❦| Si te elijo a ti... ©yeonbin ¡ཿ྇

Episodio 12

—¿Por qué viniste hoy si tienes cara de culo?

Soobin niega, mientras que juega con sus fideos.

—¿Cara de culo? Esta es mi cara, Tae.

—Lo sé, pero, normalmente andas con una sonrisa de oreja a oreja, que pareces hasta un conejo. Pero ahora no. Eso es raro.

—No estoy acostumbrado a asistir a clases, ¿sabes?

—¿Por qué viniste hoy entonces?

—¿Acaso no puedo venir?—se colocó a la defensiva.

Para él era un sacrificio venir a su universidad.

—Es que me parece raro.

Soobin suspira.

—¿Tu novio te terminó?

—Sabes que está en las reglas no tener pareja.—rueda los ojos.

—Sí, pero, ambos sabemos que nunca cumples las reglas.

—Sí. Aún así no tengo novio. No hay alguien que esté a mi altura.

Taehyun ríe.

—Apuesto a que nunca usas condón.

—Sólo no lo uso cuando veo el expediente de un cliente y compruebo que está limpio.

—Aún así.

—La cosa es que, estoy bien, ¿sí?

—¿Qué hay de Choi? Tu nuevo cliente, ¿acaso hoy no quiere tu servicio?

Aprieta los labios.

—Hasta después de dos semanas. —repite como su mente grabó su voz.

—¿Qué y eso por qué?—interroga intrigado.

Soobin no responde.

Pero Taehyun mira su cuello y eleva una ceja.

—Parece muy reciente su último encuentro.

—Ayer.

El chico lo inspecciona mejor.

—¿Entonces?

—Sólo me dijo que no atienda a otro más porque tiene miedo de alguna enfermedad de transmisión. Y que no es asunto mío porqué ya no quiere mi servicio.

—¿Y? ¿Aceptaste?

—Sí.

—¿Entonces?

—Es que no lo entiendes, Taehyun.

—No le veo el problema. Si aceptaste es porque hubieron beneficios, ¿no?

Soobin lo mira feo.

—Sí. Y no sé porque me siento mal.

Taehyun aprieta los labios.

—Sólo que... trabajo para ganar dinero diario. Y ya no dejar de ganar durante dos semanas me afecta. Lo único bueno es que él paga muy bien.

—¿Y supongo que folla bien?

—Como no tienes idea. Supongo que me sacó de mi rutina abruptamente.

—Igual. Tenías que estudiar. Podrías repetir, ¿sabes?

—Mi padre puede pagar para que eso no suceda.

—Lo que hace el dinero. —suspira.—Aún así, aprovecha el tiempo que tu cliente te dio y estudia un poco.

—Lo sé. —murmura algunas cosas y luego habla. —Cierto. ¿Viste a Beomgyu por si acaso?—prefiere salirse del tema.