reír incómoda entre dientes. Aquella reacción produjo que Merlina después de toda la mañana logrará dar una media sonrisa posando su mirada brevemente en la rubia.

-Eso y que gruñes mucho cuando duermes hasta las 2 pm. Es como si tuvieras un problema en tus cuerdas vocales que provoca una sensación parecida al ronquido de un Yeti en época de hibernación.-

En su respuesta parecía haber un tono pícaro al pronunciar sus palabras

Enid, haciéndose la indignada respondió de inmediato

-¡Hey! No puedo evitarlo, además puedes admitirlo. Soy completa y absolutamente Adorable y sueno como el ronroneo de un gatito-

-Eres una loba. Por ende eres un canino, no felino-

-Ughhh ¿Podrías por una vez dejar esas palabras técnicas y divertirte un poco señorita superioridad?-

-Solo digo los hechos como son. La diversión sin sentido solo proviene de una consciencia sin reglas ni determinación propia que evalúe su nivel de estupidez-

Estas palabras ocasionaron un bajón de emociones en Enid, desapareciendo su sonrisa e imitando a Merlina mirando al frente caminando ya sin algún ánimo. Por supuesto que la primogénita de los Addams notaría este cambio brusco en la actitud de su licántropa compañera.